Small Bump

XXIV. Julio.

- Ahhhh... Frank...- mi gemido se ve amortiguado por la caída del agua de la ducha. Apoyo mi cabeza en los azulejos e inmediatamente las lágrimas comienzan a rodas por mis mejillas. - Genial Gerard Way, putisimamente genial... hasta cuando te masturbas terminas diciendo el nombre de Frank...- siento a mis hijos revolotear en mi interior. Hoy han estado demasiado inquietos y revoltosos. La verdad es que uno de ellos... no sé si la niña o el niño, será futbolista, lo puedo intuir por las patadas que me da y que no me han dejado dormir.

Salgo de la ducha y me coloco el uniforme escolar.

Es viernes... y falta exactamente una semana para el bendito baile de graduación de Bert, baile por el cual me ha roto las pelotas desde que empezó julio.

Junio paso como en un suspiro... simplemente fue un ir y venir de emociones, especialmente cuando, tomé valor y le conté a mi hermano sobre lo que se venía.

**Flash- back:

- Solo aprieta donde sale la cámara de video en el WhatsApp de tu hermano y déjate de pendejadas. - miro a Bert con un puchero y siento las lágrimas agolparse en mis ojos- oh no, no, no, no, no vas a manipularme con tus ojos de perrito bajo la lluvia y ese puchero tierno. Anda, llámalo ya, lo has dilatado demasiado- y el muy condenado, aprieta él el botón. Da un tono, dos, tres y de pronto el puto sonido de conexión. Mikey va a matarme.

- Hola...- pero no es Mikey quien atiende el teléfono. En la pantalla del computador de Bert aparece el rostro de una chica de ojos sonrientes. Es rubia y se ve tan nerviosa como yo- Mikey se está duchando y yo... yo pensé... pensé que quizás era importante... por eso... yo conteste... pero, si quieres puedo cortar ahora... ¿Qué estoy diciendo?... sí, voy a cortar ahora, disculpa, yo... que idiota...

- ¡Epa!, ¡Para! - me largo a reír, porque todos mis nervios se esfumaron en cuanto vi que ella esta muchísimo más nerviosa que yo- Tú debes ser Kristin Colby ¿cierto? - asiente mientras se muerde el labio y mira a sus espaldas. Insisto, la chica sonríe con los ojos- ¡Hola! Soy Gerard, el hermano de Mikey, pero me imagino que lo sabias, así como yo sabía de ti- y me sonríe. Supongo que aún no puede hablar, la noto muy nerviosa- ¿Mikey está en la ducha? - asiente- bien... mejor así- y mi suspiro se ve cortado por ella.

- ¿Puedo ayudar en algo? - que tierna... tomo aire

- - prefiero que hablemos hasta que él salga de la ducha y luego se lo digo a ambos... ¿te parece? - cuando va a asentir, veo a Mikey detrás de ella... en bolas- MALDITO WAY! ¡PONTE UN PUTO CALZONCILLO POR LA GRAN MIERDA SANTA! - Mikey pega un salto y Kristin enrojece hasta las orejas, igual que yo- me cago en ti y todos tus muertos.

- ¡Hermanito! - La cara sonriente de Mikey aparece al lado de su, ahora, roja novia- mis muertos son los mismos que los tuyos y dudo que Donald fuese feliz con tu mierda encima...- y me sonríe el gran hijo de perra. Me está colmando la paciencia y no hemos hablado nada.

- Hola...- Bert se coloca a mi lado y Mikey tuerce una sonrisa. Aun no lo pasa del todo.

- Bueno Gee... ¿puedo llamarte Gee? - Mikey acaricia la cabeza de su novia con tanto amor y la chica dista mucho, muchísimo de cómo era Alicia... así que, no me toma ni un segundo en asentir- dijiste que cuando estuviéramos juntos... bueno... creo que tienes algo que decir...- tomo aire con fuerza, Bert toma mi mano y me sonríe...

- ¿Aun tienes la cuna de Victoria? - y sonrío de lado.

Las reacciones de Mikey son dignas de película. Abre primero sus ojos grandes, muy grande y comienza a tartamudear, las manos tampoco están quietas y le pido ayuda a Kristin cuando comienza a botar saliva y pone los ojos en blanco. Cortan la llamada y luego de 3 horas, vuelven a llamar. Mikey tiene los ojos rojos.