—Muy bien... ya que tenemos todo el día juntos... quiero que me expliquen este juego... se ve complicado. —dijo Orión sentada en el suelo con ambos miniños y ellos reían por lo que decía.
—Ya te expliqué mami, —dijo repentinamente Victoria y no le importó, así que siguió explicándole como si nada pasara, pero dentro de Orión había una lluvia de fuegos artificiales rozando el límite del cielo, ya les había dicho que ella no sería su madre y que tampoco quería que le dijeran así, pero si ellos insistían y lo decían sin darse cuenta le resultaba totalmente agradable.—Es muy fácil, se llama Jenga, tienes que sacar piezas sin tirar las demás, si las tiras pierdes, no hay pierde.
—Bien... y si las tiro... ¿puedo fingir que nada pasó y jugar acomodándolas?— les preguntó y los dos rieron histéricamente, las preguntas que ella les hacía, eran desesperantes pero los hacía partirse de risa.
—No mami... solo pierdes— dijo esta vez Chris y siguió con su ataque de risa, Orión parecía darse cuenta que ambos se habían puesto de acuerdo para decirle "mami" pero no le importó.
— ¿Y si quiero sacar todas y solo tiro una?—volvió a preguntar sin mucha lógica y los dos miniños rieron aún más y después ella contagiada, entonces alguien toco la puerta y ella se puso sería al instante. —Niños... atrás de mi. — les ordenó y los tres se pusieron de pie, Victoria de inmediato se agarró de su blusa y Chris de su pantalón, así que cuando Orión se acercó más a la puerta pudo sentir la presencia que se encontraba de tras del ventanal, pero al sentirla especial se relajó. —Ahhh no se preocupen niños, todo está bien. — ella abrió la puerta y un hermosa cabellera rubia se asomaba.
—Hola... ¿Victory, cierto? —le preguntó y Victory asintió con una gran sonrisa.
—¡Bonjour my new sister! Sé alemán, Francés, español, Italiano, Latín y Portugués... pero no sé nada de Egipcio antiguo, perdóname por fallarte de esta manera Orión. —le dijo falsamente triste y sonrió.
—No te preocupes, con que nos entendamos basta, pasa... — Y Victory entró corriendo y abrazó a los niños.
— ¡Maldita sea! ¡Mis sobrinos son los miniños más perfectos de este mundo!— les gritó y los giró en el aire abrazándolos, después se giró hacía Orión quien cerraba la puerta y se dirigía a ella un poco tímida. — ¿Y entonces? Tú y Rick... ¿ya?— le preguntó y Orión se sonrojó. —Hay por favor... conmigo no tienes que comportarte como si fuera la gran cosa, solo soy la loca de la familia, bueno... la única sin magia. — y le mostró su brazalete.
— ¿sin magia?
—Si bueno, que te cuento... nunca hagas hechizos prohibidos o Merlín te castiga...— le dijo con voz graciosa y Orión sonrió. —Tengo prohibido hacer hechizos y conjuros pero... ¡sigo viva! Por cierto... Emerick me envió un mensaje diciéndome que tú estabas sola con los niños, me dijo que te mandara un mensaje, pero vamos, ¡No iba a perder la oportunidad de conocer a la mujer que conquistó la cara de perro de mi hermano!
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Engatozada: Emerick
Fantasia(ENGATOZADA Parte 6) Una linda gata como Orión jamás habría salido de su linda y acogedora casa, tenía una familia que la amaba y su vida era perfecta, ¿Como una gata domestica había terminado en los brazos de Emerick Krentz? Parecían espíritu...