"Eh, creo que ya te he llamado 10 veces. Y sí, estoy siendo realmente insistente, pero ¿Qué sucede? Quedamos en que iríamos a la feria del pueblo y eso fue hace 4 horas... Sólo llámame cuando escuches esto." Dejé el mensaje en su buzón de voz y me sentí patética.
Era literalmente la vez número 10 que llamaba a Stefan y su teléfono no alcanzaba a sonar porque el buzón de voz me atendía enseguida. En la mañana habíamos quedado en que pasaría por mí a las 3 de la tarde para ir a la feria del pueblo y ya eran pasadas las 7. Esto no era un simple retraso, tenía que haber algo más, lo sabía.
En mi cabeza abundaban las ideas y lo único que tenía claro es que no tenía idea qué había sucedido con él. Nunca dijo o mencionó nada acerca de este día, y desde que habíamos comenzado a salir o sea más o menos hace 5 meses nunca había hecho algo así, por ende, mi preocupación era justificada.
"Stefan, no quiero parecer la típica novia desesperada. Pero en serio ¿Qué sucede? ¿Estás bien? Sólo quiero me digas si algo sucedió o no, llámame si es que llegas a escuchar esto. Te quiero." Segundo mensaje en su buzón y ya me odiaba, pero ¿Quién podía culparme por preocuparme? Dejé mi teléfono a un lado y esperé a que sonase. Pero nunca lo hizo.
Busqué su última conexión y había sido hace 6 horas atrás. Conmigo no hablaba desde hace más de 8, ¿Qué había sucedido? Mi estómago se sintió mal de repente y saqué cualquier pensamiento estúpido de mi mente.
De haberle sucedido algo Martha me habría informado, pero ella se había ido por una semana a ver sus hermanos en Belt, ¿Y si Stefan había ido a verla? Tal vez era... De ser así me hubiese dicho que lo acompañase, entonces mi mente hizo clic. Debía hablar con Matt.
"No te preocupes de más, debe haber sido algo menor. Quizá su teléfono se descargó y por eso no contesta." Dani al teléfono intentaba calmarme. Pero a esta altura ya era imposible.
"Dame con Matt." Sentí como el teléfono era pasado a mi primo.
"¿Sabes algo que yo no?" Si algo malo le hubiese sucedido Matt habría sido el primero en saber, pero como mi primo parecía tranquilo y sin ninguna perturbación era obvio que sabía algo que yo no.
"¿Por qué habría de saber algo? Tú eres su novia, no yo." Así que, si sabía algo, conocer tanto a Matt en momentos así era una ventaja. "No Alex, no tengo idea".
"No te creo..." Respondí secante.
"Sólo no pienses tonterías, él está bien." Touché, mi primo sabía algo, pero para mí mala fortuna no me lo diría "Y no hagas preguntas, Alex. Sólo no te preocupes demasiado".
"¿Por qué?" No dijo nada. "Matt, en serio. ¿Qué sucede?"
Escuché un respiro de su parte, estaba quizá un poco ofuscado. Ahora no me interesaba. "Tú no quisiste que él supiese nada de Nicholas y el ritual de cada año". Quería romperle la cara, ¿O sea que justificaba a Stefan y el tenerme en ascuas por lo de Nick? Respiré hondo para evitar insultarlo. "Él también tiene secretos, Alex".
"¿Secretos?" ¿Qué era eso? ¿Stefan me estaba ocultando algo? ¿Qué sabía Matt que yo no? ¿Stefan me oculta algo? Sentí la bilis en mi garganta. Me preocupé toda la tarde porque sí, cuando Stefan sólo me ocultaba algo que Matt sabía...
"Si, Alex. Nada malo. Sólo que no es algo que te incumba." Colgué el teléfono. Stefan me ocultaba algo y por primera vez entendí el disgusto con el tema de Nicholas de su parte.
"No sé qué sucede, pero no creo que sea tan difícil decir "Hola, estoy bien, tuve un problema" o algo así, hablé con Matt y él sabe algo que yo no. Lo entiendo, sucede lo mismo con Nicholas, pero habíamos quedado en algo, los mensajes de voz fueron porque pensé que te había sucedido algo. Llámame cuando regreses o no estés ocupado, sólo quiero ver si estás bien y si mañana nos vamos o no a la casa del lago." Apreté enviar sin si quiera releer el mensaje.
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Demonios: Mi Error Favorito
Teen FictionAlex y Stefan no son exactamente la princesa y el príncipe de cuentos de hadas respectivamente; ambos buscan sólo diversión y libertad, porque con los demonios que cada uno esconde es difícil que algo pueda terminar realmente bien en sus vidas. Se...