Capítulo XXIV

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—¿Cómo estás? —trató de preguntar de la forma mas dulce posible y así poder eclipsar la ira.

—Mal —le contestó secamente.

—¿Por qué?

—¿¡Por qué!? Todo lo que acaba de pasar es horrible.

—Sé como te sientes. Oliver...

—Oliver, Luna, Neville, Merlín sabrá quienes más desaparecieron en Hogsmade...

—Draco —dijo a sabiendas de lo que iba a pasar.

—No lo menciones —se secó las lágrimas y se sentó en su cama mientras negaba levemente con la cabeza.

—¿Por qué no? —Ginny la siguió.

—Me da asco el pensar que él formó parte de este plan malévolo.

—¿Y si era contra su voluntad?

Hermione levantó la vista, sus cejas formaban una linea.

—¿Qué?

—Tu sabes, su padre es un... Eso. Tal vez él o Quien-Tu-Sabes lo obligó.

—¿Qué te hace creer eso? —sus cejas se relajaron.

—Tal vez lo obligó por el simple hecho de que está cerca de Harry.

—Tal vez por eso inició todo el cuento de Pansy y de los celos... —su voz empezó a quebrarse— Lucius Malfoy sabe que soy cercana a Harry y de seguro se lo dijo a Quien-Tu-Sabes. Era la oportunidad perfecta y utilizó a Draco para que su plan funcionara al cien por ciento.

—Hermione, sé que eso suena lógico pero ¿cuando lo entenderás? Dracoestáenamoradodeti. Tú lo sabes, él lo sabe, yo lo sé, todos lo saben ¿No es suficiente?

—Yo no lo sé.

—Ay, por favor, está la forma en que te mira, cómo te habla, cómo te espía... —Ginny contaba con los dedos pero Hermione la interrumpió.

—¿Me espía? —sus ojos se abrieron.

—Cuando estas desprevenida él te observa fijamente y no aparta los ojos, parece un desquiciado o algo... —Hermione soltó una risita y la sonrisa se quedó en su rostro, después de todo, ella si estaba enamorada— Y tú tienes esa sonrisa de chiquilla enamorada todo el día.

—Ginny.

—¿Qué sucede?

—Lo amo. Pero no puedo dejar de pensar en Oliver...

—¿¡Qué!? Hermione, no te creía así, no puedes estar con ambos a la vez eso es...

—¿Quién esta hablando de eso? Oliver esta en quien sabe dónde y no puedo hacer nada para encontrarlo.

—Lo haremos —le dijo reconfortándola mientras le tocaba el hombro.

Un susurro se escuchó en la Sala Común mientras Ron Weasley se despertaba y se levantaba de la butaca.

El fuego ardía, las llamas aún estaban vivas. Los susurros provenían del fuego. Pero Ron lo ignoró.

Entonces la cara de Draco Malfoy apareció en las llamas.

Ron dio un brinco, estaba a punto de gritar pero Draco intervino.

—No grites, Weasley, no quiero que nadie de tu casa sepa que estoy aquí, soy un cretino.

—Lo eres.

—¿Dónde esta ella? Necesito verla, debe estar alterada —le dijo sin tomarle importancia al insulto.

—¿Hermione?

—Es obvio, cara pálida.

Ron giró la cabeza y vio a Hermione plácidamente dormida en otra butaca, ella había estado ahí desde hace casi una hora, luego de hablar con Ginny y llorar un poco más.

—Estábamos durmiendo.

—¿Tu y ella? —estaba empezando a molestarse.

—¿Qué? ¿Ella y yo? No... Quiero decir, estábamos charlando y cosas así, se nos paso el tiempo y se quedó dormida...

—¿Yo qué? —Hermione se había despertado y estaba bostezando al lado de Ron mientras estiraba los brazos, finalmente vio a Draco— ¡Por Merlín! ¿Que haces aquí, bebé?

Era la primera vez que ella le decía "bebé". Draco y Ron se quedaron atónitos y ella pasaba un mechón de su cabello detrás de su oreja.

—Estoy bien, estoy en casa... —Hermione asintió sin saber que decir, Ron estaba de más, pero no iba a dejar a Hermione sola. Todo quedó en un silencio incómodo. Draco decidió hablar— Élesta aquí.

¿Él? —preguntó Ron.

—Sí, Weasley, él. Dime... ¿Nos podrías dejar a solas? Tengo algo muy importante que decirle a Hermione...

—No lo creo —se cruzó de brazos.

Draco estaba nervioso, después de tanto tiempo le iba a dejar en claro a Hermione todo lo que sentía por ella. Pero Ron se rehusaba a irse. Y eso lo ponía mas nervioso.

—Escucha Draco, Ron ha estado algo gruñón, al igual que todos, pero es porque estamos alterados, ¿es demasiado importante? Su compañía me tranquiliza.

—Olvídalo, no es nada.

Y es que Ron siempre es el problema. ¿Por que ella siempre esta a la defensiva cuando se trata de Ron, pensó, pretende odiarlo pero aun así lo defiende y hace demasiado por él.

Su cara desapareció de las llamas sin decir adiós, el fuego se apagó y Hermione bostezó.

Según ella, no era nada muy importante, tal vez sólo quería disculparse. Pero era más que eso.

Mucho más que eso.

A un Paso del Amor -EDITANDO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora