Un Futuro Con Esperanza. [Fanfic DBZ]

12. Mañana.

El chico descendió hasta tocar el suelo en la orilla del lago Fukawa. Shaira miró a su alrededor volviendo a encontrar ese cielo gris y el ambiente silencioso. Ambos se miraron unos instantes, hasta que él habló.

—Entonces... Mañana ya estarán en el refugio, supongo.

—¡Cierto! —Dijo recordando de repente. Se cruzó de brazos—. Los escuché hablar de que tenían pensado quedarse una semana aquí, ya sabes, lo por el viaje tan largo. Sería una tontería solo estar aquí un día. Prefieren estar más tiempo para despejar su mente y esa clase de cosas.

—Entiendo —Dijo mirando a lo lejos—, en ese caso... deberíamos hacer lo mismo.

—Hum... —La chica le miró sin mucho ánimo, pero en seguida sonrió con una gran idea en la mente—. Tienes razón. Así cada uno tiene su entrenamiento personal ¡Y veremos qué tan fuerte nos volvemos al final! —Trunks sonrió, pero en seguida recibió un ligero golpe amistoso en el hombro por parte de su amiga—. No te excedas demasiado.

—Ja, ja. Te digo lo mismo. Estoy emocionado por ver tu fuerza al final de esta semana.

—No te prometo mucho —Llevó sus manos a la nuca—, pero haré lo mejor que pueda, te lo aseguro.

El híbrido le miró sonriendo, sin saber qué más decir, pues parecía que todo de lo que podían hablar en ese momento estaba más que dicho y, sin embargo, sintió dentro de él una gran felicidad por ver, aunque fuera mínimo, un avance en cuanto a su compañera. Algo le decía que al final sería una gran ayuda contra aquellos monstruos. Algo llamó su atención y le hizo voltear, mirando a lo lejos por la orilla del lago.

—Siento el Ki de un grupo de personas acercándose —Shaira miró en la misma dirección que lo hacía él—. Deben estar buscándote —Le miró y pudo ver un poco de molestia en la pelinegra, esta soltó un suspiro de frustración mientras bajaba los brazos.

—Bien... —Sonrió para mirarle— Supongo que ya te vas. Buenas noches, Trunks.

—Que descanses, nos vemos... en una semana.

—Vale, adiós. Cuídate mucho.

El híbrido emprendió el vuelo despidiéndose con la mano en el aire y tan pronto como lo hizo, desapareció de la vista de la inhumana. Esta metió sus manos a los bolsillos y soltó un suspiro teniendo una idea de lo que se esperaba oír.

—¡Shaira! —Un grito llamó su atención. Miró encontrando a aquel grupo de chicas acercándose. La que había hablado era Asuna quien venía corriendo con una linterna en la mano.

—¿Estás bien? —Preguntó Selia llegando junto con las demás.

—¿Vienen solas? —Cuestionó Shaira mirando sobre el grupo que se acercaba.

—Solo venimos nosotras —Respondió Maya.

—Pensamos que te había pasado algo —Akamatsu exageró—. ¡Qué un monstruo te había arrastrado fuera de la tienda para comerte!

—Eso no es posible, pero si nos preocupados —Mencionó Maki dirigiendo la mirada a la pelinegra—. ¿Qué pasó?

—Nada, solo salí a caminar —Respondió con el rostro inexpresivo, comenzando a caminar en dirección al campamento, las chicas le siguieron.

—¿A estas horas de la noche? —Preguntó Selia.

—Solo quería estar sola...

—Estas muy lejos del campamento, pudiste perderte en el bosque —Sentenció Asuna.

—Pudo haberte atacado una bestia, te hubiera comido y nunca nos hubiésemos enterado —Se detuvieron ante el escenario que había propuesto Akamatsu, esta no supo qué decir ante tanta atención y se puso nerviosa— E-Es u-una posibilidad.