Prisión Fantasma

Un poco de clase no cae mal de vez en cuando

Mientras le contaba lo que había pasado, ella terminó de hacer todo y se sentó a mi lado. Parecía escucharme con mucha atención y seriedad, por lo cual intenté contar las cosas de la misma manera. Mientras lo hacía, intenté no voltear a verla, ya que toda la seriedad en mi ser desaparecía al verla vestida de esa manera.

Cuando terminé mi historia, al igual que anteriormente quitando las partes innecesarias, ella ya estaba sentada comiendo. Yo comencé a comer junto a ella. Ella se quedó en silencio un momento y habló hasta trabar el pedazo de pan que había mordido, ayudándose con el café.

-Me parece muy interesante. Ahora quiero la historia completa.

-¿Cómo así? -le pregunté, algo extrañado.

-Bueno, -dijo acomodándose en el sillón.- creo saber que solamente la parte más superficial de la historia. Quiero saber todo sobre lo que viste y lo que planeas hacer a partir de eso.

El escuchar lo que estaba diciendo me pareció tan extraño que incluso comencé a asustarme. ¿Cómo era ella capaz de saber esas cosas? No había hablado de eso literalmente con nadie.

-¿Acaso hablo dormido? ¿Cómo sabes esas cosas?

Karin se levantó, recogió las cosas y se las llevó para comenzar a lavarlas.

-Parece que no sabes mucho de estas cosas así que te haré una introducción. -comenzó.- Hay varias cosas muy interesantes de las habilidades, poderes o como quieras llamarles. Aunque veas que hay muchos tipos, completamente diferentes los unos con los otros, la verdad es que solo hay tres grupos grandes. ¿Conoces es Shin y el Ssen verdad?

Asentí.

-Pues todas las habilidades partes de eso. Un grupo son las habilidades que utilizan Shin, otro de habilidades que solo utilizan Ssen y el último grupo es de las cuales utilizan ambos. Cada uno de los tres grupos tiene diferentes ramas, pero eso es otro tema. Mi habilidad, utiliza el Shin, pero de una manera muy especial. Para mi, el Shin es como ondas eléctricas que corren a través de los cables de una computadora y hacen que pueda transmitir videos. Solo tocando una persona, puedo leer en el Shin la vida de las personas. Cosas que han vivido, e incluso, el Shin me deja leer los pensamientos de las personas.

Tras decir eso se detuvo un momento, imagino que sabía que tenía que procesar las cosas lentamente. El funcionamiento de las habilidades de repente se volvió más complejo que solo nacer con ellos y tener la suerte de que tocara uno que no fuera inútil. Aparte que la inclusión de la explicación de la suya me dejó un poco confundido. Solo me hacía falta un golpe en la cabeza.

-¿Osea que sabes lo que estoy pensando en todo momento?

-No en todo momento. -respondió rápidamente.- Solo cuando me concentro. Sería una molestia leer siempre la mente de todos.

-Si eso es cierto. ¿Qué estoy pensando ahora?

-Ahorita tienes miedo de que haya visto cosas que no le haz dicho a nadie.

-Eso es un pensamiento que le vendría a cualquiera a la mente tras escuchar algo así. Muy fácil. Otro intento. ¿Que estoy pensando ahora?

-En... dos grupos de personas, uno vestido de pollo y otro de vaca golpeándose frente a una carnicería... ¿Por qué piensas en eso?

-Nada en especial. Solo quería que fuera difícil. Te creo entonces.

Karin suspiró.

-Muy bien, no nos desviemos del tema. El caso es que contigo me pasa algo bastante curioso. Hay ciertos momentos en los que pareces tener lagunas mentales. Grandes vacíos negros a los cuales parecer haberse tragado parte importante de tu historia. Pude ver tu encuentro contigo mismo, algo que no soy capaz de entender, pero cuando trato de buscarlo a él individualmente, parece que me bloqueara la entrada. ¿Quién o qué es? Parece que ni tu mismo lo sabes. Pero me parece raro que apareciera justo luego de tu... Enfrentamiento.