Cold Dreams [Starrison]

XVI

Richard Starkey.

Muchas canciones de amor que pasaban por la lista aleatoria de canciones me recordaban a George, y no sabía si eso estaba bien o mal. No podía recordar la última vez que me había gustado alguien, y tampoco sabría cómo decir si Geo de verdad me gustaba, prefería pensar que sólo era una confusión.

Apenas entré en el cine que George trabajaba me quité los audífonos que a mis oídos acompañaban. Habíamos quedado en que yo pasaría por él a su trabajo para luego cargar con el agotador día que nos esperaba.

Faltaba poco menos de un día para la gran competencia a la que George y Paul se someterían, y sabía que George estaba nervioso, y lo estaría aún más por todo el ajetreo que el día anterior a la competencia traía. Así que yo me ofrecí a acompañarlo a todo lo que tenía que hacer, Charlie estaba con sus abuelos maternos, así que era un pequeño peso menos.

Pude divisar el esbelto cuerpo de George a la distancia, estaba acompañado de otra persona, que por obvias razones yo no conocía.

Se veía tan lindo, tenía puesto un pantalón negro, una camiseta roja con el logo del cine y una gorra del mismo estilo que la camiseta, y también una mochila colgaba de sus hombros, por lo que supuse que su turno ya había terminado.

─¡Richard!─ Exclamó con una bonita sonrisa dibujada en sus labios apenas me vió.─ Te estaba esperando.

─Uh... Sí, lo siento por la tardanza, no pasaba ningún autobús.─ Ambos reímos un poco, pero nuestras risas fueron interrumpidas por un leve carraspeo de garganta.

─Oh, claro, que tonto.─ George rió nervioso y observó al hombre que estaba posicionando a un lado de él.─ Richard, él es Brian, mi jefe. Y Brian, él es Richard, un amigo muy especial.

─Es un placer, Brian.─ Dije estirando una de mis manos hacia él, cosa que imitó para poder estrecharlas en forma de saludo.

─Le estaba contando a Brian sobre la competencia.─ George caminó unos pocos pasos hasta posicionarse a mi lado, con esa sonrisa que no se había borrado desde que yo había llegado.─ ¿Irás?

El hombre al parecer lo pensó un poco, pues un segundo después le dió una respuesta no muy convincente al muchacho que estaba a mi lado.

─Haré todo lo posible por ir, pero lo más seguro es que si estaré ahí mientras tú estés patinando.
─ Brian llevó una de sus manos hasta el cabello de George y lo revolvió, haciéndolo reír.

[...]

George bajó de mi espalda con un salto. ¿Razón del porque yo lo cargaba? Se había cansado a medio camino y yo me ofrecí a llevarlo y luego de un montón de regaños hacia mí por tal ocurrencia, aceptó. Su cuerpo era muy ligero, así que no fue un problema cargarlo toda la otra mitad del camino.

─¿Es necesario que lo corte?─ Preguntó pasando una de sus manos por su ya largo cabello.

─Lo es, mañana es la competencia y tu cabello así dudo que resista el peinado.

─Tonta competencia.─ Refunfuño mientras cruzaba sus brazos por sobre su pecho con el ceño fruncido.

─¿Qué tal si hacemos un trato?

─¿Qué clase de trato?

Solté una pequeña risa al ver como tiraba su cabeza hacia atrás, con una sonrisa interesada y una ceja levemente levantada.

─Tu entras a esa peluquería...─Comencé a hablar mientras me acercaba un poco más hacia él.─ Te cortas el cabello y luego cuando tengamos que ir al supermercado te compro cualquier cosa y en la cantidad que quieras.─ Terminé por decir.