James, amo a tu hermana. •Sirius Black•

4. Navidad y un par de sorpresas.

Aura había cumplido con su palabra, pasaba de largo a Sirius siempre que se lo topaba. Y al principio Sirius no le tomó importancia, se repetía a si mismo que era un capricho de mujeres. Si bien, Aura platicaba amenamente con el resto de los chicos, pero en cuanto Sirius intentaba meterse en la plática, ésta salía rápidamente del lugar donde se encontrasen. Incluso, en su última clase de pociones, les había tocado hacerlo en equipo, y resultó en que Aura no aceptó la ayuda de Canuto, elaborando la poción ella sola.

Este era su último día en Hogwarts, puesto que partirían para las vacaciones de navidad, y como era de esperarse, Sirius se quedaría en casa de los Potter. Era común el compartir los vagones entre los 5, para planear salidas durante el invierno. Pero esa vez, Aura pasó de largo su vagón para entrar a uno de los últimos, dado que esos siempre están solos. Son muchas las personas que se quedan en Hogwarts por lo que el expreso va más vacío que de costumbre.

Aura quedó con Lily de irla a visitar un par de días, después de navidad justo para pasar año nuevo con su mejor amiga. Que, de igual manera, no era una celebración tradicional en su familia, por lo que no causo problema al pedírselo a su mamá. Por otro lado, no notificó de ello a su hermano, porque de verdad quería pasar un buen rato sin la necesidad de que su hermano estuviera observando.

En el vagón de los chicos, reinaba un inusual silencio. James estaba leyendo un libro, extraño, lo sé, pero había visto a Lily leyéndolo por lo que pensó sería buena idea. Peter se había quedado dormido contra el cristal de la ventana. Así que quedaban Sirius y Remus, aunque no hablaban. Remus porque sentía la ausencia de aquella felina, no por el hecho de que le atrajera, sino porque en los cinco años que llevaban de conocerse, crearon un lazo de amistad demasiado fuerte. Y Sirius lo sabía, y por ello mismo no se animaba a decir algo.

Como escapatoria, salió del vagón, recorriendo de uno en uno para buscar a la azabache, y quizás, convencerla de ir con ellos. Aunque ella quisiera matarlo.

En los últimos vagones fue cuando la vio, se sorprendió al percatarse de que iba sola, pensó que de menos iría con la pelirroja que traía loco a su mejor amigo. Pero no fue así. Sirius puso su mano sobre la manija para abrir la puerta, pero se detuvo. Y no entendió porque lo había hecho. Quizás porque la había visto dormir, y se miraba tan dulce que no quiso arruinar ese momento. Sólo se retiró, pasando sus manos por su cabello constantemente.

Lo había arruinado, bien lo sabía, pero también sabía que era un idiota por haberse dado cuenta hasta ese momento.

[...]

-Tú padre está en el trabajo, volverá en un par de horas, mientras ordena tu cuarto y prepara tu maleta- Euphemia era la mujer más dulce que alguien pudiera conocer, no dudó ni un segundo en acoger a Sirius cuando supo la situación con su madre. Obviamente estaba al tanto de la invitación de Lily hacía Aura, y sin dudar aceptó, pues estuvo escuchando muy buenas cosas de esa niña, sobre todo de James.

-Mamá, ¿Quiénes vendrán a la cena de navidad?- James junto con Sirius siguieron a la señora Potter hasta la cocina, donde varios utensilios estaban preparando diversos platillos. La cena de navidad era dentro de 3 noches, pero siempre eran fiestas en grande, por lo regular invitaban a diversas familias para celebrar juntos. Este año no sería la excepción.

-Septimus y Cedrella Weasley han confirmado su asistencia, su hijo Arthur vendrá con su novia, se rumora que están comprometidos pero nadie ha confirmado nada. Harfang y Callidora Longbottom. También vendrá el Sr. Abraxas Malfoy y su hijo Lucius. Y si, también vendrán Lyall y Hope Lupin-

El par de amigos hicieron un gesto de repulsión al escuchar el nombre de Lucius, si Severus era un problema, Lucius lo era al doble. Ellos estaban en primero cuando Malfoy estaba en sexto, por lo que solo tuvieron que soportarse 2 años.