Emancipation - BadGirlGoesWorse

Capítulo 33.- Revelaciones Desde El Infierno 1

Enero pasó a febrero en una rutina relativamente pacífica y Harry tuvo la sospecha de que debería haberlo sabido en retrospectiva. Había sido demasiado pacífico. Dumbledore no había hecho su movimiento en ese momento, tampoco Voldemort, por lo que el problema los había tomado por sorpresa viniendo de una fuente inesperada, Ronald Bilius Weasley.

Para abreviar, de alguna manera había logrado seguir a Hermione sin ser detectada el día de San Valentín y la había sorprendido besuqueándose con Theodore en un pasillo desierto del castillo. Sin embargo, en lugar de explotar en ese momento, había hecho algo increíblemente furtivo y se lo había contado a Dumbledore de inmediato, haciendo que pareciera que había visto a Theodore chantajear y casi obligarse a ella mientras decía que no tenía otra opción más que casarse con él, ya que nadie más la querría como nacida muggle de todos modos.

Sin embargo, Dumbledore no solo se había tragado eso, sino que se había tomado el asunto muy en serio, mucho más en serio de lo que Ron había esperado. Al parecer, esperaba que el director se ocupara de su rival en silencio y en privado. En cambio, había convocado a los cuatro Jefes de Casa, así como al presunto delincuente y la víctima, a su oficina e inició un tribunal inmediato donde Ron fue llamado para dar testimonio. Huelga decir que el resultado no había presentado a Ron de una manera muy buena a los ojos del presente. McGonagall, en particular, estaba lista para escupir fuego y lo había suspendido del Quidditch por el resto del año, personalmente ofendida de que uno de los suyos se rebajara a propagar una calumnia tan atroz.

Sintiéndose rencoroso, Ron había revelado la identidad del "Prometido" de Hermione en el medio de la sala común de Gryffindor la misma tarde, y se había ganado una semana de detención. Al pensar en ello, Harry se alegró de que ya no se quedara allí o podría haberlo matado en el acto. Sin embargo, Ginny no tuvo tales reparos, no solo maldijo las luces diurnas de él, sino que escribió un mensaje a casa. Harry se había preguntado por qué tanta prisa al principio, hasta que recordó que al hacerlo, Ron no solo había ofendido a Hermione y Theodore, sino que en realidad al Jefe de la Casa Nott y su esposa "A ser" lo que justificaría un desafío a un duelo mágico. En consecuencia, los padres Weasley llegaron a la escuela a la mañana siguiente y ofrecieron una disculpa pública formal en nombre de su familia, que fue amablemente aceptada, y sacaron a Ron de la escuela por el resto del fin de semana. Harry ciertamente no le envidió su suerte.

Decir que todo Hogwarts estaba bastante entusiasmado con el drama social que se presenta ante sus propios ojos, sería una subestimación. La vid estaba teniendo un día de campo y Harry solo podía imaginar lo que luciría El Profeta del lunes por la mañana o peor, Corazón De Bruja, con esas referencias enfermizamente dulces de Romeo y Julieta que volaban alrededor. Si ya era tan malo, no quería saber qué pasaría cuando supieran de Draco y Ginny. A juzgar por sus rostros tampoco esos dos.

Theodore y Hermione estaban escondidos en los nuevos cuartos familiares de Harry y Severus en ese momento y se quedarían en la habitación de invitados hasta el lunes por la mañana como mínimo. Harry suspiró y sacudió la cabeza con leve diversión, sonriendo para sí mismo a pesar de todo. La gente siempre sería gente, no importa si era mágica o no. Severus colocó un beso en sus labios sin decir palabra, de acuerdo con él.