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El resto del día la pasamos  recorriendo las diferentes tiendas que había en la plaza. Una gran variedad de comida fue lo que más nos llamó la atención, resultó que la comida mexicana no nos bastó y terminamos probando un poco de todo lo que había. Terminamos más que satisfechos, al punto en que creí que mi estómago reventaría. Jeon no soltaba mi mano, de vez en cuando bajaba su mano entre mis muslos para hacer travesuras pero no volvió a suceder lo que pasó con aquel mesero. Sigo sintiendome apenada por él.

-Sólo estaba siendo un poco posesivo-Admitió. Ahora eran cerca de las 8 de la noche y caminabamos descalsos por la orilla de la playa.
La arena se colaba entre mis dedos, los cuales movía para sentir la calida arena. Apesar de que ya comenzaba a refresacar esta seguía caliente al estar expuesta todo el día.

-Bien, eso no le quita lo vergonzoso-Reproche.

-¡Admite que fue divertido!-Casi grito riendo. Lo seguí sin poder contenerme dandole así la razón.

-Tienes un punto-Acepte intentando controlar mi risa.
Jeon sonrió en mi dirección observando mi rostro muy de cerca, poniendome nerviosa de pronto.

-Umm, ¿Ocurre algo?-Pregunte admitiendo lo nerviosa que me encontraba. Su sonrisa tierna apareció y su mano subió a mi mejilla para acariciarla con su pulgar. Cerre mis ojos disfrutando de su calido tacto.

-Eres hermosa-Susurró contra mis labios. Me estremecí y estoy segura de que no fue por el frío.
Rozó sus labios con los míos sin llegar a cellarlos como tanto esperaba.

-Jeon..-Suspire cuando su mano disponible me atrajo a él por la cintura.

-Preciosa-Sus ojos se cerraron juntando nuestras frentes. Mi respiración se atascó en mi pecho, que tenía un ritmo acelerado. Bajo su mano de mi mejilla a mi pecho, en la zona del corazón para sentir los latidos descontrolados y rápidos que este brindaba. Su sonrisa se amplio y sus ojos se abrieron.

-El mío esta igual-Tomo mi mano llevandola a su pecho. Y efectivamente su ritmo cardiaco estaba igual de descontrolado que el mío.

-Es lo que..

-Provocas en mí-Me interrumpío.

-Así es-Sonreí en respuesta. No estaba segura de qué más decir, pero tampoco creía que las palabras fueran necesarias en estos momentos.
Sus dedos recorrieron mi brazo hasta llegar a mi muñeca. Mis dedos, cada caricia suya, por miníma que esta fuera dejaba en llamas mi cuerpo. Ardía en cada parte que tocaba, dejandome con ganas de más.

-¿Qué sientes ahora?-Pregunto observando nuestras manos entrelazadas. Lo mire confusa.

-¿A qué te refieres?

-Si, ¿Qué sientes ahora? Como en está situación. ¿Miedo? ¿Felicidad? ¿Tristeza? O acaso ¿Algo con más profundidad? Que crees que incluso no hay palabras que lo describan a la perfección.

-Yo...-No sabía que podía decir cosas como esas. Me refiero a que, la mayor parte del tiempo nos la pasamos discutiendo o teniendo encuentros de mayor nivel. Las conversaciones y cosas de este tipo no era algo usual. Por lo que me tomó por sorpresa ver este lado de Jeon.

-Comenzaré yo, y probablemente después de esto no quieras o no puedas hablar debido a que te quedaras sin palabras pero lo entendere. Tu cuerpo reacciona inmediatamente de acuerdo a lo que sientes. Tu pecho se acelera si te emocionas.. o.. bueno-Sus mejillas se incendiaron haciendome sonreir. Extrañaba ver sus mejillas sonrojadas. Significaba que se avergonzaba de decir algo, y eso, era debido al Jungkook que conocí en preparatoria-No es momento de esas cosas-Prosiguió-Ahora mismo me siento nervioso, ansioso, emocionado y con una frecuencia cardiaca que probablemente pueda matarme por un infarto pero ¿Sabes? Así me iría feliz por que al menos la pase junto a ti. Quiero caminar contigo de la mano por todas partes. Quiero estar contigo el resto de mi vida, y luchare para que eso pase. Puede que las cosas lleguen a complicarse un poco en el futuro. Pero si lo que sientes por mi, no sólo es deseo carnal o lujuría entonces podremos salir de eso y seguir juntos pase lo que pase.
A veces debemos tomar decisiones que lastiman a los demás, y nos sentimos culpables por ellos, pero de alguna manera, estás decisiones son las que nos harán felices. Tal vez no en ese momento, pero si más adelante. Puede que pienses que esto no tiene sentido, pero lo tendrá-Tomo mis manos y las llevó a sus labios para depositar suaves besos-Ahora, quiero que sepas que lo que siento por ti es mayor a lo que he sentido por alguien en mi vida. Que desde que tengo memoria... has sido mi..-Sus mejillas se incendiaron por segunda vez e inclino la cabeza para ocultar su rostro-Mi.. primer..-Subió lentamente su rostro hasta que nuestros ojos se encontraron. Un intenso brillo se instalo en ellos-Mi primer amor-Sonrió con nerviosismo. Soltó mis manos para jugar con las suyas.

-Jungkook yo..-Me interrumpió corriendo su rostro a otra parte.

-No, espera, si piensas rechazarme entonces dejame terminar primero.

Suspire fastidiada por sus cambios de humor y asentí.

-En caso de que las cosas lleguen a cambiar después. En caso de que llegues a decir que te arrepientes de esto. Por favor, solo te pido que creas que mis sentimientos son sinceros-Su voz se iba apagando conforme terminaba de hablar. El dolor estaba impreso en sus palabras. Su rostro ahora miraba fijamente la arena en sus pies.

Tome con delicadeza su rostro, obligandole a mirarme. Sostuve sus suaves mejillas acariciandolas con mis dedos.

-Lo que sea que llegue a suceder después no es algo de lo que debas preocuparte ahora. Lo que siento por ti también es fuerte. Sin embargo no puedo especificar qué es. Nada cambiara lo que ahora siento por ti, nada ni nadie. Supongo que dices esto por temor y no me preocupare por eso. Confío plenamente en ti Jeon Jungkook, así que ahora, por favor. Olvida todas esas cosas que atormentan tu mente y solo disfruta el momento. Vive conmigo, siente conmigo-De igual manera susurre en sus labios las últimas palabras.

-_______-Suspiro.

-Se mío...-Y no lo deje hablar más, mis labios se sirnieron sobre los suyos sin pensarlo, de inmediato correspondió sin objetar.

-Soy tuyo...-Y el beso se prolongo por más tiempo. Con tan solo el sonido de las olas estrellandose contra las rocas para fundirse como uno solo. De la misma manera en que Jeon lo hizo hace unas horas.

Enseñame a dar placerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora