Capítulo 16

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Adrian

No sabia que era lo que habia sucedido hace un momentos pero no queria preguntar. Asi que solo la segui sin saber bien a donde ibamos.

-¿A donde vamos?- pregunto tomando le la mano.

-No sé, yo te seguia a ti.- responde encogiendose de hombros

No respondi y segui caminando con su mano tomada de la mia. Pero recorde que no tenia con que pagar.

-Oye, no tengo dinero.

-Tranquilo, yo traigo. ¿Pero a donde vamos?.- pregunta.

-A un lugar que te va a encantar.- respondo una sonrisa que ella me devuelve.

Sabia cual era su comida favorita, asi que ahi me dirigí.

Caminamos alrededor de 10 minutos y ya empezaba el olor que tanto los caracterizaba.

-¿Son tacos?- pregunta Layla abrazandome.

-Claro, son tus favoritos.

-Gracias. Aunque los pague yo.

Al llegar nos sentamos en una mesa algo alejada de todo. Esperamos a que nos atendieran y cada quien pidio su orden

Llegaron los tacos y Layla no dudo en devorarlos, incluso pidio mas.

-Tranquila la comida no se ira.

-Perdon, pero no los habia comido desde hace mucho.- me dijo con la boca llena.

Estuvimos platicando sobre cosas sin sentido solo para distraernos.

Dieron alrededor de las 9 de la noche y debiamos irnos. Llamamos al joven que nos antendio para pagar y nos dirgimos de nuevo a casa.

Su prima y Felipe estaban en el comedor cuando llegamos.

-He llamado a tu papá.- dijo su prima.

-Ya te dijo a que hora y donde.- pregunto Layla.

-Sera en la unica cafetería de la plaza. Me imagino que ya sabes cual.

-No soy idiota.

-Pues lo pareces.- dijo su prima en un susurro, y al parecer yo fui el unico que lo escucho.

-Y bien ¿La hora?- pregunto Layla de nuevo al ver que su prima no respondia.

-A las 3:30.

-Esta bien. Ahi estaremos.- contestó Layla dandose la vuelta.

Yo la segui, no formaba parte de esta familia y senti que si hablaba me ignorarian.

-A tu papá no le gusto la idea de llevarlo.- agrego su prima cuando llegamos a las escaleras.

-Y crees que me importa su opinión.- contraataco Layla, quien se notaba enojada cada vez pronunciaba "papá".

-Buenas noches.- escuchamos que gritaba Bianca de abajo.

Al entrar y darme vuelta vi a Layla en el suelo, recargada de la puerta.

-No quiero verlo pero tengo que hacerlo.- dijo en un susurro

-Lose bonita, y yo voy a estar contigo. Nada te va a pasar.- respondi

-Lo prometes.

-Te lo prometo.- y lo hice de todo corazón.

-Ahora el baño te toca a ti, mereces uno. Luego buscas ropa para mañana, no quiero perder tiempo ayudandote a escoger ropa.- agregue.

-No seas mandon. Me bañare pero la ropa la busco mañana después de despertar.- dijo levantandose del suelo.

Rodee los ojos.

-Y aunque no quieras, ibas a tener que ayudarme a escoger.

-Las mujeres hacen sufrir a los hombres.- dije alzando mis brazos.

Busque ropa para cambiarme, mientras ella hacia lo mismo para bañarse. Minutos después estaba recostado en la cama escuchando el agua de la regadera caer.

Espere 20 minutos y por fin Layla salia. Me meti al baño para lavarme los dientes y después Layla se unio.

Cuando terminamos la obligue a sentarse en la cama, tome un peine y comence a cepillar su cabello.

Asi estuvimos y cuando termine volvimos a hablar de cualquier cosa. En fin nos dieron aproximadamente las 11 de la noche y decidimos acostarnos.

-Buenas noches.- dijo Layla apoyando su cabeza en mi pecho.

-Descansa.- respondi abrazandola.

Ninguno de los dos tardo en quedarse dormido.

Eran cerca de las 3 de la mañana cuando me desperte. Prendí la luz de la mesita que estaba al lado de la cama y vi a Layla.

Esta se estaba moviendo desesperadamente de un lado a otro.

-Dejame. Sueltame. Por favor no me toques. Alejate de mi.- gritaba de forma leve.

-Layla, estoy aqui para ti. Despierta por favor.- rogue.

Ella seguia repitiendo esas palabras y yo tenia mis dudas de si era una pesadilla o un recuerdo.

Depresiva.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora