Dariem

🎄Especial de Navidad🎄

—Creo que es una estupidez.

—Para ti todo lo que esté relacionado con los humanos, es una estupidez.

—Narel, no lo hice cuando Luna era pequeña ¿Por qué debería hacerlo ahora?

—Porque la ilusión de Darel es ver a papá Noel. Ahora ponte ese maldito traje, y sal de ahí.

—Pues yo creo que esto, te quedaría mejor a ti, la panza ya la tienes —bromeó riendo divertido.

—Eres un estúpido, Dariem, en serio —le dijo molesta.

Salió del baño, y la atrapó en un fuerte abrazado, mientras le daba besos por el rostro.

—No, sal, basta —le dijo empujándolo.

—Sabes que sólo bromeaba, mi amor. Estás hermosa.

—No te creo nada, suéltame.

—Narel —sonrió tomándola del rostro para que lo mirara—. Te amo, te amo preciosa —pronunció con una suave sonrisa, antes de besarla.

Bajó con suaves besos por su cuello, y se arrodilló frente a ella, besando su panza de ya ocho meses.

—Eres perfecta así cómo estás.

Ella le acarició suavemente el cabello, y suspiró.

—Arriba, quiero despertar a los niños con papá Noel.

—¿Y si primero disfrutamos un poco nosotros? —ronroneó dirigiendo su rostro a la entrepierna de ella.

—Que no, ya te dije que no tendremos sexo hasta que el bebé nazca.

—Pero Narel, falta un mes para eso, y luego otro más por la cuarentena ¿Por qué me torturas así?

—Deja de ser tan exagerado.

—Que mala eres —le dijo dándole un ultimo beso a su panza, antes de ponerse de pie—. Terminemos con esto rápido, quiero tomar un café.

Dariem terminó de colocarse el traje de papá Noel, y Narel fue hasta la habitación de sus hijos, ya que Luna y Darel dormían juntos.

Abrió suavemente la puerta, y observó sonriendo a los dos niños, durmiendo plácidamente. Dariem entró a la habitación, cargando una bolsa de plush roja, llena de paquetes con regalos.

—Darel, despierta cariño —pronunció en un tono suave Narel, tocando la espalda del niño—. Mira quién está aquí.

Luna fue la primera en despertar, y observó confundida a su padre ¿Por qué se había vestido de ese modo?

—¡Papá Noel! —gritó el pequeño al verlo, emocionado..

—Ho, Ho, ho, feliz Navidad pequeño travieso. Mis duendes me han dicho que haz sido un niño muy escurridizo.

—Pero me he portado bien —pronunció preocupado, mirando afligido a su padre.

Narel le dio un codazo a Dariem, por estar preocupando en vano al pequeño.

—Así es, es por eso, que creo que tengo un regalo para ti —le dijo metiendo la mano dentro del bolso.

Le dio un paquete en vuelto en papel metalizado con dibujos navideños, que el niño rápidamente se encargó de destrozar.

Se acercó a su hija, también buscó uno para ella, entregándoselo.

—Feliz Navidad para ti también, bella damita.

—Sabes que yo no creo en estas cosas —murmuró la niña.

Dariem sonrió, sonrisa que no podría verse por la barba falsa, y le guiñó un ojo.

—Han sido niños muy buenos, todo esto es para ustedes —les dijo abriendo la bolsa, y tirando todo en el suelo, antes de irse.

Narel rodó los ojos, y sonrió resignada. No podía esperar mucho de él, pero al menos este año se había esforzado.

—¡Mami! ¡Mami! ¿Éste grandote es para mí? —preguntó ilusionado Darel, antes de tomar una gran caja con moño lila.

—Mm no, ahí dice Luna —sonrió divertida.

***

Luego de separar los regalos de los niños, y dejarlos abriéndolos, volvió a su habitación, encontrando al moreno en la cama, sólo en boxer.

—¿Qué haces? Sabes que debemos ir a la casa de Onías.

—Aun no me has dado mi regalo, Narel, y yo también he sido muy bueno.

—¿Bueno tú? Es como decir que la tierra es plana. Vamos, levántate, y cámbiate.

Tomó un moño rojo que le había quitado a uno de los regalos de sus hijos, y se lo colocó por debajo de su ombligo.

—Yo si te tengo un regalo ¿Quieres venir a recibirlo? —ronroneo, sonriendo travieso.

—Eres hartante, Dar, en serio —sonrió resignada, acercándose a él para besarlo—. Demasiado perseverante.

—Sólo quiero demostrarle a mi mujer cuanto la amo.

—Ya me lo haz demostrado, y mira la prueba —sonrió mirando su vientre.

—Nuestro tercer hijo —pronunció bajo, acariciando suavemente la panza de ella—. Qué privilegio tuve al conocerte.

—Yo creo que tuve el mejor regalado de todos al encontrarte a ti —le dijo tomándolo del rostro, acariciado sus mejillas—. Un regalo bastante testarudo, pero hermoso, noble, único.

—Te amo —pronunció dándole un beso corto—. Te amo, mi amor. Feliz navidad, y feliz Navidad a ti también bebé —sonrió acariciando la panza de Narel.

  ...

En Argentina ya es casi la una de la madrugada jajaja ¡Feliz Navidad bellezas! 🎄🎈😘❤️💞

(Hermoso recuerdo de hace 2 atrás, justo para navidad ♥️ y olvidé subirlo :'v)