El Rey Del Recuerdo *Namjin*

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El consejo estaba en completa seriedad. Miraban a la pelinegra de prominente vientre que estaba parada frente a ellos, esta había pedido hablar con ellos diciendo que tenía información importante sobre su rey.

—Lo que dices es absurdo—JiYong la fulminó con la mirada siendo severo.

—No mi señor, me temo que estoy siendo muy congruente al decir esto—respondió con seguridad.

—Estás haciendo una acusación atroz, si esto resulta ser falso entonces serás acusada de ir en contra de la corona y condenada—soltó con rencor—. No puedes acusar a alguien sin pruebas.

Leeteuk suspiró. —Lo que ella dice JiYong aunque me repudia, no es muy incierto. Tenemos que proceder y lo sabes muy bien. Nuestro deber es nuestro rey.

—Me niego a creer algo así—bufó lleno de cólera—. ¡SeokJin nunca ha hecho nada en contra de su rey!

—Pensar con claridad, mi señor ha estado sano durante años y ahora que se reencuentra con su alteza ha caído enfermo y en estos momentos está inconsciente ¿No les parece eso sospechoso? Al menos hasta que mi señor despierte, deberían poner bajo vigilancia a su alteza, estamos hablando del rey de ScarLanding.

Todos se observaron entre sí, sabían que tenían un protocolo el cual tenían que respetar fuera quien fuera el presunto culpable.

Seungri suspiró con aparente derrota. —Lady Kim tiene razón, debemos actuar conforme la ley. 

—Bien, está decidido, mientras nuestro rey se encuentre en esta situación, su alteza será puesto bajo custodia—asintió Donghae.

—Son unos idiotas—gruñó JiYong—. Saben bien que cuando Namjoon despierte se irá en contra de ustedes.

Los presentes bajaron la mirada pero no revocaron la orden. El general Wang miró con lástima a sus señores, pero hizo una reverencia.

—Está tarde lo traeremos al castillo—dijo con un sabor amargo.

Todos se dispersaron queriendo de repente salir de ahí e implorar que su señor tuviera piedad al despertar. JiYong tomó del brazo a Jisoo quien salía con una sonrisa en el rostro.

—¿Tan desesperada estás que tienes que hacer esto? No respondas hueles a putrefacción, aunque me alegro porque cuando Namjoon despierte seré yo quien le informe que este drama fue tu culpa cariño.

—Yo sólo actuó conforme la ley—dijo fría.

—Yo también niña, la diferencia está que yo soy la ley y tú sólo una zorra con suerte—la miró fijamente—. Esa panza no parece de seis meses sino de siete o más ¿Hay algo que ocultas? Tú caja china no funcionará querida. Yo no creo la fachada que has creado. 

Jisoo lo observó con miedo por un segundo antes de recobrar su postura y salir de ahí. JiYong entrecerró los ojos molesto y preocupado por la seguridad de SeokJin.

SeokJin bajó de su recamara con un traje cómodo y oscuro, todos le miraron sin saber la razón del cambio de vestuario, se había pasado la noche entera en vela llorando después de que el rey había sido llevado de vuelta al castillo. Todos intuían que sus encuentros habían aflorado sentimientos que permanecieron ocultos durante años.

—¿Mi señor? —preguntó Joy acercándose.

—Cuída muy bien de Tzuyu y de YeonJun, posiblemente venga JiYong a supervisar—dijo con voz tranquila—. Si todo sale mal, entonces, deben de localizar de inmediato a ken.

—¿A dónde va?

Justo en ese momento se escucharon los caballos arribando el prado superior. —Él rey está inconsciente y este incidente sucedió en mi palacio ¿Crees que tendrían piedad porque soy rey? No, ellos desconfían de mi y yo ya lo temía, los vi viniendo. 

—Señor no—susurró Irene espantada—. No pueden hacerle esto.

—Pueden—suspiró con un nuddo en la garganta—. No me interesa qué pase conmigo, pero sí con mis hijos, por favor, cuida de elllos en mi ausencia. Si algo pasa tienen la orden de buscar de inmediato a Ken.

SeokJin caminó a la puerta y espero a que la abrieran para salir y esperar frente a su palacio a los guardias reales quienes se veían mortificados con la tarea que se les encomendó.

Jackson bajó del caballo y haciendo una reverencia miró con lástima a su rey.

—Su alteza Kim SeokJin queda bajo custodia del reino de Scarlanding por sospecha de traición ante su alteza suprema, el rey Kim Namjoon.

SeokJin soltó el aire que retenía y asintió.

—Volveré—les dijo a sus damas que vieron entre lágrimas como se lo llevaban.

¿Qué les parece? 😍😱👿🤡

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