Layla
Como casi siempre voy llegando tarde, suena el timbre de la primera clase en cuanto doy un paso dentro del Instituto y salgo corriendo directamente a mi salon.
Ha pasado casi un mes desde que deje de hablar con Adrian, casi un mes desde que estoy evitandolo. Casi un mes desde que empece a trabajar a causa de las amenazas de mi papá. Casi un mes desde que Bianca ha llevado a un hombre a la casa, diciendo que es su pareja.
Casi un mes de ver a Aron todas las tardes y de entablar una especie de amistad y algo mas entre nosotros, ninguno a mencionado el beso que nos dimos, ni pensamos hacerlo.
La profesora ya esta dentro cuando llego y hay varios compañeros fuera esperando si loa deja pasar o no, pero se limita a responder un no para todo, asi que los que estamos afuera tomamos un rumbo diferente para la siguiente clase.
Camino hacia mi casillero para tomar mis libros de la siguiente clase y mientras pasa esta hora decido ir a la biblioteca y leer algun libro.
Reviso mi celular cada 10 minutos para que esta vez no llegue tarde y cuando faltan unos 15 minutos decido salir a tomar aire. Al estar distraida choco contra el pecho de alguien y este a tirado el libro que llevo en la mano.
-Deberias fijarte por donde caminas.- dice una voz masculina.
No respondo. Solo recogo el libro y bajo la mirada la levantarme.
-¿Nadie te enseño a disculparte?-sigo callada.- Mocosa quiero que te disculpes, ¿acaso no sabes quien soy?
-Lo sabe, pero no le importas. Dejala en paz.- responde una voz familiar a mi espalda. Adrian.
En ese instante levanto la mirada y veo al chico que me molesta. Se llama Brayan y se supone es el chico mas rico que el Instituto haya tenido.
-¿A quien tenemos aqui? ¿Tu pequeño salvador, no es asi?- se burla.
-¿Y si lo soy tendrias algun problema?
-¿Chicos que hacen aqui afuera?- de repente habla nuestro director y todos volteamos a verlo.
-Lo sentimos, enseguida entramos a nuestro salon.- respondo dudosa cuando nadie mas lo hace.
-Esta bien. Muevanse.
-Da las gracias que llego, porque sino fuera asi te hubieras ganado una paliza.- habla Brayan.
-No te tengo miedo imbécil.- ataca Adrian.
-Adrian por favor, vamonos. No te rebajes.- digo dandome la vuelta y empujando su pecho para irnos.
-Hasle caso a tu amiguita.- realiza una inspección a mi cuerpo.- Porque viendola bien no esta tan fea.
-Vuelve a meterte con ella y no te vas a salvar.- su voz es gruesa y dura, lo que indica que esta furioso.
Camino medio empujando, medio jalando a Adrian. Lo unico que quiero en este momento es alejarne de esta idiota, no me importa si llego tarde o si entro a clase. Tomo la mano de Adrian y esto parece tranquilizarlo un poco, camino sin dirección alguna hasta que siento un jalo y luego unos brazos alrededor mio.
-Nunca dejare que te vuelvan a tratar asi, no importa si hay algun maestro cerca.- dice Adrian sobre mi cabeza.
Lo abrazo aun mas fuerte, me suelta para que esta vez el diriga el camino. Me lleva fuera del Instituto y nos sentamos en las escaleras de la entrada.
-Tenemos que hablar.
-No quiero...
-No la bese, creeme.- me interrumpe.- Ella se acerco a pedirme ayuda sobre una clase y al despedirse...
-Entiendo y te creo. Fui una estupida al no dejar que me explicaras, también por no contestar tus mensajes ni llamadas.
-No eres estupida, yo también me hubiera sentido asi si hubiera visto lo que tu.- habla Adrian.-Te quiero.
-Tengo que contarte algo.- me siento mal por lo que debo confesar.
-Dime.
-Se trata de Aron. Hace un mes empece a trabajar, luego te explico.- me apresuro a decir.- Me lo tope ahi, me invito a salir y...
-Dime que no aceptaste.-
-Lo hice.- se ve herido y me siento pesima.- pero hay algo mas.
-¿Que?
-Una vez... Me beso.
Adrian
Esas dos palabras hace que mis puños se cierren de impotencia y que mi respiración se vuelva agitada. Ese idiota se atrevio a besarla.
-¿Lo besaste?- pregunto pero suena mas como una acusación.
-No. No queria que me invitara todo asi que lo lleve a mi casa a ver una película, cuando se marchaba me beso.
Silencio de mi parte.
-Ni siquiera cuenta como beso. Apenas y lo senti, no importa. No te enojes.- agrega.
-¿No importa?. Tu si te enojaste y me evitasre por un mes porque mal entendiste lo mio que ni de cerca era un beso y el tuyo si.
-Lo siento.
-¿Crees que con un lo siento vas a hacer que olvide lo que me acabas de decir? Ademas de que lo invitaste a tu casa.- elevo mi voz.
-No se que decirte.- susurra.
-No digas nada. Solo callate.- digo casi gritando.
Sus ojos se ponen vidriosos, indicando que esta apunto de llorar. Nunca la habia tratado asi, pero el enojo del momento lo provocó.
Una solitaria lagrima se escapa de su ojos y ella la limpia con una mano. Aprovecho ese movimiento para atraerla a mi pecho.
-Lo lamento enserio. No queria hablarte asi, es solo que...
-¿Que?
-Estaba celoso.- admito.
-¿Celoso de él?- dice de forma graciosa.
-Si.- digo alejandola de mi.
-Él no se compara en nada a ti. Tu haces que sienta cosas que nadie mas a provocado. Haces que mi corazón lata a mil por hora con solo mirarme. Y nuestro beso fue lo mejor que me pudo haber pasado en años.
-¿Sabes que el siente algo mas por ti?- pregunto, pero sus palabras han encendido algo en mi.
-¿Crees que a mi me importa? Desde hace tiempo solo tengo ojos para ti, idiota.
-Lo lamento.
-Que quede claro que ni él, ni nadie va a cambiar lo que siento por ti.
-Te quiero.- pronuncio esas palabras que significan tanto.
-Yo tambien, imbécil. ¿Estamos bien?
-Mejor que bien.
Antes de que pueda decir algo mas. La tomo de la cintura con ambas manos y la beso, ella une sus manos alrededor de mi cuello, asi pasamos varios segundos.
Junto su frente con la mia, separando nuestros labios.
-Antes de que alguien mas se adelante, y sabes a quien me refiero, ¿quieres ser algo mas que mi amiga?
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Depresiva.
Teen Fiction"Me sentia sola. Mas sola de lo que jamas habia estado. Me sente en el suelo sintiendo como las lagrimas rodaban por mis mejillas. Nunca habia sentido un dolor tan insoportable como aquel, ¿Lo peor? Era que la unica persona que podia sostenerme en e...