CUARENTA Y UNO

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5:25 a.m.

»Despierta«

Sus ojos se abrieron con pereza, todavía estaba oscuro y sentía sus brazos vacíos ¿no se suponía que estaba bien abrazado a su omega? Se reincorporó aún somnoliento, se fijó que el lado del peli-rojo estaba desordenado y la puerta de la habitación estaba entreabierta.

Frunció un poquito el ceño, se levantó sintiendo algo de frío por el sereno de la madrugada, salió de la habitación y el aroma de su pareja lo guío hasta la cocina. Se alertó cuando el olor se hizo más intenso golpeando sus fosas nasales, escuchó un jadeo seguido de varios gemidos bajos. Se sorprendió y antes de cruzar la puerta recordó que para ese día el celo de su peli-rojo estaría presente.

Suspiró y se armó de valor. Total, ya lo había hecho... más de una vez así que esto no tendría porque ser diferente.

-Aah... alfa... mgh- los llamados hacia su pareja salían sin control mientras que sus dedos penetraban con fuerza y desespero su entrada.

Tae se quedó inmóvil ante la imagen que le estaba dando; Hoseok se encontraba desnudo, recargado en uno de los mesones, dejando su mojado y necesitado culo alzado, las piernas separadas escurriendo de su lubricante natural y con tres dedos metidos en su cavidad.

Tae se sonrojo y casi da media vuelta para irse corriendo a esconder por la pena que le dió. Sin embargo, no lo hizo. No quería dejar a su omega en ese estado; tragó saliva e inconscientemente dejó salir más fuerte su olor mezclándolo con el de su pareja.

Hobi se dió cuenta y volteó en su dirección, lloriqueo sacando sus falanjes, colocando sus manos en cada mejilla para después separarlas, invitando a su alfa a que se enterrara en él sin piedad.

-Tae... aah... por favor mgh- suplicó sin dejar de verle.

El lobo de Kim gruñó rasguñanado su interior, sus ojos se tornaron dorados caminando a paso firme y lento. Quería torturar un poco al de cabello rojo; Jung se mareo ante el intenso olor de su pareja cuando estuvo detrás de él.

Tae le observó descaradamente, mordiéndose el labio inferior y sonriendo de lado. Fascinado, maravillado, con hambre; así quedó el menor al recorrer sin pudor alguno todo el manjar que tenía por delante. ¡Dios! exquisito, un deleite. Estaba ansioso de comerse completito al mayor. A su omega.

Posó sus manos sobre la espalda de Seok y recorrió está con las yemas de sus dedos, acariciando y adorando la tez perfecta, nivea y caliente de su novio. Hoseok suspiró y curvo su cuerpo ante el toque ardiente de Taehyung.
Estaba tan sensible. Gimió bajito al sentir como una de las grandes manos de su alfa se estampó con algo de fuerza sobre su nalga izquierda.

Kim sonrió al presenciar como la tierna carne se tornaba de un apatecible rojo, se inclinó sobre el cuerpo de su pareja y hundió su nariz en la nuca del peli-rojo; la traviesa lengua paseándose en la extensión, jugando con sus dientes y chupando con sus labios varias porciones, hasta que llegó a la marca.

-Mio- gruñó apretando la estrecha cadera del omega y pegando más sus cuerpos - si es que se podía- - eres mío, Hoseok...

-¡Alfa!- el mayor sintió el orgasmo golpearle, con tan solo esas palabras se había venido manchando el mueble delante suyo y el piso.

El rubio mordisqueó el lugar en donde residía su sello de pertenencia, sintiendo sus incisivos picar por la anticipación de volver a conectar con la carne de Jung.

Sin embargo, antes quería disfrutar enterrandose en otro lugar.

-T-Tae... por favor... ¡mgh!- las oleadas de calor recorriendo su cuerpo aumentaron al sentir el glande de su menor acariciando su entrada.

-¿Puedo?- sonrió con burla restregandose contra el hermoso cuerpo de su pareja.

-Hazlo Taehyung...- murmuró observándolo por sobre su hombro. Kim gruño- hazme el amor alfa...

Y con ello el rubio tomó por la cadera a su pareja penetrandolo de golpe, causando que el omega gimiera bastante alto y el menor casi corriendose por lo delicioso que se sentía estar dentro del mayor, sus paredes apretandolo, la humedad y calidez eran el Edén para él.

No habían palabras; las miradas, caricias, embestidas y besos hablaban por si solas. Todo estaba tan a flor de piel que sentían sus cuerpo a punto de explotar.

Taehyung se hundió hasta el fondo y maltrató la próstata del encelado omega, haciandole desgastar la garganta y derramar lágrimas por el asfixiante placer.
Situó sus labios sobre la marca y dejando que sus instintos otra vez lo guiasen, marcó de nueva cuenta al peli-rojo.

El lazo se tenso y ambos se liberaron alcanzando el clímax; Hoseok sobre el mueble -otra vez- y Tae dentro de su mayor. Desencajo sus colmillos y saliendo de su omega hizo que se volteara.

Una verdadera obra de arte después del orgasmo.

Suspiró satisfecho, acercó sus labios a los contrarios y al juntarlos los dos sintieron que estuvieron aún más completos. Era la jodida gloria.

Cuando el oxígeno fue necesario, se separaron para observarse a los ojos. Sonrieron y se abrazaron.

Claro que, esa madrugada sería una de las muchas agitadas que iban a tener.

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-Hola♥

¡Le damos empiezo al Lemmon🌚!

Espero les haya gustado, el domingo tal vez suba otro (bueno, si es que no me ataca la inspiración más tardecito😏)

También quería agradecerles por sus leídas, votos y comentarios hacia este historia, el amor y apoyo que le entregan es de lo mejor y más reconfortante 😍
Gracias, las amo♥♥😘

Y bueno, me despido😻😻
Adiós 🙋♥

Mr. Pervert |BTS| •Vhope• [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora