ÁNGEL SMITH
¡Ángel las llaves! — ordena Said.
Me las busco por todas partes, sacándolas de mi pantalón y se las lanzó.
Me cuesta trabajo respirar después de haber salido como locos del hospital, cómo puedo me subo al carro, Said se apresura a encender el auto y sale a toda prisa del lugar.
—Eso estuvo loco, no lo vuelvo hacer — llevo mis manos a mi pecho.
Said suelta la risa, ante mi voz entre cortada.
—Necesitas adrenalina para saber qué estás viva.
—¡Estás loco!
—Algo— se encoje los hombros.
El celular de Said empieza a sonar una y otra vez, puedo ver desde la pantalla el nombre de León, intento tomarlo cuando Said lo toma primero para pagarlo.
—¿Por qué lo hiciste, estaremos en problemas?
—Ya lo estamos desde el momento que decidimos salir del hospital de esa manera, tranquila todo estará bien.
Me doy cuenta que el camino no es la dirección de mi casa ni la de él, jalo aire al seguir costando respirar todavía un poco.— ¿Said a dónde me llevas?
Su mirada está fijamente en el camino.
Noto que se detiene frente a una plaza y mira por todos lados al parecer buscando la entrada del estacionamiento, da con ella rápido y le entregan un boleto el cual se lleva a los labios para seguir conduciendo, espero que me diga que tenía en mente, en cuanto se estaciona.
—Solo iremos por algo de ropa — baja del auto sin decirme más.
Lo sigo y me emparejo a su paso —¿Algo de ropa, para qué?
—Necesitas ropa Ángel — me señala con el dedo una tienda.
—¿Ropa para qué? —vuelvo a preguntar —¿¡Said!?— digo a punto de la desesperación.
— No preguntes solo toma una muda muy...—Se me queda viendo de pies a cabeza —sólo toma algo con gracia.
Me quedo pensando en la palabra ¿gracia? viendo una tienda que para nada yo compraría la ropa de los aparadores ya que son muy atrevidos y demasiado cortos, miro por todos lados cuando siento el jalón de mi brazo.
—Andando.
Estoy en el vestidor probándome varios vestidos, faldas y crop top que eligió Said para mi y ninguno me hacía sentirme cómoda y la inseguridad que tenía era demasiada, varias cicatrices de operaciones que he tenido y con esta ropa eran más que visibles.
—¿¡Lista Ángel!? — pregunta Said del otro lado de la cortina.
—¿Said qué pretendes?
Trato de bajarme lo más que pueda una falda azul cielo de brillos a juego con un crop top del mismo color, me acomodo mis puntas nasales saliendo por fin del vestidor me encuentro con Said y él me sonríe de inmediato.
—Increíble sabía que harías buena elección, vamos se nos hace tarde y no se te ocurra preguntar de nuevo — pasa sus dedos por mi pelo y me besa la frente — estas hermosa, voy a pagar.
#
El sol se metió de una manera tan rápida y no estoy muy segura dónde estaba, las calles adornadas con demasiada luces y un mundo de jóvenes caminando en ellas. No había notado lo bien que se ve Said, él también había pasado a comprarse ropa. Una playera negra a juego de unos pantalones de vestir grises, su cabello pelirrojo era lo que más amaba de él.
—¿Todo bien?— sonrie al darse cuenta que lo observo.
—Sí.
Se detiene ante un alto.
—Préstame tu celular.
Dudo pero se lo doy al instante viendo como busca un número en mis contactos llevándose mi celular al oído.
—Sí, dame unos minutos ya estoy llegando — cuelga y me regresa mi celular —Te encantará mi sorpresa, ya verás
—¿Cómo estás tan seguro?
—Olvidas que te conozco tan bien y no puedes ver a quien le marqué.
Entramos por un estacionamiento, trato de ver el título pero no alcanzo a leerlo ante la luz tan fuerte del letrero. Apaga el motor de la camioneta indicándome que lo siga, cuando puedo ver que estoy parada fuera de un antro me paralizo.
— Listo — sonríe con fuerza — ¡Sorpresa!
Mi sonrisa desaparece viendo una multitud enorme entrando —¡¿es neta Said?! No me van a dejar entrar soy menor de edad lo recuerdas
—¿Por qué crees que te pedí que usaras este tipo de ropa?
—¿¡Qué!?
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Without me✔ [Completo]
Teen FictionLa vida de Ángel Smith es muy difícil ya que nació con cardiopatía congénita, unos estudios le cambiaron todo con un diagnóstico que no esperaba. CÁNCER DE TIROIDES pensando que su final ha llegado. Dos hermanos serán su perdición, entrando en un tr...