Parte 31

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tenía mi cabeza en su pecho y escuchaba el latido de su corazón, como si fuera una música con un ritmo tan especial y tranquilizador, pero en un segundo pude percibir como ese latido lento y con un perfecto compás, se volvió rápido y desordenado.-Luna, porque te fuiste y esa estúpida nota que dejaste.- como no tenía que salir en algún momento, ahora ya se porque se aceleró su pulso y el ritmo de sus latidos, está nervioso.

-qué quieres que te diga Damián.- no quiero moverme de ese sitio, no quiero dejar de sentir su piel, sus pulsaciones y de oler su perfume.-Luna, no te vayas por las ramas contesta.- este se empieza a mover y a vestirse, yo hago lo mismo pero solo me coloco la ropa interior y mi camisa, aunque solo me tapa la parte de arriba ya que es corta, él por su parte solo se pone él bóxer y los pantalones.

camino hasta la cocina para buscar un poco de agua.-malditasea Luna, siempre haces lo mismo.- casi me atraganto con el agua, que yo hago lo mismo cuando, está loco.-que dices Damián, lo mismo de que, si la conversación más larga que hemos tenido es cada vez que me decías que me ibas a destruir y como era eso que me decías que iba a caer en lo más profundo.

-OK, no me lo tienes que echar en cara ya te pedí disculpas por todo y te demostré que me tienes a tus pies que no puedo vivir sin ti, y tu te vas y dejas una nota.- se toca la barbilla con el dedo índice.- a ver como decía "gracias por esta bonita alucinación".- me le quedo viendo atentamente sin decir nada y veo como mete su mano en el bolsillo del pantalón y saca un papelito.- claro que no me esperaba que me lo dejaras detrás de un recibo de tienda de ropa interior o fue a propósito para tentarme.

-dame eso.- voy directo a él y sacarle el papel, pero este sube la mano y por supuesto no le llego, pero nuestros cuerpos se pegan y produce un escalofrío por todo mi ser.- vale, vale, tú ganas.- me alejo de él y voy de nuevo hacia la barra de la cocina, apoyó el brazo derecho de la barra y quedó de lado mirándolo, Damián no me quita la mirada de encima y es tan intensa que me empieza a incomodar.

me miró por un momento y decido ir a mi cuarto a colocarme un short, cuando salgo me lo encuentro en el sofá con la cabeza hacia atrás y los ojos cerrados, está tan sexy sin la camisa con solo el pantalón y en esa pose que parece uno de estos modelos de marca de jeans.-que tanto me miras, si sigues así me vas a gastar.- abre los ojos, se echa hacia adelante colocando los codos en sus rodillas y cruza los dedos al frente como cuando vas a rezar, me mira fijamente y sube una ceja.-vas hablar ahora o piensas torturarme todo lo que queda de sábado.

-bueno todavía son las 12 así que tengo día para rato.- me sonrió, con una risa sarcástica, es que de verdad que quiere que le diga.- en serio Luna, no estoy jugando, que está pasando que más quieres de mi parte.- protegerme y proteger mi corazón de él eso es lo que quiero, pero me muero cada día más por él y el solo hecho de verlo alejado me produce malestar.

cuando iba a contestarle tocan muy fuerte a la puerta.-Luna ábreme, necesito urgentemente hablar contigo.- es Mateo y por su voz a estado tomando de eso no hay duda, miro rápido a Damián, este se para y camina hacia la puerta para abrir pero lo agarró del brazo.-no espera, que haces.

-voy abrir, no ves.- lo empiezo a empujar hacia mi cuarto.-no quiero que te vea por favor, déjame a mi hablar con él, no quiero joder todo con él.- Damián me mira con cara de pocos amigos, pero entra en mi cuarto y antes de cerrar la puerta me agarra del brazo.-me quedo aquí como buen niño si después hablas conmigo de todo Luna, pero de verdad sin rodeos, mira que nada me cuesta salir y partirle la cara si se pone necio y decirle que estamos juntos.-lo miro con cara de espanto.-vale tu ganas, pero no salgas, no quiero que peleen.

-muy bien.- pero antes de soltarme me da un beso en los labios y quedó como embobada por un instante, corro hasta la puerta pero antes de abrirla.-que quieres Mateo.- escuchó como le da un golpe a la puerta y respira profundamente.- necesito hablar contigo.- las mano me tiemblan no se si abrirle la puerta, que quiere decirme, será que quiere pelear más conmigo.

Entre el Amor y el Odio  {COMPLETA} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora