Tiempo después XVI

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"Cena familiar"

Aunque la pelinegra hizo un gran esfuerzo el aire se volvió algo tenso, Luka sonreía medio sonrojado por recordar todos los buenos momentos que vivió con la azabache, y el resto se sentía extraño, El de ojos verdes por caer en cuentas de todo el daño que causó, la pareja por no saber como sobre llevar la situación, y Marinette por tener a su pareja y a su ex sentados en la misma mesa.

─Creo que es mi turno de preguntar, ¿no?─ bromeó el chico tratando de agregarle algo de color a la cena ─¿Como se conocieron ustedes?─ pregunto lo más inocente que pudo, de verdad este chico no tenía una gota de maldad, y eso se notaba a kilómetros

─¿Nosotros?─ pregunto el modelo con asombro, el pelinegro asintió ─Bueno─ dijo rascando su nunca ─Nos conocimos en la escuela─ dijo simple con una sonrisa picara

─Que básico Agreste─ lo reto Alya ─Siempre fue asi, con poca neurona─ agrego causando una risa en el chico ─Con Mari nos conocimos en la escuela, ese año yo me sumaba a su clase, nos sentamos juntas y después de un par de maldades de Chloe, nos volvimos mejores amigas, éramos inseparables, hasta que bueno, apareció ese tonto─ bufo con desprecio haciendo una mueca de desagrado

La comida llego interrumpiendo el momento, los platos fueron servidos y todos comenzaron a degustar las maravillas del chef.

─Menú pedido especialmente por mi─ se destacó la ejecutiva, todos sonrieron y aplaudieron en su honor ─Libre de grasas, y azucares─ hace una pausa y mira al rubio ─Tal y como el médico ordeno─ bufo con desagrado

─Esta delicioso─ hablo el azabache con tono tierno ─Esto si sabe rico─ replico llevando el tenedor a su boca

─Perdón por cocinar feo─ bufo su madre ─Pero sabemos que la comida de dieta es fea, la mires como la mires─ agrego molesta

─¿Comida de dieta?─ cuestionaron los demás

─Si─ respondió el hombre ─Lució al igual que Nathalie tiene diabetes, se le pronunció a sus tres años─ hace una pausa ─Por eso le agrado la idea de conocer a alguien con su condición, le es muy difícil vivir en un mundo donde la mayoría de sus conocidos no tienen ese problema y pueden comer de todo

─Pobre angelito─ musitó la mujer apenada ─Si quieres puedes venir a comer conmigo las veces que quieras─ menciono con una sonrisa

─¡¡Si!!─ exclamó con algarabía y algo de comida en su boca ─¿Puedo mama, puedo?─ pregunto hiperactivo ─Me portare bien, lo prometo─ suplico mostrando sus ojos de cachorrito

─Esta bien─ respondió su padre llamando la atención de la chica ─Si eso te hace feliz, y a los señores Agreste no les molesta, podrás hacerlo─ finalizo posando su mano en la cabeza del niño

─Será un placer tener a Lució por aqui─ replico Adrien fijado su vista en Nathalie ─Si eso te hace bien─ agrego posando su mano sobre la de la mujer

─Claro que si─ respondió con una sonrisa

─¿Entonces puedo decirte abuela?─ soltó el menor sorprendiendo a la mujer

─¡Lució!─ lo reto su madre, este se encogió de hombros

─Claro─ interrumpió la adulta ─Nada me haría más feliz─ replico con una gran sonrisa pintada en su rostro

─Abuela Na─ grito con felicidad viendo a su madre con picardia

─Espero que Sabine no se ponga celosa─ bromeo mientras continuaba comiendo

─La abuela Sabi es muy buena, ella sabe compartir─ agrego tiernamente llevando otro pedazo de comida a su boca

─No hay duda un es hijo tuyo chica─ lanzó la castaña ─Tan bueno y noble como tu

La cena continuo en silencio, de a ratos alguna que otra broma de parte de los varones, pero nada más que eso. La velada finalizo más que perfecta, los empleados levantaron la mesa y los demás fueron hacia la sala, para reposar un rato, y esperar el café que Nathalie insistió en tomar.

─A la tía Juleka no le gusta compartir─ explicó Lució viendo la cara de insatisfacción de Alya

─Vamos Lució, Juleka no está aqui, no se va a enterar─ trato de convencerlo, el chico negó

─Soy el príncipe de la tía Juleka, y engañarla con otra esta mal─ dijo de forma tranquila mientras se cruzaba de brazos

─No la engañas, no puedes tener solo una tia─ argumento seria, el joven miro a su madre

─Es cierto─ dijo esta al ver la mirada de curiosidad el infante ─De parte de papa solo tenes a la tía Juleka porque el no tiene más hermanas─ hace una pausa ─Y como yo no tengo hermanos, y Alya se asemeja a una, ella puede ser tu tia también, si tu quieres

─Si me llevas al parque, puede que te deje─ replico picaro

─¿Al parque?- re pregunto ─Te llevare donde quieras, solo dame ese honor─ suplico

─Esta bien tía Alya─ dijo tiernamente

Los adultos rieron al ver la leve discusión que estos tenían, sin dudas ese niño les daba mucha alegria, era la cuota de color que le hacía falta a todos

Tiempo después el infante mostró tener sueño, ya había pasado bastante su hora de dormir, Nathalie con mucha astucia le pregunto a sus padres si no les molestaba que acostará al pequeño en lo que solía ser el viejo cuarto de Adrien, estos no la quisieron contra decir y aceptaron, además de la reunión se habia vuelto bastante agradable y no había intenciones de retirarse por el momento.

─¿Y Adrien estas soltero?─ pregunto el hombre haciendo que su novia se tensara, no era necesaria esa pregunta, ahora se daba cuenta de donde Lució había sacado su lado curioso

─Soltero y sin apuros─ contesto pícaro viendo levemente a la azabache

─Loco, el modelo más codiciado de París soltero, es de no creer─ agrego tomando un sorbo de la taza con café

─Hace un par de meses tuvo una pretendiente─ se escuchó decir a la voz de Nathalie entrando en la sala ─Pero deberían haber visto la forma con la que la rechazo─- hizo una pausa para sentarse en el centro de la sala siendo observada por la mirada tajante del rubio ─Solo diré. . .que todo lo aprendió de su padre─ finalizo con una sonrisa

─En serio deberían haber visto eso─ interrumpió David ─Hasta yo lloré con lo que dijo

─Ya callense, no es ciero, solo dije la verdad─ bufo molesto

─¿Y que le dijiste?─ preguntó el rockero dudoso

El rubio enrojecio y desvío su vista apenado

─Que no era lo suficientemente buena para ocupar el lugar de mi ex novia, que se olvidará de mi, porque jamás me iba a fijar en ella, ni estando loco─ hace una pausa ─Y que si no quería tener que pasar por un proceso judicial que se aleje lo más que podía de mi, y que si era posible se olvidará también de la marca Agreste porque ni siquiera era buena para usar nuestros vestidos.

Un silencio incómodo se formó en el lugar, todos se quedaron viéndolo fijamente, de verdad fue cruel con esa chica.

Miraculous: Las Crónicas de Dark Queen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora