Capítulo 38: Intentarlo.

2.6K 248 145
                                    

Estaba recostado boca abajo en su cama, con su mejilla derecha aplastada contra el colchón. Sus ojos estaban muy rojos.

No podía parar de repetir en su cabeza el beso que se había dado con Hyukjae en el pasillo, hace más o menos una hora y media.

Se tocó los labios con su dedo índice, recordando el tacto de los de Hyukjae y también la sensación que le dejó aquel beso.

Se había sentido bien. Amaba los besos que estuvo compartiendo con el mayor el día anterior y éste día, porque en serio le habían parecido sinceros... y ese sentimiento era tan reconfortante luego de tanto tiempo de incomunicación, discusiones y mentiras. Aunque también se le hacía un tanto raro.

Aun así, todavía estaba triste. Su conversación con Hyukjae lo remeció por completo, las cosas que dijo el mayor calaron en él. Era duro oír que la persona que quieres no confiaba en ti, que había tenido miedo de que lo hirieses. Ahora podía entenderlo.

Unos días atrás, había dicho que "esperaba haber lastimado a Hyukjae".

Pero ahora que podía percatarse de los sentimientos de Hyukjae, que podía volver a reparar en ellos, sabía que no le gustaba eso.

Hacerle daño no estaba bien, y sobretodo, nunca arregló nada... solo lo empeoró.

Esa satisfacción pasajera que sentía al hacerlo, era tóxica y luego se transformaba en un dolor que le quemaba por dentro.

Unas lágrimas escaparon de sus ojos y mojaron el cobertor.

No estaba bien lo que había hecho... él no estaba bien. Hace tiempo había dejado de estarlo. Siempre fue vengativo, pero su situación con Hyukjae lo llevó tan al límite que lo llenó de veneno, hasta convertirlo en lo que era ahora.

El mayor se había equivocado... mucho.

Pero él también lo hizo.

Siempre fue consciente de que sus acciones no eran las de un ángel, pero pensaba que Hyukjae se merecía eso. Sin embargo, en este instante veía que su manera de actuar complicó y dañó más las cosas.

"No quiero ser de esta forma" Pensó, restregándose los ojos "Es doloroso..."

Se sentó en la cama y se llevó las rodillas al pecho.

Estaba sintiéndose tan jodidamente frágil en aquel instante... la realidad era que no quería estar solo.

Necesitaba un abrazo.

Se estuvo sintiendo muy solo durante el último tiempo. Se había alejado de sus compañeros, había sido desagradable e irrespetuoso con ellos, cuando no hicieron más que preocuparse por él.

Al menos ya había arreglado las cosas con Heechul, pero con los demás tendría que disculparse.

Agarró su teléfono que estaba en el mueble junto a la cama y se metió a la lista de contactos. Por un instante, sus dedos vacilaron sobre el número de Hyukjae, pero luego pasó de largo y llamó a Heechul.

Las cosas no eran tan fáciles. No podía pasar de tener esas enormes peleas con el bailarín a llamarlo para que viniese a abrazarlo así nada más. Después de todo, él mismo le había dicho que se marchara luego de que se besaran, porque quería pensar.

Así que llamó a Heechul, que contestó rápidamente.

—Hyung, ¿puedes venir conmigo?— Pidió Donghae, con una voz algo rara debido al llanto.

Heechul llegó bastante pronto al departamento, preguntando cómo había ido todo apenas puso un pie dentro. Donghae le explicó mientras se mojaba el rostro en la cocina.

Bad Blood (Eunhae)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora