Capitulo 02

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Sabrina había despertado el día siguiente con todo el cuerpo adolorido, sentía con un camión le pasó por encima con 100 veces, se levanto de su cama con una mueca de dolor y camino hasta el baño con pasos lentos, en su casa no había nadie, no había señales de su hermano, ni de su padre ni mucho menos de su madre. Suspiro, en la mesa había encontrado una nota.

Espero que cuando tu padre y yo llegamos del trabajo a las 4:00 de la tarde ya tú no estés en la casa.

Junto con la nota había un poco de dinero, si madre enserio quería que ella se fuera. Entro al baño e hizo sus necesidades, se miró en el espejo, su rostro estaba lleno de moretones y había sangre seca. Se metió a la ducha con mucho cuidado, lavo su cabello muy bien al igual que cada parte de su cuerpo, pasó su mano por su vientre estaba algo abultado, ella no era de un abdomen perfectamente marcado y plano, siempre había tenido un poquito de barriguita pero la cintura pequeña y caderas grandes, al igual que piernas gruesas y un gran trasero, no tenía muchos pechos pero creía que ahora con el embarazo los iba a tener.

Un bebé, pensó ella.

E inconscientemente sonrió, termino de bañarse con el agua tibia que corría por la regadera, no sabía cuándo volvería a bañarse con agua tibia, ¿A dónde iría? No tenía familia, solo su madre, su padre y su hermano, tenía tíos, primos y su madrina claro pero en otro país, ellos solo los visitaban en Navidad o un día especial como un cumpleaños. Salió de la regadera pasó él toalla con mucho cuidado por su cuerpo adolorido.

Se colocó un mono negro y una camisa del mismo color, seco y peino su cabello, se hizo dos trenzas de raíz en su cabello castaño que se había cortado hace dos meses, le estaba creciendo rápido.

Miró su casa la cual estaba hecha un desastre y ¿Cómo no? Su madre grito, tiro y quebró muchas cosas ayer.

Empezó a limpiar la casa y a lavar la ropa, quería tener toda su ropa limpia para llevarse todo lo que podía. Tomó su maleta y metió su ropa, zapatos, también tomó su bolso del colegio y metió sus libros y cuadernos.

Se hizo un gran desayuno, panqueques con chocolates y frutas, también un vaso de leche con chocolate y guardó un poco de comida para el almuerzo por si no conseguía nada que comer o en la noche.

Guardo todas sus cosas y después de alejar la casa acomodada y limpia. Decidió irse, cerró la puerta y empezó a caminar, ¿A dónde iría? Podría ir a la casa de su amiga Mónica pero tendría que explicar porque su madre la había echado de su casa y golpeado de esa manera, Sabrina no quería que nadie por los momentos se enterara de que ella estaba embarazada.

Pasó por aquel restaurante que se le hacía tan conocido, había comido ahí desde pequeña con su familia y conocía perfectamente a los dueños de ese restaurante y a su hijo. Cuando pasó por ahí se dio cuenta de la pareja que se ría a carcajada y un dolor en su pecho se hizo presente, lo sabía, sabía que ellos volverían, ella solo fue algo de momento, algo para pasarla bien y olvidarse de los problemas, lo sabía y aún así lo acepto trayendo grandes consecuencias.

-Sabrina. -La voz de una mujer la llamo, ella se volteó y miro a la señora Diana, la madre de Matías. -¿Cómo estás?.

-Bien y ¿Usted?. -Intento sonreír, pero le dolían las mejillas.

-Me alegro, bien cariño, ¿Puedes pasar un momento? Necesito hablar contigo.

-Claro. -Suspiro.

Embarazada a los 15Donde viven las historias. Descúbrelo ahora