¿Que se supone que debo hacer? ¿Aparentar como si nada hubiese pasado y sentarme a cenar con mi "suegro"? Bueno, con el y los dos gorilas que permanecen a su espalda protegiéndolo. Oh y como pasar por alto a Tamara de pie a su lado.
Dion sonríe al verme, mas bien sonríe al ver mi vientre ya crecido mientras aprieta la mano de su mujer sobre la mesa.
Monica en cambio no parece muy contenta con la presencia de Dion y aparta la mano de la suya en un brusco movimiento.
¿Que pretende? ¿Que le recibamos con los brazos abiertos después de todo?
Pero aun que todos sepamos de que es capaz Dion, hay una persona que no entiende nada y mira a papá con el ceño fruncido esperando una explicación.
Si, esa persona es mamá. Ella no sabe quien es, por que se encuentra sentado en nuestra mesa de navidad o por que tiene guardaespaldas. Preferiría que ella no se enterase nunca, pero sabia que este momento iba a llegar.
Dion señala las sillas desocupadas pero me niego a sentarme ahí con el. No pertenece a mi familia y nunca lo hará. Mucho menos esa maldita Tamara que ni siquiera debería estar aquí. No quiero verla en mi casa.
-Vamos pequeña Josy, no voy a comerte.
-¿Que mierda quieres Dion? Creo que no hace falta este cinismo y falsedad.
-Oh bueno, cuanta agallas tienes cariño, entonces te diré que quiero lo que es mio. A mi hijo, mi mujer y ese bebé que llevas dentro, también es mio.
¿Como dices? ¡Ja!
-No te atrevas a pensar siquiera en mi hijo. -gruñe Ivan tomando mi mano entre la suya con fuerza. -Antes de que tu lo toques, te corto las manos Dion.
-Así que ya no soy papá para ti.
-¿Lo fuiste alguna vez? Monica si es mi madre, pero tu, me has usado a tu antojo queriéndome educar a tu imagen. Pero no te diste cuenta, nunca he sido como tu del todo y eso es gracias a tu mujer, mi madre.
-Así que ambos ahora se pusieron en mi contra. -dice Dion mirando a Monica. -Y todo por ella.
Su mirada vuelve a mi y puedo ver como intenta aguantar la rabia hacia mi persona. Y soy consciente que si no me mata en este preciso momento es por que quiere a mi bebé, pero no lo tendrá. Por encima de mi cadáver toca un solo pelo de mi hijo.
-Si, por ella. ¿Y sabes que? Bendito día en el que se perdió dentro del Bronx.
Quiero sonreír, pero debo controlarme y se que no es momento para eso. Amo que Ivan me defienda y quiera estar junto a mi por encima de todo, pero espero que sea consciente de que su padre es nuestro único enemigo.
-Maldigo ese día. -murmura Tamara consiguiendo que toda mi atención ahora pese sobre ella.
-¿Por que maldices si tu nunca ibas a tenerlo? -digo consiguiendo que todos me miren.
¿A caso no la han escuchado? Quizás es mi problema que tengo demasiada obsesión hacia su persona y no pierdo movimiento de ella.
-¡Cállate perra! -gruñe recibiendo una mirada de advertencia por parte de Dion.
-¿Perra yo? La que lleva el bozal y es callada por su dueño eres tu querida.
Tamara en un rápido movimiento saca su arma y me apunta pero el cuerpo de Ivan no tarda en reaccionar y me tapa. Escucho a mamá chillar y puedo ver como papá la rodea con sus brazos mientras Dion se pone de pie y le arrebata el arma.
Jadeo en sorpresa cuando Dion la abofetea y su rostro gira por el impacto consiguiendo que Monica se ponga de pie. Y algo me dice que ella jamas vio a su esposo hacer algo así.
Si, Dion es un cabrón, mata a su enemigos, pero parece que Monica nunca le vio golpeando a una mujer. ¿Que ha cambiado ahora? ¿Por que primero me dispara a mi y ahora golpea a Tamara?
-¿¡Pero que demonios pasa contigo¡? ¿¡Quien demonios eres Dion¡?
-Mi amor...
-No, no te atrevas a dirigirme la palabra. -dice esta alejándose de Dion y camina hasta Tamara.
No siento lastima por ella, pero tampoco puedo alegrarme. Tamara soba su mejilla aun impactada por lo que acaba de suceder, algo que no se esperaba. Nadie lo esperaba.
Pero dejo de mirar la escena cuando Sarah se pone de pie y entre sus manos lleva una pequeña pistola que eleva y apunta directamente a Dion. ¡Oh dios! Esa pistola me suena, pero no puede ser la que Ivan me quitó a mi.
Pero se de alguien que posee dicho modelo, Marcel.
Los gorilas de Dion no tardan en tomar sus pistolas y apuntar a Sarah, acto que consigue tensar los músculos de Ivan. A el le importa, durante todos estos meses el cada día se ha preocupado mas y mas por su verdadera madre.
Y me siento orgullosa de el, de como ha acabado aceptando a esta mujer que le dio la vida y siempre lo amó.
-Sabia que uno de estos días tendría la oportunidad de tenerte tan cerca, cara a cara. Tu me arrebataste la vida, a mi pequeño. Es justo que yo te quite la tuya.
-Mamá, por favor baja el arma, no lo hagas, no tu.
Dion mira en sorpresa a Ivan, al igual que todos nosotros ya que son palabras que jamas pensamos oír de el. ¿Llamó mamá a Sarah?
El rostro de la mujer comienza a llenarse de lagrimas pero no desiste en apuntar al hombre que se quedó con su bebé.
-Mi niño. -dice mirándolo por un breve momento. -Protege a esa criatura Ivan y protege a tu chica. Siempre te amé, no lo olvides. Haria lo que fuese por ti.
-Mamá, por favor...
-Te amo Ivan.
No, demonios no.
No soy consciente del momento en el que Ivan cubre mi cuerpo rodeándome con sus brazos debido a los disparos que comienzo a escuchar.
Me encuentro en el suelo, rodeada por gritos y balas perdidas. No puedo ver lo que está sucediendo a mi alrededor, pero temo por mis amigos, mi familia. Temo por Sarah.
Ivan lo intentó, lo intentó evitar pero lo que está sucediendo tarde o temprano iba a pasar.
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The Bronx © +18 | Libro #2 | Bill Skarsgård
RomanceAparentar ser quien en verdad no es siempre se le dio bien. Fingir es facil cuando llevas toda la vida haciendolo. ¿Pero cuando caerá su mascara? No todo es para siempre y el, descubrirá que ella es su debilidad. "Las apariencias engañan y tu eres...