ᴀ ᴇsᴄᴏɴᴅɪᴅᴀs 《ʀᴜɢɢᴀʀᴏʟ》

| OCHENTA |

●SOBRE●

Karol

Niego rápidamente levantándome, miro como el chico de mi lado duerme tranquilamente, duele mi tobillo al levantarme pero más duele dejarlo atrás. Me seco una lágrima y cojeando logro salir de esa casa, identifico el carro de mi mejor amigo, frunzo mi ceño.

<< ¿Cómo llegamos aquí? >>

—Rafa—murmullo llegando abriendo la puerta de él, que se encontraba durmiendo con la cabeza pegada al timón—Rafael—lo muevo pero nada, le tiro una leve bofetada y él se levanta sobresaltado—Mierda Rafael—susurro, él me mira confundido, hago una mueca mi tobillo dolía un buen.

—Joder Karol, tú tobillo—siento como sale del carro dejándome a un lado con cuidado y luego me toma en brazos—¿Qué mierda hiciste Sevilla?—regaña, río y me encojo de hombros, apoyo mis brazos alrededor de su cuello y me recuesto en su pecho hasta que me deja en el asiento de copiloto.

—No sé Rafa—confieso—solo sé que amanecí a un lado de Ruggero—murmuro, el suelta un chillido cuando llega al asiento de piloto.

—¿Hicieron...cositas?—pregunta mirándome pícaramente, le doy un golpe en su hombro.

—Idiota—murmuro riéndome sin gracias—Solo-du duele verlo y saber que jamás podremos estar juntos, preferí dejarlo durmiendo en vez de enfrentarlo esto me es muy difícil Rafael—bajo la cabeza y siento como me abraza.

—Tranquila cariño—susurra en mi oído, solo me limito a llorar, ya me acostumbre al dolor que lo último que pienso ahora es en llorar.

[...]

Ruggero

La cargo, la abrazo y la hizo reír. Sin duda ella ya tiene novio. Tarde demasiado en darme cuenta y recién puedo abrir los ojos, cojo mis llaves y me dirijo hacia la cochera, me encargo de cerrar aquella casa una vez más ocultando tantas cosas, me subo a mi auto para luego dirigirme hacia el departamento que estoy junto a mi dos hermanas.

Al llegar reviso que mis hermanas estén bien, efectivamente se encontraban durmiendo, noto como Valentina tenía lágrimas secas, frunzo mi ceño y me acerco acariciando su mejilla, siento como se remueve y me levanto pero era muy tarde la había despertado.

—Rugge—murmura, sonrío

—Piccola—respondo, veo como bosteza y se sienta apoyándose sobre la pared, pero tenía una expresión triste—¿Qué te pasa Val?—pregunto sentándome a su al frente.

—Yo...—suspira y me abraza—Karol—la nombra y se un pequeño dolor se hace presente en mi corazón, me separo de ella y acaricio su cabellera rubia.

—¿Qué pasa con ella?—pregunto.

—Quiero perdonarla—confiesa— peor no puedo—empieza a llorar y se me hace un nudo en la garganta, si hay algo que odio es ver a una mujer llorando y más si esa mujer es alguien que me importa.

—Piccola—susurro abrazándola, me siento a su lado y la abrazo, haciendo que ella se apoye sobre mi pecho.

Luego de unos minutos tratando de tranquilizar a Valentina lo logro, estaba más tranquila y ahora si puede hablar.

—Ayer me encontré con ella, nos pidió perdón a Malena y a mi llorando, nos explicó cómo fue las cosas, yo le creo, pero lo único que hice fue salir corriendo de ahí. Yo-yo me siento mal Rugge—me mira y veo dolor en sus ojos—yo quería decirle que la perdonaba que todo quedaba atrás pero simplemente al verla me recuerdo de Alessandro—baja la mirada y me tenso al escuchar ese nombre— él es mi padre Ruggero—vuelve a mirarme— a pesar de todo siempre lo voy a querer, fue quien me dio vida, y me amo—asiento tenso— sé que a ustedes no les trato bien y no saben cómo me duele eso, porque me hubiese gustado ser esa familia que siempre veía en mis películas—una lágrima resbala por su mejilla— pero simplemente el hecho de que mi papá no supo perdonar, personas inocentes como Male y tú sufrieron demasiado, me siento tan mal por ustedes. Karol desde niñas fue tan buena conmigo, aunque no lo creas me ayudo demasiado, pero no puedo terminar de creer todo lo que hizo, sé que ella también sufre pero... yo-yo ya no tengo papá Ruggero, no tengo ni a mi papá ni a mi mamá, estoy sola—solloza y vuelve a llorar, la abrazo y cierro mis ojos.