SAID TRUSWELL
Estaba en la sala de espera, jugaba con mis manos intentando tranquilizarme o mínimo esperaba que pasara rápido el tiempo ante tanta espera. Miro a mi alrededor y cambio miradas con los chicos, era ya de noche y nadie se había tomado la molestia de venir a decirnos que había sido de la operación de Ángel.
Me pongo de pie al no poder aguantar más la espera, decido ir a buscar a León, era claro que él sabría algo.
Llego hasta su consultorio, toco en espera de respuesta pero no me responde, medio abro la puerta pero no hay nadie, cierro la puerta y estoy por ir lo a buscar a otro lado cuando escucho su voz. Camino unos pasos hasta llegar al consultorio de la doctora Yenesis..
Estoy por tocar, cuando noto que la puerta está medio abierta, se puede ver claramente a mi hermano de espaldas como el cabello rubio de Merelin, León pide disculpas y segundos después los dos se besan, intento no hacer ruido e intento cerrar la puerta pero el rechinido me delata lo cual hace que León se voltee de inmediato.
—Perdón — me disculpo — no quise interrumpirlos.
Me sonríe Merelin —Descuida, pasa.
—Yo sólo vine ha.... — olvido que iba a decir y suelto la risa al ver la cara de León —¿¡Ya volvieron!? — suelto con más fuerza la risa.
Rueda los ojos exasperado mi hermano—¡Borra esa sonrisa Said!—exigió peligrosamente, amenazando.
Merelin lo empuja.
—Deja al amargado, ya sabes cómo es él.
Suelto la risa junto a ella.
—¡Yo no soy amargado!
Nos miramos Merelin y yo al momento — ¡Claro que sí! — respondimos en una sola voz.
—Bueno ya— bufa — ¿Que pasó Said?
—Solo quería saber ¿Qué sabes de Ángel? ya son casi las ocho de la noche y no nos han dicho nada — digo sin más.
Se pasa sus manos por el rostro lo cual es claro que está cansado —Espérame voy para allá.
—Está bien, los dejo— le sonrió a Merelin — no tardes León—salgo del consultorio.
Mi hermano sale casi atrás de mí, no luce contento si no todo lo contrario su semblante es serio, a veces era difícil saber qué pensaba Leòn pero sobre todo saber si esta bien, caminamos por el pasillo en silencio cuando le pregunto algo sin más.
—¿Ya regresaste con Merelin?
Se detiene en seco —¡Por supuesto que no!
Su respiración se acelera como sus ojos se agrandan, negando una y otra vez con la cabeza.
—¿Te encuentras bien?— Estoy por tocarlo cuando se hace para atrás.
—¡Tú no viste nada! ¿ok?
—De acuerdo, no volveré a preguntar nada.
Estaba fastidiado que León fuera así, él mismo ni se entendía cuando se trataba de las mujeres que lo rodeaban ¿que no le gustó el beso? Evito mirarlo al seguir caminando.
Llegamos hasta cardiología, puedo ver como se detiene enfrente de la habitación de Ángel, llega de inmediato Claudia dándole el expediente con un carro lleno de medicamentos y soluciones en el.
—Ángel ha despertado doctor— le comenta Claudia y ambos leen algo que no alcanzo a ver.
—¿Ya se le administró la solución?
Claudia le señala algo en la hoja — no, apenas se la voy a poner.
Los sigo y en cuanto estoy por entrar me cierran la puerta en las narices.
ÁNGEL SMITH
Abro los ojos intentando acostumbrarme a la luz que es demasiado fuerte, quiero moverme un poco pero puedo sentir una molestia en el pecho, me doy cuenta que me pusieron un catéter junto a más aparatos, siento una pequeña molestia al intentar volver a mover, toco el botón que está junto a mi cama y de inmediato se abre la puerta, entrando Claudia.
—¿Cómo te sientes Ángel?
Muevo mi mano dándole a entender que más o menos.
—Deja voy por otra solución le avisaré al médico que despertaste de la anestesia.
La veo salir y mis ojos se van a dónde está el oso polar que Said me había regalado, muevo la cabeza recordando lo loco que puede llegar hacer mi amigo algo que me hizo sonreír.
La puerta se vuelve abrir y mis ojos se encuentran con esos ojos que había visto tantas veces haciendo que mi corazón se acelere, intento hablar pero la tos no me lo permite.
—Tranquila, Ángel
Me quita la mascarilla de oxígeno, tomando las puntas nasales, sus dedos rozan con mis mejillas y siento pequeños toquecitos.
Puedo ver que no era el mismo de la última vez que lo vi cuando me regaló un beso en la frente, algo en èl había cambiado ¿que sucedía ahora? su mirada se queda en una esquina de la habitación.
—¿Qué es eso?—Pregunta volviéndome a ver.
—Un oso—contesto si más.
—Ya se que es un oso ¿Pero que hace un peluche aquí?— dice serio.
—Me lo regaló Said
—¡Oh qué bien!—contesta sarcásticamente.
Era mi imaginación o León estaba más que enojado con un simple oso de peluche que su hermano me había traído, toma el expediente intentando no mirarme más.
—Todo estará bien, la molestia irá disminuyendo con el paso de las horas, vendré al rato para saber cómo sigue, hasta luego señorita Smith
Me quedo sorprendida al escucharlo referirse a mi como señorita ¿dónde me perdí? Sus cambios de humor me estaban provocando dolor de cabeza.
LEÓN TRUSWELL
Salgo de la habitación de Ángel demasiado molesto, sentía que en cualquier momento iba a explotar, el que Merelin se le hubiera ocurrido besarme he interpretara mal el que yo hubiera ido a pedirle disculpas. Que mi hermano nos viera en esa situación, Ángel no merece mis cambios de ánimo ¿por que me molesta demasiado el oso que le regalo mi hermano?
Me acerco a la sala de espera dónde están todos, al instante todos me aturden ante tantas preguntas, les pido con señas que bajen la voz y me acerco a la madre de Ángel.
—Señora Smith puede pasar a ver a su hija solo le pido que no tarde mucho debe descansar
—Claro Doctor.
Le doy el paso para que siga por el pasillo, Said va detrás de ella pero lo tomo del brazo deteniéndolo.
—¿A dónde crees que vas tú?
—No es obvio.
—Que gracioso.
Se suelta de mi agarre —¿Ahora por qué estás enojado conmigo?
—Me sacas ese oso de ahí, no lo quiero ver más en esa habitación, sabes perfectamente que no se permite nada de eso¿¡Me escuchaste!?
—Sí— aprieta los labios Said
Lo vuelvo a regresar a mi y gruñe mi hermano.
—Ah otra cosa, no quiero por ningún motivo que le digas a Ángel lo que viste en el consultorio....
—¿por qué no?
—¡Por qué no!
Nos retamos con las miradas.
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Without me✔ [Completo]
Teen FictionLa vida de Ángel Smith es muy difícil ya que nació con cardiopatía congénita, unos estudios le cambiaron todo con un diagnóstico que no esperaba. CÁNCER DE TIROIDES pensando que su final ha llegado. Dos hermanos serán su perdición, entrando en un tr...