#53

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Pov. Jimin.

Había dejado a Daniela en su salón, me estaba dirigiendo a mi salón antes de que la campana sonara. Ya no me sentía tan inseguro a como me había sentido por la mañana, antes de que fuera por ella. Jungkook el día de ayer había dicho que no vendría a clases hoy, pues tenia que hacer algunas cosas con su madre, se había preocupado, pues Daniela vendría sola a la escuela, cosa que a él no le agradaba, y antes de que alguien mas se apuntara yo lo hice. Me ofrecí para ir por ella a su casa, nadie dijo nada, solo sonrieron y asintieron, solo Seokjin hyung me había mirado algo serio, había bajado la mirada ante su intensa mirada en mí.

Caminé un poco más apresurado, pero en el camino me encontré a esa tipa, la cual ahora mismo y antes, no me agradaba. Lau, la persona que se le había resbalado a Jungkook desde que entraron a clases. Nadie de nosotros la soportaba, y ahora Jungkook se hacia esa misma pregunta, ¿Qué le vio?

-Algo tengo que hacer para separarlos, no puedo dejar que sigan juntos, ya se me ocurrirá algo- había hablado ella a una de sus amigas.

-Dudo que puedas hacer algo, pero allá tú- hablo una de sus 'amigas'. -Nosotras nos vamos ya, el profesor de ingles ya nos amenazo por entrar siempre tarde a sus clases-

Se fueron dejándola sola, me detuve, ella se giro y se sorprendió al verme ahí parado, había escuchado sus intenciones.

-Jamás lograras hacer nada- le dije molesto.

-No te metas, Jungkook solo esta confundido, pero lo hare reaccionar, dejará a esa zorra y vendrá a mí- su sonrisa, formada por sus labios pintados de manera exagerada, no mostraba nada bueno.

-No, jamás lograras separarlos- repetí, molesto. - ¿Sabes por qué? Porque existen dos simples razones, la primera, tú no eres nada a lado de Daniela, y la segunda, y más importante, Jungkook será padre, así que olvídate de...- ella me interrumpió.

- ¿Qué dices?... ¿Esa zorra está embarazada de... Jungkook? - un tic en el ojo y su mirada perdida en la nada me hizo retroceder un poco con el ceño fruncido. -Esa maldita... ella solo quería encadenarlo... maldita, maldita y mil veces maldita-

Habló ella mientras se iba de ahí, dejándome solo. Levante los hombros un poco, empecé a caminar de nuevo solo para dirigirme hacia mi salón. Tarde o temprano alguien tenia que bajarla de su nube.

[...]

Pov. Daniela.

Las clases eran aún más aburridas si Jungkook no estaba a mi lado, pero tenia que tomar apuntes por los dos. Así que eso me mantenía algo más ocupada. En la hora del almuerzo camine hacia la cafetería, sintiendo un escalofrió en mi espalda, de inmediato me gire. Solo me encontré con la mirada furibunda de Lau, bueno, eso era normal. Caminé sin prestarle más importancia, pedí un sándwich de atún y una ensalada de frutas, una limonada como bebida.

-¿Cómo te fue?- me preguntaron  apenas me senté.

-Aburrido, como siempre, creo que este aburrimiento me matara un día- trate de abrir la botella, pero estaba demasiado apretada. Se la pase a Taehyung que estaba a un lado de mí. -Gracias-

-De nada- sonrió, volviendo a comer.

-Oye Daniela, sácanos de una duda, ¿Cuánto tiempo tienes de gestación? - me miro Hoseok.

-Hum, bueno, a lo que dijo el ginecólogo, estoy por completar el segundo mes, es apenas del tamaño de un frijol- sonreí, recordando a mi bebé en la ecografía.

-Muy pequeño aun, pensé que tenías más- dijo YoonGi, quien tenia sus palillos en sus labios.

-No, falta apenas una semana para hacer el segundo mes- sonreí.

Nosotros seguimos comiendo mientras platicábamos de cualquier cosa ya sea de mi bebé o de las clases. El almuerzo terminó y las clases siguieron, yo regresé lentamente a mi salón. Los chicos tenían actividad al aire libre, bueno solo algunoa, los demás tenían que regresar ha sus salones. Ojalá estuviésemos todos juntos así el dia sería más llevadero.

-Oh  rayos, se me olvidó pedirle la calculadora - murmure dándome un suave golpe en la frente.

Había estado tan concentrada en la platica, que había olvidado pedirles una calculadora a los chicos, iría al salón de Seokjin, Namjoon y Suga. Tal vez uno de ellos tenía una. Lo malo de todo eso es que ellos estaban en el tercer y último piso, tedioso subir las escaleras. Di la vuelta y empecé a subir las escaleras.

-¡Ah, contigo quería hablar!- escuche detrás de mí, me detuve en media escalera.

Gire mi rostro con molestia.

-¿Que quieres, Lau?- 

¿Era en serio? Pensé que ya nos dejaría en paz, no estaba de humor para aguantarla.

-Eres una zorra, maldita resbalosa, eres una puta cualquiera- se fue acercando a mí lentamente. -Yo sé que eres una mosca muerta, podrás engañar a todos pero a mí no- suspire.

-Mira, Lau, no tengo tiempo y ni ganas para estar hablando contigo, así  que...- me di la vuelta de nuevo y me dispuse a seguir mi camino.

Pero la mano de ella me sujeto de mi brazo y me giró rápidamente.

-Eres una maldita y me las vas a pagar-

Perdí  el equilibrio, mi pie resbaló del escalón. Todo parecía estar en cámara lenta, la sonrisa maniática de Lau. Yo cayendo, hasta tocar el frío piso.

-¡Au!- aulle de dolor.

Toqué mi vientre, lagrimas inundaron mis ojos. De un momento a otro la espesa negrura llegó a mí, no vi nada y tampoco sentí más ese dolor. Mi bebé, mi precioso bebé, esto no podía estar pasándome. Jungkook, Jungkook te necesito.

My boy [Jeon Jungkook] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora