Las fiestas de Horace Slughorn eran siempre exclusivas, sólo los participantes de su club de las eminencias tenían la posibilidad de ir. A menos claro, de que recibieras una invitación por parte de uno de los miembros.
Si bien, Aura, James, Sirius y Peter no eran parte de dicho club. Remus fue el único que logró ganarse un lugar en los reservados amigos del buen profesor de pociones. Junto con Lily Evans, Severus Snape, Gwenog Jones, Wendy Slinkhard, Regulus Black, Castiel Nott, Dirk Cresswell y Eldred Worple.
Dicha fiesta de navidad se realizaría el día 20 de Diciembre, por lo que habría dos viajes de regreso a Londres. Para los que quisieran asistir a dicha fiesta pero no quedarse para navidad, y para los que querían irse antes.
James por su parte estuvo esperado a que Lily lo invitara a dicha fiesta, por lo que perdieron el primer viaje de regreso a casa. Pero esa invitación nunca llegó. Principalmente porque Lily invitó a Remus a la fiesta, ambos eran miembros del club y Lily le dijo que no sentía la confianza de llevar a alguien más. Remus antes de darle respuesta habló con James, el cual se vio alegre de que Lily no hubiera invitado a otro chico.
Pero James quería asistir a la fiesta, para cerciorarse de que ningún otro chico se acerque a su pelirroja favorita. Por lo que convenció a Gwenog de que asistieran juntos, ya que la chica no tenía pareja y tampoco quería llevar a alguien que la quiera por sus influencias en los equipos profesionales de Quidditch, así que se apiado de la buena intención de James.
Peter por su parte, tomó el primer expreso hacía Londres, ya que él junto con su familia harían un viaje a América, para conocer a sus primos Estadounidenses. Antes de irse, Aura le hizo prometer que le traería una versión miniatura de la estatua de la libertad.
Y finalmente, quedaron Aura y Sirius, el último quería irse antes para sacar sus cosas de la casa de los Black, aprovechando que su hermano no estaría, pero por culpa de su buen amigo tuvo que posponer ese plan un par de días.
-Aura, que bueno que te encuentro- Sirius corrió por los pasillos para alcanzar a la chica. Muy poca gente rondaba por el castillo, ya sea por estarse preparando para la fiesta de Horace o porque estaban en sus salas.
-Bien, ya me has encontrado, ¿Qué necesitas?
-Ya que James nos abandonó, pensé que nosotros dos podíamos pasar esta noche juntos- Aura alzó una ceja ante dicha propuesta, más que nada porque parecía que a Sirius le costaba trabajo articular cada palabra. Rascaba su nuca nervioso y paseaba su mirada por todo alrededor –Ya sabes, en la sala común, podríamos jugar ajedrez mágico o lo que quisieras.
-Sirius- él tono con el cual Aura pronunció su nombre, no era un indicio bueno, sabía que le diría que no –Es realmente dulce de tu parte, pero iré a la fiesta de Horace. Nathaniel Macmillan me invitó ayer.
"¿Mac... Qué?" pensó Sirius, ¿Quién era ese chico y por qué Aura iría con él? Sólo recordó haber dicho un "Ah sí, está bien" e irse hacía su habitación. Pero para buscar la capa de invisibilidad, no podía ser que todos sus amigos asistieran a una fiesta. Inclusive su hermano estaba invitado, vamos, que el mismo Quejicus asistiría ¿Y él? No se quedaría en soledad toda la noche.
Ya era hora de que todos llegaran. Remus iba del brazo con Lily, a la pelirroja le pareció divertido que llevaran el mismo color; verde esmeralda. Aunque Remus lo llevaba únicamente en su moño. Al entrar al salón, Horace les preguntó el porqué de llevar los colores de la casa contraria. A lo que Lily respondió "Es navidad, no debería de haber bandos contrarios".
Mientras que James pasó por Gwenog a su sala en Ravenclaw. La chica opto por un vestido coral por arriba de las rodillas. James, cordialmente le dijo lo bien que lucía aquella noche, cumplido que Gwenog le regresó, aunque éste sólo llevara un esmoquin negro. Caminaron hasta el salón entre risas. Y aunque fueran juntos, todos los presentes sabían que no eran más que buenos amigos.
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James, amo a tu hermana. •Sirius Black•
FanfictionPara Fleamont y Euphemia Potter fue una gran sorpresa descubrir que dentro de 9 meses, un par de mellizos podrían correr por su jardín. Y así fue, dos pequeños recién nacidos, uno de ellos con problemas de la vista. Sin embargo, eran bastante pareci...