Bajo presión.
Esas dos palabras resumían perfectamente la situación actual de Taehyung.
Parecía ser un día común y corriente en la oficina, excepto por el hecho de que estaba más estresado de lo normal y desde que abrió el pequeño 'regalo' de Hoseok, un millón de preguntas aparecieron en su cabeza.
Podría simplemente ir a la dirección que indicaba el papel, sin embargo no le brindaba suficiente confianza a pesar de que se lo diera su propio novio.
Y una cuestión más que se le sumaba a su estrés era el hecho de enterarse de algo que no le incumbia y que sus ojos accidentalmente vieron por unos segundos: la posible carta de amenaza del señor Dae-Hyun.
Bueno, realmente no podía afirmar completamente que se trataba de eso, pero estaba seguro de haber leído algo sobre su trabajo y dinero involucrados. Sospechoso.
Taehyung respiró hondo y se recostó en la silla cerrando los ojos, pero de repente unos golpecitos en la puerta hicieron que sus pensamientos salieran disparados. El rubio gritó un 'pase' de inmediato y en cuanto abrió sus ojos nuevamente se encontró con un chico alto, pelirrosa y de labios carnosos, quién lo miraba con ambigüedad, y el rubio no tardó en hacerlo también.
— Si vas a decirme algo hazlo ya, no tengo todo el día.
El pelirrosa asintió y se sentó en la silla frente al escritorio.
—Supongo que no me conoces porque nuestros trabajos nos mantienen demasiado ocupados como para ello, Taehyung.— El rubio frunció el ceño al escuchar su nombre de un chico que no había visto en su vida y abrió la boca para decir algo pero decidió cerrarla pues no salió nada de ella.
—¿No...? ¿Quién eres?
—Kim Seokjin, mánager de Park Jinyoung.—Respondió con una sonrisa y extendió su brazo, el cual Taehyung correspondió en cuestión de segundos.
—¿El ex-novio de Jimin? ¿El mismo?
—Lastimosamente sí, y por eso vine hoy aquí. Necesito hablar contigo Taehyung, es importante.
El rubio se incorporó en su asiento poniendo los codos sobre la mesa para prestar más atención a la conversación. Debido a la expresión que traía el pelirrosa era evidente que estaba preocupado, algo que no podía significar algo bueno definitivamente.
—Bueno si es tan importante como dices dejaré estos papeles para más tarde, ¿qué sucede?
—Como mánager de Jinyoung es mi obligación administrar sus actividades en la semana y acompañarlo la mayoría del tiempo, lo cual me llevó a descubrir algo que tal vez no debía saber...— Jin tomó aire. Taehyung suspiró con ironía.— Un día estaba hablando por teléfono con su madre y... Al parecer ella se quedará aquí por un tiempo.
—No veo el problema.
El pelirrosa se levantó abruptamente de la silla con gesto de indignación.
—El maldito problema es que esa bruja piensa que Jimin y Jinyoung tienen una relación estable aún y quiere verlos el sábado en una cena en la casa de su hijo.
—¿Vive debajo de una piedra o qué? Espera... ¿Dijiste una cena?— Bueno, eso si que no se oía nada bien. Jin asintió —Jimin no quiere saber nada sobre Jinyoung, me lo ha dicho incontables veces, créeme que eso no sucederá.
—Oh créeme que sí.— Dijo con seguridad. Taehyung rió por lo bajo.
—Seokjin, ¿esto es una broma?— El tono de voz del rubio se tornó más serio y nuevas dudas aparecieron en su cabeza.—No voy a obligar a Jimin a enfrentar a su ex de nuevo, y menos con todo lo que está sucediendo.
—Por favor Taehyung, debes confiar en mí.— Jin se volvió hacia la puerta como esperando a que alguien en específico no apareciera por ella, seguidamente se sentó en la silla de nuevo.
—¿Por qué? Ni siquiera sé si mientes o por qué carajos me estás diciendo todo esto.
El pelirrosa rodó los ojos y suspiró. Al parecer su única opción en ese momento era utilizar una nueva jugada. Sabía que le iba a ser útil con este chico. Gracias Namjoon.
Jin procedió a rebuscar algo en su chaqueta mientras hacia muecas por no encontrarlas, hasta que después de unos segundos sonrió de lado al hacerlo. Sacó rápidamente tres fotografías y las colocó en el escritorio de Taehyung para luego deslizarlas hasta él.
—¿Te parecen familiares?
Taehyung, aún desconfiado, le regaló una mirada al pelirrosa y tomó las fotos entre sus manos. Sus ojos no pudieron evitar abrirse con sorpresa al presenciar el origen de la primera y más polémica foto de Jimin y Jungkook en aquel supermercado, la única diferencia eran los distintos ángulos y posiciones de la que se filtró en internet.
—¿De dónde sacaste esto?
—Mi novio las tomó ese día, ¿hicimos un gran trabajo verdad?—Una sonrisa apareció en sus labios —Jimin se libró del imbécil de Jinyoung, pero aún no veo resultados en Jungkook y Hyuna, qué decepción.— Se cruzó de brazos
—Espera... ¿qué? ¡Estoy demasiado confundido! ¡¿Entonces fuiste tú el que inició todo esto?!—Exclamó con las fotos en las manos. Jin asintió orgulloso.
—¿Ahora si me crees?
—Supongo... — Frunció el ceño—Pero aún no entiendo el por qué lo hiciste.
—Estoy cansado de esto ¿si? Tener que trabajar para la persona más detestable del mundo y ganarme la vida con eso. Yo soy una persona que odia la violencia y tener que soportar a Jinyoung tratando muy mal a su propio novio era una tortura. Quería hacer algo por Jimin, él no se merecía eso. Además, algo me decía que tenía un tipo de conexión con Jeon Jungkook, llámalo instinto maternal o como desees. El caso es que si desmentimos a Jinyoung todo el mundo se dará cuenta la clase de persona que es y todo el daño que ha hecho, por eso debes confiar en mí y decirle a Jimin que acepte ir a esa cena ¿si?. Conozco a la madre de Jinyoung y es capaz de hacer hasta la más mínima cosa para arruinarlo todo, por favor tengan cuidado.
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Rivals ➳ Kookmin
Fiksi PenggemarHasta el nadador más rico y engreído de Seúl se puede enamorar perdidamente, ¿Quién lo diría? Sin embargo, su único problema es el hecho de que el amor de su vida es su máximo rival, y este lo odia a muerte. Jeon Jungkook no se cansa de cortejar a P...