El comandante Min Yoongi se encontraba en su oficina relajado ya que es un día muy calmado desde su punto de vista. Uno que otro robo menor pero solo eso, a pesar de que este comandante fuera muy aventurero y arriesgado hoy no estaba de ánimos para atender alguna emergencia grave que ameritase que él que se levantara de su silla. Había un evento importante marcado en su calendario y no quería que ocurriesen accidentes que mancharan su respetable imagen de un Omega camuflajeado de Alfa.
Nadie sabia ese pequeño detalle, todo mundo lo respetaba como un verdadero Alfa, era bueno que su primer celo haya sido en el extranjero y no en Corea del Sur o si no, no tendría ese importante puesto de Comandante. Todo iba bien hasta que unos suaves golpes en la puerta de su oficina lo sacaron de su estado de tranquilidad. Sin más que hacer le concedió la entrada a quien fuese que tocase la puerta, de todos modos ya lo había molestado y no valía la pena ignorar los golpes de la puerta.
—Disculpe Comandante. —dijo él oficial que entraba a la oficina del Comandante con cuidado.
—¿Si? —respondió él comandante levantando levemente la cabeza hacía él oficial para poder observarlo.
No quería ser molestado en este día pues en cualquier momento puede recibir una sorpresa para nada agradable, tanto como para él, como para los demás. Así que con todo su ser deseaba que el oficial se fuera lo más pronto posible.
—Lo buscan. —respondió el oficial inconcluso.
—No me gusta que andes con rodeos, ¿De quién se trata?
—Nuevamente él coronel de las-
Él comandante lo interrumpió.
—Bien, dile que me disculpe pero no estoy interesado en ser parte de eso. —respondió cortante e irritado.
—Esta bien. —respondió.
—Puedes retirarte. —dijo dándose vuelta.
Él oficial suspiró rendido, dijera lo que dijera él Coronel entraría de todas formas pues tiene la misma o incluso más autoridad que Yoongi. Sin embargo, acató las ordenes de su superior.
—Con permiso. —dijo antes de abandonar la oficina del comandante.
Unos pocos minutos pasaron antes de que él coronel de aproximadamente unos cincuenta años entrará a la oficina y de manera firme se posicionará enfrente de yoongi decidido a no marcharse del lugar hasta ser escuchado.
—Ya le dije que-
—No se trata de eso. —le arrojó un sobre en el escritorio a Yoongi. —Jung Hoseok, hijo de uno de los más importantes políticos de Corea.
—¿Y qué hago? ¿Le pido trabajo, le llevo comida, le digo que cante una canción?
—Al parecer a estado lavando dinero desde hace un buen tiempo.
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❝𝚃𝚑𝚎 𝙿𝚘𝚕𝚒𝚌𝚎𝚖𝚊𝚗 & 𝚃𝚑𝚎 𝙲𝚛𝚒𝚖𝚒𝚗𝚊𝚕❞ ➻ 𝙷𝚘𝚙𝚎𝚐𝚊
Fanfiction❝𝑳𝒐𝒔 𝒂𝒍𝒇𝒂𝒔 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒏 𝒆𝒏 𝒔𝒖 𝒈𝒆𝒏𝒆́𝒕𝒊𝒄𝒂 𝒆𝒍 𝒍𝒊𝒅𝒆𝒓𝒂𝒛𝒈𝒐, 𝒍𝒂 𝒇𝒂𝒄𝒊𝒍𝒊𝒅𝒂𝒅 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒈𝒖𝒊𝒂𝒓 𝒚 𝒄𝒖𝒊𝒅𝒂𝒓 𝒂 𝒍𝒐𝒔 𝒈𝒓𝒖𝒑𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒐𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒒𝒖𝒆𝒅𝒆𝒏 𝒂 𝒄𝒂𝒓𝒈𝒐. 𝑳𝒐𝒔 𝒎𝒂𝒏𝒅𝒂𝒕𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝒑𝒐�...