Love Trophy

Dong.

Bajé las escaleras y les saludé a todos.

-¡Que guapa estas! Deberías ponerte más vestidos. - Gritaba mi tía. Yo me reí y la di un abrazo. Saludé a mis tíos y a mis abuelos. Llegó Lucia corriendo y la cogí en brazos. Ella me abrazó, esta niña era adorable.

Aún eran las 9 y faltaba gente, asique nos sentamos un rato en el salón a esperarles.

-¿Qué tal con Raúl, cielo? - Preguntaba mi abuela. Oh no, otra vez este tema no.

-Bien, supongo que bien. -Respondí más roja que un tomate.

-¿Bien? ¡Vais genial! Mirar el regalo que le ha echo, son más monos... - Gritó mi madre señalando mi collar. En serio, esto era demasiado horrible. Todos se levantaron para ver mi colgante y empezaron a hablar de como se conocieron ellos y cosas de esas. Mis tíos se conocieron en el cine cuando iban ver Dirty Dancing. Mis abuelos se conocieron en el colegio, y llevan juntos desde entonces, aaw que bonito. Seguimos hablando un rato y en cuanto vinieron mis primos, nos sentamos a comer. Eran casi las 10 , teniamos 2 horas antes de año nuevo. Yo me senté al lado de mi prima Irene.

-Ya me han contado que tienes novio .- Dijo dandome un codazo.

-No es mi novio. - Me seguía poniendo muy nerviosa este tema.

-Ya ya, que bonito. Me lo tendrás que presentar ¿no? Dile que se pase luego. Aunque tendrá que enfrentarse a miles de preguntas. Y encima esta Hugo, que sabes como es él contigo..-Siempre he estado muy unida a él y siempre a alejado a todos los chicos de mi.

-Sí, sí, yo luego se lo digo. - ¡Lo que me faltaba!

Empezamos a cenar, y era todo muy gracioso con mis primos porque cuando pedían algo, en vez de acercarselo, lo alejaban. Eran casi las once y media cuando recogimos la mesa para traer las uvas para las doce. Se fueron todos al salón mientras yo, mi madre y mi tía Adela poníamos las uvas en pequeños cuencos.

-¿Teneis aceitunas o algo así? Son para Lucía.

-Estan en ese armario. -Dije señalando un armario debajo del fregadero. Cogió 12 aceitunas y las puso en un cuenco rosa. Llevamos todos los cuencos al salón y les dimos uno a cada uno.

-Contarlas, a ver si no va a haber 12.

-¡ A mi me falta una ! - Gritaba mi primo Hugo.

-Ten, que yo tengo 13. - Dijo mi prima Irene tirandosela.

-¡Callaos! Que ya empieza .- Se quejaba mi tío Luis. Yo me empecé a reír de los nervios, siempre me ponía nerviosa. Estabamos viendo la televisión y se veia La puerta del sol llena de gente. Todos estaban emocionados por empezar el nuevo año.

Sonaban los cuartos y Lucía empezó a comer , mi tía le gritaba que todavía no pero ella seguía y yo me reía más.

-¡Ahora! - Gritó mi abuelo.

¡Dong! ¡Dong! ¡Dong! ¡Dong! Casi me atraganto ¡Dong! ¡Dong! ¡Dong! ¡Dong! ¡Dong! ¡Dong! ¡Dong! ¡Dong! Acabaron y mientras todos gritaban ¡FELIZ AÑO NUEVO! yo parecía un hamster con los mofletes llenos de uvas. Y mientras me abrazaban todos y me decían que prospero año nuevo y esas cosas, yo dijería las 12 uvas.

-Hija, tragatelas ya y ven a darme un abrazo. - Me gritó mi abuela. Yo pensé mal y casi me muero al reírme con la boca llena. Tragué como pude y la di un abrazo.

-Y ahora..¡FIESTA! - Chilló mi prima. Todos cogieron un vaso y empezaron a echarse cosas. Yo le eché a Lucía una especie de zumo de frutas. Irene me echo en mi vaso y empezamos todos a bailar. Sonaba reggueton y bachata, odiaba bastante esa música. Pero era nochevieja, asique no pasaba nada. Empecé a bailar con todo el mundo y a hacer el tonto .

Yo empecé a beber, varios vasos. No recuerdo bien cuantos. Yo seguía bailando y haciendo el tonto.

-Hija, ve a la puerta. - Me dijo mi madre.

Abrí la puerta y ahí estaba.

-¡Raúl! ¡Feliz año nuevo! - Grite tirándome a sus brazos. Bueno, cayendo ya que no me di cuenta del pequeño escalón que había en la puerta de mi casa.

-Igualemente. Pero, ¿estas borracha?

-No, bueno, puede que un poco. - Dije riendome y a él se le contagió la risa. Miró su reloj y sonó un PIP, y justo me besó. - El beso es a las 12 en punto ¿sabías? No a la 2:13. - Me mostró su reloj y ponía 00:00. - Aaaaaaaaaaaaai. -Grité dandole otro beso.

-Con que tú eres el novio de mi primita. -Dijo Hugo saliendo. Oh no.

-Algo así. - Rió Raúl separandose de mis labios.

-Más te vale tener cuidadito eh, te corto los huevos. - Amenazó con el dedo.

-Oh vamos Hugo, entra y dejanos en paz. -Dije señalando la casa y volviendo a besar a Raúl. Se dió la vuelta y se fue, asique le besé con más ganas.

-Madre mía. -Susurró Raúl.

Metí la mano en su bolsillo, y ¡hurra! tenía un condón. Lo cogí y le llevé a un lado con arbustos.

-¿En serio quieres que nuestra primera vez sea así?

-Es divertido. - Reí. Él sonrió también, y pasó lo que tenia que pasar.

Me arreglé el vestido y el pelo y suspiré. - Mi familia quiere conocerte.

-¿Crees que este es el mejor momento?

Yo me reí y le cogí la mano para entrar en casa. Todos seguían bailando y cantando. Entramos en casa y Raúl empezó a cantar.

-Tan solo quiero darte un beso, y regalarte mis mañanas..- Mientras bailaba.

-Que idiota. - Reí.

Todos se fueron presentando y dandole consejos tipo Si no quieres problemas, no te metas con el fútbol. Luego empezaron el típico de si me hace daño, le matan y cosas similares. Yo quería morirme.

Tras estar un rato en casa con mi familia, me dijo que ahora me tocaba a mi conocer a la suya. Fuimos a su casa y el ambiente era parecido al de la mía. Estaba toda su familia bailando y cantando, pero en vez de escuchar a Romeo Santos escuchaban a Michael Jackson . Me presentó a sus tíos y a su abuela. Luego me presentó a todos los primos pequeños, todos extremadamente adorables. Vino un niño, Pablo creo que se llamaba y me preguntó que si era la novia de su primo Raúl. Me dijo que haciamos buena pareja y yo pues me moría de amor. Carlos estaba en casa de Marta, creo. Estuve un rato bailando con ellos y cantando. Su familia molaba.

Eran las seis y pico de la mañana, y decididmos ir a por churros. Así, a lo loco.

-Aún no me has dicho nada de mi vestido. - Dije dando una vuelta.

-Estas preeeeeeeeciosa. No tanto como cuando ibamos a tu casa a buscarte y abrías solo con una camiseta, pero estas realmente guapisima.

Le respondí con un beso y compramos unos churros con chocolate. Nos los comimos en un banco mientras hablabamos y nos reiamos.

-Creo que debería irme a casa y dormir..todo el día. -Dije yendo de nuevo a casa.

-Digo lo mismo. -Me dió un beso y se fue a casa. Cuando llegué, ya no había nadie.¿Había pasado media noche fuera? Solo estaba mi primo Hugo tumbado en el sofá y mi madre debía estar en la cama. Me fui a mi habitación y nada más tumbarme me quedé dormida.