Capítulo 12

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Layla

Son aproximadamente las 6:30 de la tarde, cuando despierto abrazada de Adrián quien sigue dormido.

Me levanto pasandole por encima intentando no despertarlo y enseguida me dirigo al baño.

Veo mi reflejo en el cual mis ojos estas demasiado rojos por llorar, tengo mis labios hinchados por mordelos inconscientemente y un dolor de cabeza horrible.

Salgo nuevamente del baño para buscar algo de ropa y bañarme, antes de ingresar de nuevo al baño me dirigo a Adrian, al cual, le doy un pequeño beso en el cachete y le agradezco en un susurro.

Media hora después estoy apunto de salir cuando me doy cuenta que no lleve una blusa. Salgo sin pena alguna aprovechando que Adrian sigue dormido. El baño ha mejorado mi humor.

Mientras busco una blusa limpia escucho mi celular sonar, cuando lo encuentro deja de hacerlo y veo que hay 3 llamadas perdidas de un numero desconocido.

Me siento en la orilla de la cama marcando de nuevo el numero, al tercer tono una voz conocida suena.

-Pense que nunca responderias.- dice Aron.

-Disculpa me estaba bañando.

-Oh... Quería preguntarte sobre lo de mañana.

-Mira...- empiezo.

-Por favor, di que si o ¿me haras rogar?.- interrumpe.

-Dejame hablar. Le hable a mi prima sobre la cita de mañana y me dijo que tendriamos que salir desde temprano asi que lo siento pero no puedo salir contigo.- miento.

-Mmm... Entiendo, pero enserio quiero tener algun tipo de cita, espero la proxima vez si se pueda.

Iluso.- pensé.

-Ya veremos la proxima, hasta pronto Aron.

-Hasta pronto, Layla.- es lo último que escucho antes de colgar.

-Que mentirosa eres.- escucho detras de mi y salto del susto cayendo al suelo.

-Gracias idiota, lo hice por ti.

-Lose.- me tiende una mano para levantarme.- ¿Mejor?

-Al parecer si.

-¿Oye tienes calor?.- pregunta burlon señalando mi bra.

-Estupido.- susurro dandome la vuelta.

-Te escuche.- se rie.

Voy directo a mi ropero y me pongo la primer blusa que encuentro, me ha visto casi desnuda antes asi que ya no me siento tan mal, aunque siempre sera el unico al que permito me vea de esa manera.

Salimos de mi habitación y me doy cuenta que estamos solo Adrian y yo. Voy directamente al comedor donde hay una nota.

" Salí con Felipe a cenar, pensé que estabas muy ocupada con tu amigo y no quise molestarte, regreso antes de las 11. Nos vemos mas tarde.

Bianca."

-Parece que nos han dejado solos.- le digo a Adrian después de leer la nota en voz alta.

-Mejor para nosotros, ¿No crees?.- me dirige una mirada picara.

-No seas idiota, quieres cenar algo.- ruedo los ojos.

-Pidamos pizza.

-Hazlo, ire por mis pastillas.

-¿Apenas recuerdas que estas enferma?.- me reprocha tomandome del brazo.

-Dejame en paz.

-No quiero, me preocupas y demasiado. Quiero lo mejor para ti.

-Aveces siento que estas conmigo por lastima.- susurro.

-Nunca, Layla. Estoy contigo por elección.

-Gracias.- susurro volteandome.

-Ve por tus pastillas, pedire la pizza.

Al fin me deja ir, casi nunca tomo mis pastillas pues casi no me siento mal, solo las busco en caso de emergencia y porque sé que él a notado mi taquicardia.

Subo a mi habitación buscando en cada uno de los cajones de la mesita de noche, pero no lo veo por ningun lado.

-Te estas tardando mucho.- aparece Adrian desde el marco de la puerta.

-No seas tan desesperado. Aqui estan.

Bajamos las escaleras, cuando tengo un pequeño mareo. Adrian me sostiene antes de que toque el suelo.

-Ves, por estas cosas necesito que te cuides.- me regaña cargandome.

-Por estas mismas cosas no te digo nada.-le ruedo los ojos.

Me acompaña hasta la cocina sirviendome un vaso de agua.

-Tomatelas.- ordena.

-Mandón.

Media hora después nos encontramos acostados, con las piernas enrolladas comiendo pizza en el sillon mientras vemos una película.

Es una mala película de accion, pero él las ama y yo como buena mejor amiga lo acompaño a verla. Al terminar me doy cuenta que el muy estupido se quedo dormido, ni cuenta me habia dado y yo como sonsa viendo la tele.

-Hey, despierta.- lo muevo, intentando quitarmelo de encima ya que medio de mi cuerpo esta debajo de él

-Callate Layla.

-¿Quieres quedarte durmiendo en la sala?.- silencio.- Perfecto.

Zafo mi brazo de abajo de él y cuando estoy a punto de levantarme, ambos nos caemos al suelo.

Esta completamente arriba de mi, su cuerpo pegado al mio. Nuestros rostros separado por unos cuantos centímetros.

Siento su respiración en la punta de mi nariz. Veo el profundo color de sus ojos y con ellos recorre cada centímetro de mi cara deteniéndose en mis labios. Cuando creo que esta a punto de besarme, se levanta dejandome aturdida.

Me ayuda a levantarme y ninguno de los dos menciona el suceso que hace segundos paso.

-Deberiamos ir a dormir ya.- es el primero en romper el silencio

-Te alcanzo arriba.- no puedo ni mirarlo, ¿por que me siento asi?

Apago la televisión, recogo el pequeño tiradero y subo. Entro a mi habitación y al parecer Adrian esta en el baño, mientras sale me cambio y acomodo la cama, el dormira a la orilla y yo pegada a la pared.

5 minutos después estoy en el baño lavando mi cara y los dientes. Veo mi rostro demacrado.¿Que mierda paso entre nosotros?¿Por que se separo de mi? ¿Sentira algo mas? No,no,no, siempre seremos solo amigos, salgo del baño y encuentro a Adrian acostado en su lado de la cama.

Paso por encima de él intentando no molestarlo.

-Buenas noches, Layla.- escucho que susurra.

-Descansa.

Es la primera noche en mucho tiempo que algo del otro nos incomoda, pero intentare ignorarlo asi como lo hace él. Después de un rato mirando la pared quedo profundamente dormida de espaldas a él.

Depresiva.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora