-¡Por favor, ten una cita conmigo!
Luka ya no aguantó más, hace una semana que se le declaró a Kagami luego de que unieron a los topos y ella respondió a su declaración con un "por ahora, sólo amigos."
Ya no aguantaba más, Luka Couffaine quería besitos aún que sean besos como de mafiosos.
-Aceptó.
Respondió la chica con simpleza y el guitarrista sonrió con esperanza de vivir hasta los 209 años mientras que Juleka que pasaba por ahí, levantó una ceja confundida.
¿En verdad aceptó? Sentía orgullo por su hermano.
-¿A qué hora me vas a coger, Luka Couffaine?
Al oír ésa pregunta, las mejillas del chico se sonrojaron.
-¡¿Qué?!
Seguro oyó mal, no había otra explicación lógica.
Sí, después de todo estaba necesitado de afecto.
-¿Qué a que hora me vas a coger?
Volvió a preguntar la esgrimista, cruzandose de brazos y Luka bajo la mirada apenado.
Ni siquiera le pidió permiso a su mamá ni a Rose para tener novia y ella le salía con éso.
-Yo... ¿no es éso ir muy rápido?
No le desagradaba la idea pero aún eran jóvenes.
-¿Pero sí fue tu idea?
El chico retrocedió asustado.
¡¿En uno de sus pensamientos lascivos habló sin darse cuenta?!
¡Que vergüenza!
-¡¿Mí idea?! N-no me molesta... pero...
Juleka al ver la escena, rodó los ojos y le susurro a su hermano en el oído.
-Ella te pregunta a que hora pasarás por ella, puerco.
Explicó y las mejillas de Luka se sonrojaron aún más mientras la japonesa lo veía en espera de una respuesta.
-Yo... ¿a las 19 está bien?
Al menos ahora saben cual fue la respuesta de Kagami.
