Capítulo VII

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Hermione la abrió, pero no se sorprendió, ni se entristeció, entendió a la perfección y caminó tranquilamente a la puerta, donde se topó con alguien, no era nada más ni nada menos que Ron Weasley, por segunda vez en el lugar correcto.

-¡Ron! -dijo ella abrazándolo-

-Hola... Uhm -dijo el zafando su abrazo porque pudo ver a Lavender escondida.

-¿Qué pasa?

-Debo hablar de algo muy importante contigo es sobre...

-Pero Ron, ahora no puedo, debo ir a hablar ahora con...

-Draco -dijeron los dos al unísono- ¿¡Qué!?

-Debes tener cuidado, trama algo y no lo veo de fiar.

-Nunca lo has visto como a alguien de fiar.

-Sí... Pero es enserio, debes... Espera. ¿Irás a hablar con él?

-Tengo unos asuntos pendientes... -dijo desviando la mirada del oji-azul, pero no pudo, de pronto se los empezó a imaginar grises, grises como la luna, grises como los de Draco, su pelo rojo como el fuego fue cambiando a un rubio, su piel se puso un poco más pálida, porque de por sí ya era pálida, sus facciones se hicieron más finas, ¿Qué diablos?

-Hermione... ¡Hermione! ¡HERMIONE! -gritó Ron tratando de llamar su atención.

-¿Qué pasa? -de pronto la cara de Draco desapareció y apareció la de Ron.

-¿Estás bien? Creo que deberías recostarte -dijo Ron ilusionado, tal vez olvidaba lo de Draco.

-¿Estás loco? Es un día perfecto, el sol brilla, no hay clases, y... Creo que saldré al Lago un rato, ¿oíste? Sería un buen día para que salgas con tu amada novia, Lavender-dijo Hermione mientras empezaba a caminar por el pasillo, Ron solo la siguió con la mirada.

-Pero...

-Apropósito, tiene buena voz, deberían hacer un dueto, aunque cantes pésimo.

-Yo... Hermione.-Demasiado tarde, ya había desaparecido en los pasillos, en ese momento, Lavender se tiró a sus brazos, a pesar de la fuerza de Ron, cayó al piso junto con ella, estaba muy ocupado procesando todo.

-Won-Won, ¿dónde estabas?

-En el castigo, ¿no era obvio?

-Ronie, no seas indiferente conmigo, haz de cuenta que soy como tu mejor amiga, cuéntame todo, se sincero, como si fuera Hermione...

-Si fueras Hermione...-dijo "Ronie" entre dientes en un volumen casi inaudible.

-¿Cómo dices?-preguntó ella frunciendo el entrecejo.

-Nada, ¿Qué tal si vamos a caminar y luego al Lago?-preguntó Ron con una sonrisa sincera en su rostro.

-Me parece perfecto Won-Won-dijo mientras tomaba su brazo y caminaban por todo el castillo.

Mientras tanto una castaña de ojos color miel caminada un poco apresurada hacia el Lago a esperar a el rubio que respondía al nombre "Draco".

A llegar ahí busco por todos lados, cuando al fin lo encontró, estaba a la orilla del Lago tirando rocas, esperando que rebotaran, lo cual no funcionó.

-Hola-dijo ella como lo haría frente a cualquier persona.

-Hermione-dijo Draco dejando caer la roca que tenía en las manos y cayó en su pie, por su mala suerte era un poco más grande y más pesada, acto seguido empezó a saltar en un pie tomando el otro con la mano- Mier...

A un Paso del Amor -EDITANDO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora