Emancipación / Autor original: BadGirlGoesWorse/ Traductor: The Snarry's Archivist
~Disclaimer: Los personajes son propiedad y autoría de JK Rowling y WB.
Resumen: ¿Que queda por que hagan los dependientes cuando son traicionados por aquellos en qui...
Harry y Severus llegaron lentamente a la conciencia. Era el sentimiento más extraño, pero muy bienvenido, como separar una entidad en dos en cuerpo, mente y magia. Tan pronto como sucedió, ambos se dieron cuenta al mismo tiempo de lo que debía haber sucedido. La Triple Unión ahora estaba completa.
Harry se puso las gafas, que se habían caído y aterrizó en la cama junto al brazo de Severus en algún momento y convocó su varita mágica. Tan pronto como tocó su palma, el Trazo se disolvió en una niebla dorada y desapareció, confirmando su asunción irrevocablemente.
Sus ojos se encontraron y sonrieron de forma un tanto maníaca. No se había planeado, es verdad, pero el resultado fue muy satisfactorio. Harry se sentía como el dueño del mundo, absolutamente embriagador, con el poder corriendo por sus venas, pulsando en tándem con su corazón. Y Severus obviamente estaba sintiendo lo mismo.
De repente, otra entidad les hizo conocer su presencia, haciéndoles saltar y cubrirse, buscando frenéticamente a su alrededor, en busca de su aparente diversión. Un momento después, sus rostros se pusieron en llamas cuando se dieron cuenta de que era solo el castillo en sí. Hogwarts les agradeció la energía que habían aportado, aunque involuntariamente, y les informó de los eventos que habían sucedido en su ausencia, así como las medidas que había considerado necesarias para llevar a cabo en su nombre, y les deseó lo mejor para ellos. su futuro y se retiró dejando atrás a dos asombrados magos.
—¡Santa Madre de Merlín! —.
Severus solo pudo estar de acuerdo. Nunca había oído hablar del castillo interactuando tan directamente con nadie además del Director, e incluso entonces, solo en emergencias extremas. Esto era más que solo un privilegio, ¡era un honor!
Harry negó con la cabeza y lanzó un Tempus Maximus. Domingo 23 de febrero de 1997, las diez y media. Miró hacia Severus y volvió a mirarlo a los ojos. Según el relato del castillo, la mierda burbujeaba peligrosamente, pero aún no se había desbordado. Teóricamente, todavía tenían algo de tiempo antes de que tuvieran que aparecer y eso era exactamente lo que necesitaban en ese momento. Necesitaban probar sus nuevos niveles de poder antes de que pudieran enfrentar el mundo, y Dumbledore en particular, nuevamente. En segundo lugar, tenían negocios con los Duendes para concluir, debido a la madurez de Harry. Y, por último, tendrían que informar a La Nueva Orden que estaban a punto de reaparecer, y con florituras, no menos.
>> ¿La Cámara de los Secretos? —.
Sus estómagos vacíos eligieron ese momento para quejarse, haciendo que ambos sonrieran levemente.
>> Las cocinas, luego la Cámara de los Secretos—Harry enmendó.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La cena ya estaba en marcha cuando Harry y Severus regresaron a Hogwarts después de su visita a Gringotts y entraron al Gran Comedor. Se dirigieron a sus respectivas mesas sin llamar la atención, tomando sus asientos notados solo por sus vecinos inmediatos, que en el caso de Harry al menos lo estaban esperando. La mesa principal, por otro lado, no había esperado encontrar de nuevo al Maestro de Defensa entre ellos. Después de escuchar todo tipo de acusaciones y teorías de conspiración volando en la sala de profesores, que el director no tuvo la gracia de disputar o confirmar, sus colegas lo saludaron con miradas sorprendidas y confundidas, lo cual Severus simplemente decidió ignorar para dirigirse al profesor Sterling dos asientos lejos de su lugar.
