Elena
Llego al baño y me miro al espejo, mi nariz no deja de sangrar y la sangre es abundante como si de una herida se tratara, dejo la sangre salir sin ningún detenimiento, hasta que unos momentos después poco a poco se detiene, limpio mi nariz con papel higiénico y siento que todo a mi alrededor da vueltas.
Minutos después llegan las chicas y tienen la misma expresión de hace unos cuantos minutos.
—¿Estás bien? —pregunta Lorena.
—Si, no fue nada —
—Pero ¿Por qué sangraste? —pregunta ahora Sara.
—No lo sé, algunas veces me ha pasado, pero no se porque —
—Debes de ir con un médico, puede ser algo serio —dice Gabriela con preocupación en su voz.
—Si, pero ya olvidemos esto y vamos a clase —todas nos dirigimos al aula de ciencias, cuando llegamos al pasillo donde están los casilleros veo a Tyler en su casillero, me ve y sonríe, se acerca a saludarnos y nos da un beso en la mejilla.
—Por unos momentos pensé que no habías venido al instituto, no los veía ni a Dylan ni a tí por ningún lado —
—Apenas he llegado, me he saltado la primera clase, mi abuela está enferma y está en el hospital, solo estábamos mamá, Dylan y yo, aunque no es grave pero la edad avanzada de la abuela le está afectando, mamá se ha ido a trabajar y Dylan se ha quedado con ella —
—Oh ya entiendo, pero al menos no es algo grave —
—No, afortunadamente no lo es, solo es su presión, esta algo baja, pero esta fuera de peligro, bueno chicas nos vemos al rato —nos vuelve a sonreír y desaparece del pasillo.
...
Las clases finalizan y me despido de las chicas ya que papá ha venido por mi, el camino a casa se pasa en silencio hasta llegar, pero eso ya es algo normal entre papá y yo, entro a casa, observo a Mariela en la cocina preparando el almuerzo y no puedo evitar fijarme en su tripita ya notable y sonrió al recordar que pronto tendré un hermano.
Llego a mi habitación, me cambio el uniforme y conecto mis audífonos para después dejarme dominar por el cansancio.
...
No se cuanto tiempo ha pasado cuando escucho la voz de Mariela llamandome, abro los ojos rápidamente y la miró sentada en la cama a un lado de mí con su mirada confundida y un tanto enojada, pero cuando voy a preguntar que es lo que quiere y estoy despierta completamente entiendo porque se encuentra mirándome de esa forma, siento la viscosidad de la sangre sobre mi nariz, Mariela no quita su vista de mi rostro hasta que habla:
—¡Dios! Estas sangrando, pero ¿Por qué? ¿Thomas ha vuelto a golpearte? —la miro y sin responder me levanto rápidamente ya que vuelvo a sentir arcadas y Mariela me alcanza en el baño para luego al ver el inodoro, queda inmóvil —¡Santo cielo! pero ¿Qué es esto? Debemos ir al hospital —
—No, te preocupes, me siento bien —trato en lo posible de restarle importancia porque no quiero que se siga preocupando y comience a hacer preguntas sobre esto.
—Pero esto no es normal Elena —
—Mariela no quiero ir al hospital, de seguro no debe de ser nada importante —
—Por esta vez lo dejaré estar, pero si vuelve a ocurrir iremos al hospital quieras o no —asiento levemente y sale del baño.
No puedo decirle que ya ha ocurrido más de una vez, no puedo.
Me encuentro en mi habitación recostada en mi cama leyendo "Culpa mía" de Mercedes Ron, cuando Mariela me interrumpe entrando a la habitación.
—Elena el vecino Dylan vino a visitarte —
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El Lado Oscuro de la Vida
Novela JuvenilElena debera enfrentar duros retos que la vida le pondrá en el camino, deberá demostrar fortaleza para alcanzar la felicidad, aunque con la muerte de su madre ya no le ve color y sentido a la vida por lo cual piensa que no volverá a ser feliz pero ¿...