Fluorescente.

1.4K 85 15
                                    

N.A: ¿Qué tal adorables lectoras? Sabemos que esperaron por el capítulo del día Martes, pero esta semana hemos estado de vacaciones en nuestro país gracias a "Las fiestas patrias" y como supongo más de alguna de ustedes deben hacer, las pasamos en familia y no hemos tenido el tiempo como para subir un capítulo para ustedes, pero ¡aquí estamos!

También queremos darles un anuncio importante, de ahora en adelante subiremos los capítulos los días Sábados, ya que son mucho más cómodos para nosotras (supongo que habrán notado que no teníamos una muy buena relación con los días Martes). El capítulo de hoy tiene un pequeño Daryl P.O.V, no influye en casi nada, es solo para darle coherencia a lo que van a leer.

No olvides comentar, Dalalai, vota y comparte nuestra historias con quienes creas la apreciaran tanto como tú... y comenten, nos encanta saber tu opinión.

Les saludan un Sábado totalmente fuera de lugar, Catalina y Paulette.

Fluorescente.

Andrea parecía no escucharme, miraba un punto fijo un poco choqueada. Miré hacia donde su vista observaba y logré por fin comprender su reacción.

Venían Rick y Hershell, ambos con un bastón que traía un caminante agarrado por el cuello. Todo el resto del grupo venía detrás con las armas en alto, apuntando a los muertos vivientes.

-¿Pero qué mierda?- Murmuré para mí.

Vi como Shane se ponía delante de ellos - ya estando a una pequeña distancia de nosotras.- y comenzaba a dispararle al caminante de Hershell traía consigo explicándole, o mejor dicho gritándole que si fuesen tan solo enfermos, no soportarían seguir vivos tras aquella lluvia de balas ... y era verdad.

Rick desesperadamente le gritaba que se detuviese, que ya era suficiente, pero para Shane parecía que jamás podría llegar a serlo. Se acercó a las puertas del granero y disparándole al candado, lo abrió.

A Andrea y a mí no nos quedó otra opción más que subir las armas y comenzar a disparar a todos aquellos caminantes que salían por la puerta del granero. Logramos ponernos en orden con los demás y hacer una fila horizontal y paralela al lugar de donde salían los muertos vivientes. Miré para atrás y pude como es que Lori trataba de tranquilizar a su pequeño y como Beth, Maggie, Patricia y Hershell lloraban la pérdida de tantos seres queridos. Volví mi vista al frente, pero ahora el shock fue para mí.

Me quedé allí, choqueada y pareciendo una estatua hecha de piedra, sin dar crédito a lo que mis ojos veían. Caminaba hacia mí. Mi padre. No llegaron a ser más de tres segundos los que duró fuera del granero sin ser disparado, pero para mí fueron horas, segundos que pasaban muy lentamente, haciendo que el momento fuera eterno e infinito.

Para los demás probablemente debió haber sido un caminante más, otro monstruo al cual exterminar, un ser insignificante, un estorbo. Puede que en vida no haya sido el mejor hombre que pudo existir, no digo que lo fuera porque claramente nunca lo fue, pero es... era mi padre. Él me crió, me enseñó a hablar y también a vivir.

Mi subconsciente me mostró una nueva opción, puso un botón frente a mí con el cual podría apagar mis emociones, estaba sobre una mesa y decía "Para apagar sus sentimientos, presione aquí" <<Presiónalo>>  Me decía <<Presiónalo y dejarás de sufrir.>> En cuestión de minutos esa opción ya había invadido mi mente casi por completo, pero no lo haría, eso solo significaría dejar de sentir, rendirme y eso no era una opción, o al menos no hasta que encontráramos a Sophia, ella era mi última gota de esperanza que me quedaba.

Y al volver a la realidad en la que me encontraba, al frente de aquel granero y con mi padre que ya no era mi padre, convertido en un caminante tirado en el suelo completamente muerto, pude presenciar como es que la gota esperanzadora que me quedaba caía en el vaso, rebalsándolo totalmente. Allí estaba la hermosa, frágil y pequeña Sophia, frente a los ojos de todos y hambrienta de sangre. Muerta al igual que mi padre, hecha un caminante.

Sobreviviendo a Dixon.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora