Eres Tu La Única Persona A La Cual Yo Amo - Fanfic- (Rin×Len)

Capítulo XLV - Helado con sabor a tocino.

Rin me llamó para obligarme a ir a mi casa, de lo contrario ella iría a buscarme, como no quería que nada le sucediese, me encamine a la casa de Lilio, al llegar allí él fue el primero en recibirme.

-hijo, volviste – me abrazo Li

-no lo hice por ti.

-ven.- Rinto tomo mi brazo, dejándome en un cuarto. -esta es tu habitación, deje en tu escritorio comida. - me informo.

-¿Por qué lo haces? - lo interrogue.

-yo no te odio. - contesto

-¿no me odias?

-eres mi hermano- tal vez Rin tenia razón respecto a que Rinto necesita un hermano.

-gracias. – sonreí

-si necesitas algo estoy en la habitación aledaña a la tuya- sonrió – descansa.

-tu también. – salió Rinto. Llame a Rin. – vez, te dije que estoy en mi casa

-ahora si estas en tu casa.

-siempre estuve en mi casa.

-Len, por favor no me mientas a mi.

-lo siento Rin, solo no quería que estés preocupada por mi.

-idiota, ¿Por qué escapaste de tu hogar?

-hablemos de eso en la escuela, no quiero volver a enfadarme.

-ok.

-habla conmigo si- le pedí a Rin, como un niño caprichoso- hablar con mi Rinny me hace olvidar de mis preocupaciones.

-me sucede exactamente lo mismo al hablar contigo, pero mi corazón no deja de latir cuando platicamos- dejo de charlar por un momento – L-l-e-n...

-¿si? – ¿le sucede algo? Esa forma de hablar me recuerda a...

-M-me gu-s-s-tas

-esta vez no titubeas tanto. – me reí- Tu tam-bién me... gus- tas

-se que esta vez no hay ninguna probabilidad que me rechaces.

-nunca te rechazaría, así que no tengas miedo de decirme lo que sientes. – me alegre -¿sabes que por mínima que sea tu acción, logras robar un pedazo de mi corazón?

- me alegra tenerte en mi vida, me haces muy feliz, te aseguro que lograré robar tu corazón. – Desvíe mi mirada sonrojado, y pude observar que era demasiado tarde.

-Rin, ya es demasiado tarde.

-tienes razón, debo ir a dormir si no mañana no podré despertarme.

-descansa mi linda Rinny, ten dulces sueños.

-Tu también ten dulces sueños, mi príncipe amarillo.

-no hace falta que me desees dulces sueños, si ya sueño contigo.

-yo también soñare contigo. Mañana me cuentas que soñaste, pero que no sea nada pervertido. Adiós Lenny.

-hasta mañana Rinny.

En la mañana baje a desayunar con esa mujer, que me dio una bofetada, la cual dejo una marca en mi rostro, me dije a mi mismo que no debo reaccionar ante sus provocaciones, la ignorare todas las veces que sea necesario.

-¿ya te cansaste de intentar llamar la atención y volviste?- pregunto mi supuesta abuela, aunque prefiero llamarla por su nombre, Ann, nunca sentí la necesidad de insultar a alguien con todas mis fuerzas, pero me reprimí, creo que no resistiré un día mas a su lado, así que la ignore. – así que tu única alternativa es ignorarme, que idiota eres. -vamos Len, respira, cuánta hasta diez, para calmar mi ira contar hasta diez era poco, como mínimo creo que debería contar hasta el millón  - ¡¿CUANDO VENDRÁ LA ZORRA DE TU MADRE CON LA COMIDA?!- ahora si que no me quedo callado, me levante de mi asiento con una mirada amenazante.