Un Futuro Con Esperanza. [Fanfic DBZ]

21. Entrando en apuros

Unos minutos antes...

Maki seguía en la única habitación en pie, tumbada en la cama pensando en su amiga que acababa de marcharse.

—No puedo creer que en verdad te hayas ido —Soltó un suspiro—. Espero que cumplas tu promesa y maten a esas cosas de una vez por todas.

Se escucharon pasos de afuera, seguido de algunas voces. Se incorporó y de inmediato la puerta se abrió dejando ver a Makoto y con él un hombre rubio delgado.

—Es aquí —Mencionó el anciano.

—¿Qué hacen aquí? ¿Qué buscan? —Preguntó Maki confundida.

—Está buscando a Shaira —Habló Makoto.

—¿La conoces? —Dijo el delgado entrando— Es mi hermana, yo...

—Ella nunca mencionó a ningún hermano o familiar —Se puso en pie.

—La última vez que nos vimos, peleamos. Supongo que aún está molesta por eso. Solo quiero arreglar las cosas.

Sin quererlo, varias frases vinieron a su mente:

"—¿De dónde eres? —Esa había sido Selia.

—De ninguna parte —Respondió sintiéndose estúpida y triste—. Mi hogar fue destruido hace décadas y ya no queda nada de él"

"—¿Y cómo se conocieron? De seguro te rescató, ¿No es así?

—¿O se encontraron de casualidad y curaste sus heridas? —Miró a la más pequeña con cierto asombro.

—Algo así —Desvió la mirada notando como los edificios se acababan e iniciaba el verde—. Él me salvó y yo lo salvé. Estamos a mano, supongo"

"—Ya no puedo estar aquí —Se giró para mirarla—. Lo siento Maki pero...

—¿Tu entrenamiento es más importante que tu familia? —¿Familia?—. ¡Olvida a esos androides! ¡Olvida a ese chico! ¡Podemos vivir así!"

"—. No quiero involucrarlas más en esto. No quiero que salgan lastimadas por culpa mía. Por favor, deja que me vaya"

Maki no confiaba en lo que decía aquel hombre.

El desconocido se acercó causando que el anciano retrocediera, al poco tiempo chocó con la pared dado a que el rubio lo hizo a un lado para observar bien lo que había dibujado en aquella pared. Maki, al notar esto sintió un escalofrío, sobre todo al ver como lentamente se dibujaba una sonrisa maliciosa en ese pálido rostro al tocar las líneas del lápiz. Murmuró algo para sus adentros y en seguida miró a Makoto.

—Dijiste que esta era su habitación, ¿cierto? —El hombre asintió tembloroso.

—Sí, sí. Aquí dormía todas las noches. ¡Se lo juro!

—¿Sabes dónde está?

—Ella no está. Se fue —Interrumpió de manera abrupta la chica.

—Oh, ya veo —Afirmó el rubio para cruzarse de brazos—. ¿Sabes a dónde fue?

—No. No dijo nada, solo se fue.

—Ya volverá, al anochecer —Dijo Makoto intentando dar algo de esperanza al hombre a su lado—, siempre hace eso, se lo aseguro.

—No. Esta vez no lo hará —Sentenció Maki con tristeza y seriedad.

—¡Hm! —La sorpresa fue grande para ambos hombres.

—E-Está jugando —Dijo Makoto dejando ver nerviosismo. El rubio le miró notando algo—. Ella siempre viene. No puede vivir sin comer, ¿verdad?

—¿Cómo puedes estar tan segura?