DIEZ

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Estaba nervioso. Realmente se estaba cagando de los nervios. Sentía que sus mejillas iban a explotar y su corazón salirse corriendo de su pecho. Ya se imaginaba diciéndole adiós a aquel órgano.

–¿Entonces bebé? ¿qué quieres hacer?– el omega lo tenía de la mano, mientras le veía espectante y con ternura.

¡Agh! a Hoseok le encantaba verle así de nervioso, sonrojado, tierno, apetecible y... ya se estaba saliendo de los bonitos pensamientos y pasando a otros.
Suspiró como todo un idiota enamorado y eso colocó más nervioso a alfa.

–Umm... ¿po-podríamos ir por un he-helado, hyung?– murmuró bajando un poquito la cabeza al no aguantar los orbes intensos de su mayor.

Vaya que el omega le cohibía con esa brillante y penetrante mirada. Pareciera... pareciera como si se lo comiera con los ojos... ¿o solo lo estaba imaginando?

–Esta bien, muñequito. ¡Vamos por helado!– y jaló al menor para que ambos comenzarán a buscar algún kiosco que vendiera helados.

–¡Alfas, betas y omegas! ¡sean bienvenidos a nuestro concurso para ver quién come helado sin partirlo primero!– la beta que estaba sobre una tarima sonreía y estaba rodeada de mucha gente.

El omega sonrió más y jaló a Tae para que se unieran al tumulto de personas.

–¡Para empezar, necesito a cinco alfas aquí arriba!– exclamó señalando la cantidad con sus dedos. El de cabello rojo volteó en dirección de Kim y este se colocó más nervioso.

–¿Subirás TaeTae?– interrogó haciéndole ojitos al de cabello castaño.

–Y-yo...–

–¡Ya saben qué él que gane tendrá de premió un pastel de helado!– y el omega pegó un grito de emoción. Mientras más helado mejor ¿no?

–¡Tae lo necesito para vivir!– chilló moviendo al alfa de un lado a otro.

El más alto lo pensó por unos segundos, pero en menos de un parpadeó ya estaba subiendo hacia la tarima. Los ojitos brillosos y el pucherito que había hecho su hyung lo habían idiotizado y hasta ese momento se percató de lo que estaba ocurriendo.

–¡Bien! primero les explicaré las reglas– la señorita sonrió maliciosa y le hizo una seña a un omega para que trajera el helado– ustedes cinco tendrán que comer un helado en forma hongo. ¡Ojo! no pueden morderlo; solo lamer o chupar. Cuando pasen diez minutos y sí un no lo han partido a la mitad, entonces ganan– explicó entregándole a cada alfa el helado.

Los participantes vieron a la beta con el ceño fruncido a excepción de Tae quien estaba más que sonrojado, mientras que el público los veía riendo y burlándose de ellos. Pues los dichosos helados en forma de hongo, más bien parecían pequeños penes sobre un palito de madera.

–Entonces ¡comencemos!– y una pantalla se encendió dejando ver un cronómetro marcando diez minutos exactos para luego iniciar a descender.

Los alfas se vieron entre sí y luego al público. Suspiraron fuertemente y prociguieron a cumplir con el reto. Tae veía todo rojo su helado; la parte larga del postre era de vainilla, la punta era sabor fresa y en ella había escurriendo leche condensada. Se mordió el labio y decidido a cumplir con el capricho del omega peli-rojo, saco la punta de su lengua y lamió primero la base, cosa que le gustó porque era dulce y refrescante.

Sonrió y con un poquito más de confianza degusto contento el helado; lamía la punta y baja por la base, dejando también escaparsele uno que otro pequeño gemido de gustó. Taehyung lo estaba disfrutando, después de todo el helado era su postre favorito.

Y mientras el chupaba y lamía el honguito, el público junto a los alfas que también participaban le veían sonrojados. Todos embelesados con la magnífica vista de ese tierno castaño al gozar de lo dulce.

–¡Q-quedan cinco minutos!– anunció la beta tratando de controlarse y seguir con el reto, pero vaya que Kim se lo dejaba difícil.

Hobi veía solo a su precioso hombre, en como su lengua se enrollaba en el tronco y pasaba con suavidad a lo largo de este, sus labios rojitos, brillosos y algo hinchados por lo frío succionaban la punta y sus mejillas todas sonrojadas...
¡Mierda! se veía tan malditamente caliente, y se preguntaba si así se vería mientras él lo montaba; poniendo las mismas expresiones y dejando escuchar esos soniditos de satisfacción.

De pronto sus pantalones se estaban volviendo cada vez más ajustados y de igual forma sentía su entrada empezar a lubricar levemente. ¡Rayos! tenía que calmarse o sino terminaría entrando en celo ahí mismo. Y Hoseok no quiera eso ¿verdad?

Bueno, al menos no entre tanta multitud.

–¡Tiempo!– y todos pararon, Tae retiro lentamente el helado de su boca y suspiró, vaya que el calor estaba fuerte ese día.

Kim volteó a ver a un sonrojado Hoseok, estremeciéndose cuando esos oscuros, deseosos y brillantes orbes se posaron en los suyos. Jung se mordió el labio sintiendo como su lobo rasguñaba por querer sentir desesperadamente al alfa sobre él tomadolo, pero también quería abrazarlo por lo adorable que se veía. ¡Haa! una duda existencial ¿qué hacer? ¿cuál de las dos tomar?

–¡Okey! Según nuestro jurado el ganador es... ¿cómo te llamas lindo?– pregunto al menor y este se cohibio encogiéndose de hombros.

El omega de cabello escarlata solo pudo fruncir el ceño y gruñir por lo bajo ¿quién se creía esa estúpida para mirar y tratar así a SU alfa?

–Tae-Taehyung... Kim Taehyung...– murmuró el de mayor altura y la chica le sonrió.

–¡Eres el ganador Taehyunggie!– chilló y el mencionado pudo ver que era verdad ya que los demás participantes tenían desecho su helado mientras él lo tenía aún completo, algo derretido pero sin aún partirse a la mitad.

Sonrió con timidez y volteó a ver al omega que sonrió dejando sus pensamientos asesinos hacía 'esa'. Suspiró para después empezarse a abrir pasó entre toda las personas y acercarse a su lindo chico. Porque aunque no sean nada, Jung Hoseok ya lo consideraba como suyo... y él, le pertenecía a ese hermoso castaño.

–¿En dónde lo comemos hyung?– interrogó al ya estar con su mayor y enseñarle el delicioso pastel de helado.

En mi casa y de paso te como a ti ¡bombón!– soltó el omega pasando su lengua por su labio inferior agarrando la cintura de su menor pegando sus cuerpos y sonrojado otra vez a Tae.

–¡Hyung!– Kim casi se despedía de su aletargado corazón, desvió la mirada y sintió como un besito fue plantado en su mejilla derecha.

Hoseok le sonrió con ternura, contagiandole el gesto, solo que el de él era más tímido. Seok río enternecido y tomó la mano de su alfa para seguir con su cita. La cual iba cada vez mejor.

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-Hola ♥

¿Qué les pareció?
Espero que disfruten lo azucarado que estoy intentando hacer para estos dos, porque después se viene lo amargo😆

Solo les aviso😁😊

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Mr. Pervert |BTS| •Vhope• [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora