Capítulo XIX

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Cuando todos los alumnos volvieron a Hogsmade, entre ellos Draco y Hermione, Hermione decidió ir a Cabeza de Puerco, donde Harry, Ron y chicos de otra casas estaban reunidos, para planear las clases que daría Harry.

Cuando Hermione entró a Cabeza de Puerco todos estaban ahí, eran alrededor de veinticinco; entre ellos estaban Neville, Dean, Lavender, Parvati y su gemela Padma, Cho y Susan, junto a Harry estaban Ginny y Luna, junto a Ron estaban Katie, Alicia, Angelina Fred y George, estaban más chicos de otras casas que recordaba haber invitado pero, como era de esperarse, no había ningún Slytherin, Hermione no tuvo el tiempo suficiente para detenerse y tratar de recordar el nombre de todos, sólo reconoció a los prefectos de las otras casas: Ernie Macmillan y Hannah Abbott de Hufflepuff y Anthony Goldstein y Padma Patil de Ravenclaw.

-Hermione -saludó Harry-, pensé que lo habías olvidado.

-Claro que no -dijo Hermione un poco nerviosa, la verdad si lo había olvidado, trató de buscar un lugar alejado de Lavender y Ron pero la mirada del pelirrojo no la dejaba en paz, finalmente se sentó en medio de Dean y Neville.

-Llegas muy tarde -dijo Luna despreocupada y sus ojos saltones se abrieron más. Habían muchas botellas de cerveza de mantequilla en el piso casi vacías.

-Ya lo sé -dijo Hermione en un tono muy frío, luego se dirigió a Neville y le preguntó en voz baja-. ¿Que han hecho sin mí?¿Harry ya admitió que todos los logros que ha hecho no es sólo suerte?

-Sí, pero te necesitábamos para saber que día podríamos reunirnos. Harry dice que ahora que sales con Draco tal vez podrían unirse algunos Slytherins a nosotros, a nadie le

pareció la idea, pero entre más seamos será mejor -Neville le contestó en el mismo tono.

-¿El dijo eso? Pero si el... -Hasta ese momento Hermione había olvidado que Harry estaba enfadado con ella, al parecer el también lo había olvidado.

Neville noto que Hermione tenía la mirada perdida, como Luna, y decidió seguir hablando.

-Dean y yo creemos que sí esta saliendo contigo significa que si hay algo donde debería estar su corazón -Hermione había vuelto a la realidad pero no contestó-. Ya sabes, tal vez ahora podríamos hablarle, aunque lo creo imposible... -Neville suspiró- No me quejaría si pudiera hablar con alguien más que no sea de nuestra casa, o Ravenclaw y Hufflepuff... ¿Le dirás?

-Ahh, ummm, creo que... Bueno, lo intentaré -tal vez funcionaria, si Draco no quisiera arrancarle la boca a ella y a Ron con sus propias manos

-Genial, ¡Oye Harry! -Neville ya había levantado la voz como para que todo el bar lo escuchara- ¡Hermione hablara con los Slytherins! -todos giraron la cabeza hacia Hermione casi al instante.

-¿Lo harás, Hermione? -la persona con la que menos querría hablar Hermione era la misma que le había hecho la pregunta; Ronald.

-Tal vez, espero que quieran -dijo Hermione, luego se dirigió directamente a Ron y le dijo algo en un tono más bajo-. Espero no estén enfadados...

Pero Ron sabía que con el "estén" se refería a "esté", y con "Slytherins" se refería a uno sólo.

-Torposolos -dijo Luna observando las cabezas de todos.

-¿Que dices, Luna? -preguntó Neville.

-Hay muchos Torposolos aquí -dijo otra vez, pero ahora señalaba muchos lugares, realmente no había nada pero sabía que lo que acababa de decirle Hermione a Ron era entre ellos dos-, por allá- esta vez señaló hacia la ventana más cercana, todos tenían la atención fija en la ventana, tratando de ver algo sobrenatural-. Observenla fijamente sin distraerse.

-¿Sabes, Ronald? No me extrañaría que más de una persona quisiera matarte, incluyéndome.

-Vamos, Hermione -Ron hablaba con demasiada tranquilidad-, no te quejaste.

-¿De qué hablan, Won-Won? -preguntó Lavender al mismo tiempo que todos giraban la cabeza.

-De nada, cariño, pero quisiera hablar con Hermione a solas -Lavender dudó un momento-, necesito ayuda con... Algo.

-Esta bien, Won-Won, no te tardes mucho...

-Te aseguramos -empezó George.

-Que no podrían -continuó Fred.

-Llegar muy lejos -siguió George.

-Sin un par de estas -finalizó Fred señalando una de sus botellas de Cerveza de Mantequilla.

-Cállense los dos -dijo Ron, impaciente-. Hermione, podrías...

-Como quieras -interrumpió Hermione indiferente.

Ambos se levantaron y todas las miradas se fijaron en ellos. Un vez fuera del pub Ron empezó a hablar.

-Haber... ¿Por qué tan gruñona?

-¿Que por qué tan gruñona? ¡Haz arruinado todo, Ronald! -Hermione estaba apunto de gritar.

-Tranquila, Hermione, no hay porque gritar -Ron trataba de tranquilizarla.

-Ron, arruinaste todo, Draco no quiere ni siquiera dirigirme la mirada.

-Hermione... Eso de que Drac...

-¿Eso de que Draco qué? -interrumpió la voz de un rubio- ¿Que diablos están hablando de mi?

-Escucha Draco... Déjame terminar antes de que empieces con tus cosas.

-Genial, dramitas de pareja -se quejó Ron mientras cruzaba los brazos y pretendía no estar presente.

-Tengo un problema -ella se quejó.

-¿Y? -le contestó tan frío como siempre.

-Me enamoré de ti, pero fue sin querer.

-Yo no...

Draco estaba apunto de terminar la oración, pero muchos gritos amortiguaron su voz.

Todos los alumnos que se encontraban en las tiendas y demás salieron de inmediato a observar el Cielo, ahí estaba la marca, su marca, la Marca Tenebrosa.

Draco sintió una quemazón en el antebrazo izquierdo e inmediatamente desapreció en el aire en una nube oscura.

Ron y Hermione se miraron sorprendidos, ni la marca ni el que Draco desapareciera era buena señal.

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Sé que este capítulo es demasiado corto, pero ya se viene lo interesante y estoy corta de inspiración.

Cambiando de tema, estoy trabajando en algo nuevo, se llama Cosas y, prácticamente, escribo todo tipo de cosas. Ahí tengo una sección de esta historia, y pueden entrar a aclarar sus dudas y eso en la sección Preguntas y Respuestas.

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A un Paso del Amor -EDITANDO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora