CATORCE

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-¡Hyung! ¡s-suelteme, por favor!- chillaba sonrojado el alfa, su mayor lo había secuestrado.

Ambos se encontraban en el apartamento del omega, al cual le importó una mierda las clases e hizo que ambos se fugaran de la universidad. Hoseok quería... No. Él necesitaba respuestas y las iba a obtener aunque eso significará tener a su hombre atado a su cama por lo que resta de vida. Aunque pensándolo bien... esa no era una mala idea... tal vez y si~

-¡Hy-hyung!- volvió a chillar el menor tratando de safarse de aquellas esposas, las cuales ni enterado estaba el alfa en qué momento se las puso.

Hoseok salió de sus pensamientos morbosos, bueno, no por completo pero si lo suficiente como para prestarle atención a su delicioso muñequito. Observó al alfa y casi se moja ante la imagen.

Atado a su cama, con las mejillas sonrojadas, orbes brillosos, despeinado y algo sudado por el forcejeó que tuvieron, la camisa la tenía levantada dejando algo de su tez bronceada y levemente marcado abdomen. Todo él lo tenía embobado. ¡Maldita sea! Estaba loco por su alfa.

-¡Papacito, si así está el caminito ya me imagino el pueblito!- ronroneo el omega acercándose más a la cama para luego subirse sobre esta, gatear y finalmente terminar a horcajadas sobre el menor.

Taehyung se tenso ante la acción tan atrevida del peli-rojo y trató de quitárselo de encima, pues aquello no se veía conveniente para su desición, porque él también es humano y como cualquiera, Kim deseba a ese lindo y provocativo chico; sin embargo, sus movimientos solo crearon una placentera fricción entre su miembro y el redondo culo de Jung, causando que ambos lanzarán un jadeo de sorpresa y rápidamente conectarán sus miradas. Tae estaba muy avergonzado, quería que la tierra se lo tragué y lo escupa lejos de Hoseok, quien por su lado, se había puesto más deseoso, la fiera que estaba tratando de tranquilizar se volvió loca queriendo salir y ser marcada por ese hombre debajo suyo. Oh sí, lo quería, lo anhelaba, lo necesitaba...

-Pero que travieso me saliste bebé...- murmuró el omega cerca de su oído para luego morder el lóbulo de su oreja.

Taehyung se estremeció y tembló, tanto su lobo como él estaban asustados... Kim no quería eso para su omega. Las lágrimas se deslizaron por sus calientes mejillas, el dolor que ambas partes sentían las recibió el dañado corazón del humano extendiéndose por todo su pecho, ahogó un sollozo y habló.

-N-no... hyung... por favor- le suplico su menor. Un alfa le estaba suplicando a un omega- no... n-no arruine su vida conmigo...- el murmullo resonó en las cuatro paredes y en los oídos de su pareja destinada.

Hoseok se paralizó por breves segundos, la calentura bajo de un solo golpe y rápidamente enfocó su mirada en el sombrío y triste rostro de su Tae. Su corazón se estrujó sintiéndose increíblemente desecho al pensar que él había sido el culpable del dolor y sufrimiento de su amado.

-¿Q-qué?... Tae- el nudo en su garganta y estómago le impidieron formular más vocablos.

Un sollozó por parte de su dongsaeng le hizo aullar por dentro en dolor y agonía.

-Hyung... no desperdicie su vida conmigo... y-yo soy todo lo contrario de un buen alfa de alto rango. Yo no lo merezco a usted- los ojos opacados por las lágrimas, desquebrajados del alfa lo veían solo a él- un omega tan hermoso, bondadoso, de sonrisa encantadora... una peculiar personalidad, joven, que no le teme a nada y a nadie... alguien libre...- la sonrisa rota pero hermosa del que estaba debajo suyo lo destrozaba cada vez más. Incluso sentía las mejillas empapadas por el dolor insoportable- de un linaje excelente, hermoso y que tendría a cualquiera en la palma de su mano bailando a su gusto. Jung Hoseok, mi hyung... u-usted merece a alguien mejor que yo...- ambos se sintieron morir al ser pronunciado aquello, ambos se estaban rompiendo.

Pero eso, en el pensar que se le había impuesto al alfa, era bueno. Así, su hermoso peli-rojo se daría cuenta de lo equivocado que estaba al fijarse en él. Hansung se lo dijo, el omega estaría bien si no es a su lado...

-Tiene más oportunidades Hoseok hyung... hay tantos alfas de buena familia, fuertes, que lo protejan, cuiden, de alto rango, guapos y que también le pueden cumplir en todo lo que quiera...- Tae tenía la voz rota, las lágrimas no amainaban la salida y ya no sabía ni porque su corazón seguía latiendo al estar rechazando al amor de su vida- y-yo... yo... no tengo nada que ofrecerle... hyung~

-¡Es suficiente!- demandó el omega con voz firme, la sangre le hervía y se sentía demasiado dolido.

A decir verdad, todo el era un mar de sensaciones, emociones encontradas y ¡agh!
Su lobo estaba igual o peor que él. Mientras que Tae se encogió en su lugar, su lobito igualmente se sintió intimidado.

-¿Quién te dio el maldito derecho para que elijas de quien puedo o no enamorarme?- la pregunta venía cargada de furia y hielo- me la pueden venir sudando los demás alfas; yo al único que quiero, deseo y necesito es a ti, Kim Taehyung- gruñó jalando los cabellos del alfa para arriba, viendo mejor su perfecto rostro- ¿no ves como me tienes? me estoy volviendo loco, un enfermo total por ti, alfa idiota, te amo Kim ¿me oíste?- beso su frente- quien te haya metido eso de no ser digno para mí, te lo demuestro a ti y al que se atrevió siquiera a mencionarlo, tu eres perfecto, amo todo de ti... te amo solo a ti- beso su la punta de su nariz.

El menor estaba más que desconcertado, su corazón latía desenfrenado, sus mejillas estaban calientes y las lágrimas dejaron de recorrer su cara. Verdaderamente se sentía abochornado y un gran estúpido.

-Nunca me había sentido de esta manera. Somos destinados y eso nadie lo puede cambiar, ni siquiera tu bebé- se acercó peligrosamente a sus labios- nunca podrás escapar de mi, así que lo vuelvo a preguntar. Kim Taehyung ¿quieres ser el padre de mis hijos?- el corazón del alfa se calentó y tras pensárselo una vez más, como en la primera cita que tuvo con el omega, mando todo y a todos a la mismísima mierda, en especial a ese hijo de puta. Por qué el amaba, ama y amara a ese omega. Su omega.

-S... si, quiero serlo hyung- y sonrió muy feliz.

El peli-rojo le correspondió y se acercó más hasta que sus labios se encontraron por primera vez con los de su alfa, era un roce suave, tierno, lleno de tantas emociones, pero que con el pasar de los minutos, se volvió más apasionado y con, obviamente, dobles intenciones.

Jung lamió el labio inferior de su menor y este abrió la boca con timidez, Hobi sonrió dentro del beso e introdujo su lengua, explorando, saboreando y mordiendo todo a su paso; topandose después con la dulce lengua del contrario, la cual no ignoro y la enredo junto a la suya.

Ambos ahogaron un gemido dentro de ese húmedo, caliente y amoroso beso.

Y como dije, todo esto iba con segundas intenciones...

-Mmm... Tae, juguemos un poco- sonrió de lado el omega al separarse de los hinchados y deliciosos labios de su hombre- yo seré la mamá y... tu el papá- se acercó a su oído y soltó una pequeña risa maliciosa- y hagamos cosas de grandes ¿si?- beso su mejilla y descendió hasta su cuello.

-Ho-Hobi hyung... ¡mgh!-

Pero esto lo veremos en algún capítulo jodidas pecadoras de Ms. Pervert.
Besos😘😘

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-Hola 😆

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Mr. Pervert |BTS| •Vhope• [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora