Mi Alocada Obsesión

Capítulo 9

Una calidad brisa entraba por la ventanilla del auto. El clima era perfecto.  Veía como la naturaleza le daba un aspecto más real a aquel tranquilo vecindario.

- ¿Pasara por ti o se encontrarán en el cine? - le pregunto Ally  antes de dejarla en su casa. 

Ya habían dejado a Vero en su casa.  El trayecto había sido silencioso cosa que agradeció.  Ally era muy callada.  No le gustaba hablar mientras manejaba, sin embargo tenia un alto sentido de la lealtad y amistad.  Aveces creía que no se daba cuenta de las cosas, pero lo hacia. Era muy observadora.

- Nos veremos allá.

-¿Quien te va a llevar? - pregunto sabiendo la respuesta. Era la única de las tres que tenia auto y sus amigas solían aprovecharse de su bondad.

- Tu. Me debes más de una. Así que no te puedes negar. Solo sera por hoy.

- Solo te llevare y lo haré por tu seguridad. No me gustaría que nada malo ocurriera. 

- Lo se. Gracias. Te espero más tarde.

- Paso por ti a las 7, si no estas lista me iré. Y sabes que lo haré. 

Condujo solo unas cuantas cuadras más hasta dar con la casa de su amiga.  Ally a diferencia de Vero, era mas consiente de lo que pasaba con su amiga. La había observado lo suficiente para saberlo. Y también la había visto a ella y a otra persona hacerse señas inusuales en la salida.

Primero creyó ver mal, por el asunto de su miopía, pero era inconfundible aquellos gestos, Lauren toco sus labios viendo a Camila y esta se los mordió.  Trato de no precipitarse pero al ver a su amiga de cerca lo supo.  Al ver sus labios rojos.  Sin embargo no fue capaz de enfrentarla.  Dejaría el asunto así.  Quizás Lauren estuviera confundida, no quería ponerla peor.

- A las 7 ,Lauren.  Sabes que soy puntual. 

- Ok.  Estaré lista antes.

Lauren rodó los ojos.  Sabia que su amiga era mas que puntual.  Tenia que estar lista antes.

Despidiéndose de su amiga entro a su casa aun sintiéndose extraña. No sabía sí tenia que hablar con la bruja sobre eso. Si debían llegar a algo.  Solo se dijeron que no podía volver a ocurrir y terminaron besándose una hora entera. 

Entro escuchando una discusión. Cosa que no era nueva.

- Y no puedes rallar el queso - escucho qué gritaba Tay - Nunca haces nada. Puro estar acostado. 

- Yo lavo los platos - respondió Chris acomodándose en el mueble para jugar en la consola.

- Una vez al año - Lauren permaneció en el umbral de la puerta cerrada.  Tratando de no reír - Eres muy flojo.

- No quiero que las manos me queden con ese olor.

- Ni que te lo fueras a restregar en el cuerpo como jabón.  Solo es rallar lo. Ayúdame con la comida, la Sr Maria no trabaja hoy.   Tu te lavas las manos y listo. 

- No me gusta el olor.

- Bueno metete un palo por el culo y lo hueles - dijo casi gritándole.  Lauren contuvo la risa e intervino. 

- ¿Que sucede aquí? - pregunto acercándose a sus hermanos.

- La Sr Maria se sentía mal y papá le dijo que de fuera.  Tenemos que hacer para comer y él no me quiere ayudar - dijo exasperada Tay mirando con molestia a su hermano - y por que el olor o que es el hombre, yo no se que hombre se considera la pulga esa, ni pelos tiene.  Más hombre parece nuestra Vecina que hasta bigote tiene.