Capítulo 4: Igual que hace años.

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Eunhyuk tenía la vista clavada en los dedos de su mano, que se movían casi de forma involuntaria sobre su regazo. Al desviar un poco su mirada, pudo ver a Donghae sentado a su lado en una postura muy similar. 

De nuevo sintió que el enojo se apoderaba de su ser, pero un manotazo en la cabeza lo hizo sosegarse muy rápido. 

—¡Hyukjae, ¿me estás oyendo?!— Preguntó Leeteuk, observándolo desde arriba con furia en su rostro.  

El peli negro tragó saliva. Hace tiempo no veía al mayor tan enojado. 

—Sí, hyung...— Contestó con un hilo de voz. Miró a sus demás compañeros que estaban de pie, formando un semi círculo alrededor de él y Donghae. 

Se encontraban dentro del camerino. La entrevista acababa de terminar, Donghae y Eunhyuk no soltaron ni una palabra más tras regresar de la pausa, se mantuvieron tranquilos el resto de la transmisión. Nadie les ordenó hacerlo, sabían que debía ser así. 

Ahora sí se estaban llevando un merecido sermón.  

—Pues espero que estés diciendo la verdad, porque lo que hicieron allá afuera no puede volver a repetirse. 

Eunhyuk asentía pesadamente. En eso, Donghae habló por primera vez desde que había iniciado el regaño: 

—Perdón hyung, pero nada habría sucedido si él no se hubiese entrometido cuando yo estaba respondiendo la pregunta— Excusó, arrugando la nariz con desagrado— Yo no hice nada malo... ¡él empezó! 

—Oh, por favor Donghae... ¿en serio te vas a defender de esta forma?, ¡"él empezó" es algo que un crío diría!— Replicó el líder. 

—Pero... es la verdad— Insistió el castaño, volteando el rostro avergonzado. 

—Lo que yo he dicho— Empezó Eunhyuk, con el ceño profundamente fruncido. No dejaría que se hiciera la víctima— Ha sido una broma, ¿acaso no nos lanzamos chistes entre nosotros todo el tiempo?... ¡solo ha sido eso, pero alguien aquí es demasiado sensible! 

—¡No seas cínico!— Le gritó Donghae, golpeando el brazo del sofá con un puño.

—Mira quien habla— Contestó el bailarín, viéndolo a los ojos. 

—¡Cállense!— Exigió Leeteuk— ¡No más discusiones, me van a volver loco!

—¡Pues entonces que no me dirija la palabra!— Espetó el peli negro, cruzándose de brazos— ¡No quiero hablar con él!

—Ah, ahora no quieres pero cuando estábamos dando la maldita entrevista sí que tenías ganas de hacerlo, ¿cierto?— Ironizó Heechul, enarcando una ceja— ¿Por qué demonios le dijiste eso a Donghae?, ¡sabías que se iba a enojar, es más, eso es lo que buscabas, ¿no?!

—... No— Negó por inercia— Eso no es cierto. 

En realidad, ni él mismo sabía por qué lo había hecho, solo sabía que definitivamente mentía al decir que se trató de una broma inocente, aunque no lo admitiría. 

—¡Lo has hecho para molestarme, eres una mierda!— Acusó el castaño.

—Ni que fueras tan importante.

—¡Te aborrezco, Hyukjae!

—Yo me voy— Dijo Shindong, con cara de cansancio— Soportar peleas de idiotas no es parte de mi contrato— Caminó hacia la puerta y salió. Pronto Yesung lo siguió. 

—Estoy muy decepcionado— Pronunció Leeteuk, dirigiéndose a los dos menores que ahora evitaban mirarse— A pesar de que les pedí portarse bien no me hicieron ningún caso, no les importó en lo más mínimo tratar de que las cosas funcionaran. 

Bad Blood (Eunhae)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora