Entre nosotros y el destino

Capítulo 36

Han pasado cinco días desde lo que ocurrió en el cumpleaños de la hermana de Brayden.
Hace menos de dos horas le convencí para que llamara a su padre –cosa que no había hecho aún– para que se disculpara al menos por habernos ido sin avisar a nadie y por suerte, me hizo caso y llamó.
No duró más de cinco minutos la conversación, pero al menos ahora todo está arreglado.
Tampoco quería que a pesar de la discusión y la pelea con Aleksey, las cosas entre él y su padre estuvieran tensas y mal. Brayden suele ser bastante cabeza dura y no suele hacer caso nunca, pero por primera vez en la vida, hizo caso.

—No creo que sea lo mejor ir. ¿Estás segura de que quieres hacerlo?

—Por favor. ¿Cuánto hace que no nos reunimos todos como hace tiempo? Son tus amigos y me caen bien, además, también va a ir Mel.

—Y también Alex.
–dice con odio el nombre y frunce el ceño.

—Ya no tengo la misma relación de amistad que tenía antes con él, ademas es un amigo y también es tú amigo. Creo que deberíais hacer las paces, no es bueno quedarse con el rencor dentro...

Brayden me mira serio. Cómo si me estuviera diciendo con su mirada: ¿en serio me lo estás diciendo?

Si algo sé de Brayden, es que no perdona a nadie que le haya hecho daño de verdad. Le hace la cruz a esa persona y jamás quiere volver a saber de ella.
Pero no creo que sea bueno que ambos se tengan ese odio mutuo por algo que pasó hace tiempo, Brayden y yo hemos vuelto, con Alex no es la misma relación amistosa que teníamos hace un año a pesar de habernos visto algunas veces y de haber hablado, ya no es igual. Y además, me apetece tener una cena tranquila sin que hayan miradas asesinas ni discusiones de por medio por algo ya que pertenece al pasado. Quisiera estar en paz, que mi novio y mi amigo se lleven bien y ellos vuelvan a la amistad que tenían antes.

Me apetece cenar con todos, sus amigos me caen bien, son buenas personas y además irá a Mel y seguramente que Alissa también.
Quiero reunirnos todos y más cuando hace bastante tiempo que no nos vemos, me hace cierta ilusión.

—Ya sabes lo que opino de eso, Allegra. Y nos es mi amigo, dejó de serlo cuando metió mierda en nuestra relación, jodió nuestra relación y encima se enamoró de la novia de su amigo. ¿Te tengo que dar más razones?

Se cruza de brazos y su mirada oscura se queda clavada sobre la mia unos segundos, hasta que termina apartándola y la desvía hacia la televisión por la cual están dando ahora anuncios.

Subo mis piernas por encima de las suyas y me acerco a su cuerpo, agarro su rostro entre mis manos y le ordeno que me mire. Sus ojos pesadamente se desvían hacia mi de nuevo, clavándose sobre mis ojos, tiene la mandíbula apretada y el ceño fruncido.
Como es de costumbre en él.

—Sí no quieres hacerlo, al menos, intenta ignorarle, pasa de él. Pero por favor, ya tuvimos suficiente. No quiero que hayan peleas entre tú y él, ¿crees que podrá ser? Por fa, hazlo por mi, ¿vale?

Pongo ojitos, pestañeando varias veces haciendo puchero. El duro rostro de Brayden se relaja y su ceño termina desvaneciéndose y una media sonrisa aparece en sus gruesos labios. Desvía la mirada unos segundos y vuelve a cruzarla con la mía mirándome de reojo y su sonrisa se desvanece.

—Lo intentaré. Pero no te digo si se me escapa un puñ...

Pongo mi dedo índice sobre sus labios y niego con la cabeza repetidas veces.

—No, tú mal genio y tu pronto lo dejáis en casa. No quiero peleas he dicho, ni golpes, ni sangre. Sé que puedes hacerlo. ¿Quieres quedar de nuevo como el agresivo y el que no sabe controlarse?