STALKER [K.T]

[27]

Taehyung llegó a las ocho en punto al hotel. Esperando en recepción a que llegase el hombre que lo contrató el día anterior.

—Lilia, por favor llama al contador. Buenos días.

SeokJin pasó de largo al castaño y se detuvo cuando se dió cuenta de quién era. Se giró a él y con una sonrisa lo saludó.

—Lo siento, llegué muy tarde. Sigueme por favor.

Taehyung iba detrás de él. Pudo sentirse extraño por la vestimenta gris que llevaba, sacudió la cabeza intentado no pensar tanto en ello.
El hombre abrió dos grandes puertas y entró después de él.

—Bien, Taehyung, puedes tomar asiento. El día de hoy estarás siguiendome a muchas partes, para que te adaptar, ya sabes...

Con una mano deslizó una libreta hacia él.

—¿Aquí agendaré todo?

—Todo, absolutamente todo. Si tengo que llamar al banco, lo anotaras; si tengo una cita con el dentista, lo anotaras; si mi esposa llama, me pasaras el teléfono —Sonrió. —Ella siempre llama, y eso de alguna manera me devuelve las ganas de seguir trabajando para ella.

—Entiendo. ¿Entonces debo contestar por usted?

—Tienes una teléfono en tu oficina, que está a un lado de la mía y conecta con mi teléfono. Asegurate de no darme todas las llamadas, sólo las importantes.

—¿Y eso cómo lo voy a adivinar?

—Lo sabrás de inmediato. Además de que Lilia te ayudará con algunos números. Por cierto, ¿trajiste tus papeles?

—Sí, claro que sí.

Mientras les echaba un vistazo, Taehyung miraba a su alrededor. Una oficina espaciosa, con un sutil aroma a canela, un sofá a un costado de color beige, el escritorio era muy grande y limpio. Pudo notar una fotografía de T/n, Taeha recién nacida y SeokJin.

—¿Porqué te viniste desde Corea?

—Trabajo, allá es muy difícil encontrar.

—Yo también soy de Corea, mi familia quiso venir a vivir sólo porqué querían hacer realidad su sueño americano. Basicamente crecí aquí, así que no tengo experiencia en el ámbito laboral. Aun que me encantaría irme.

—Es muy lindo, me gusta mucho y también lo extraño. Sin embargo, yo y mi mejor amigo vinimos de vacaciones pero terminamos enamorandonos.

—¿Y tu amigo encontró trabajo?

—Estuvo algún tiempo en una gasolinera. Murió en un accidente.

—Lo siento.

SeokJin inhaló y siguió leyendo. Miró el rostro del chico, algo que le llamaba la atención era su gran cicatriz. Él no era de juzgar, no obstante, quería saber que había ocurrido para que le ocasionara un impacto que marcara tanto sus facciones.

—No suelo hacer éste tipo de preguntas, espero que no te sientas ofendido...

—Le preocupa como luzco, ¿no es así?

—No me preocupa, sólo quiero saber porqué tienes eso.

—Mi padre lo hizo.

—¿Tu padre?

—No todos los padres son tan amables como lo es usted o su esposa. Yo sólo, me comporté mal y él me hizo esto para que aprendiera a no volverlo a hacer.

—¿Te comportaste mal?

Taehyung miró a otro lado, evadiendo completamente sus ojos oscuros puestos en él.

—Robé dinero de su cartera para largarme de su casa, pero al parecer no aprendí la lección porqué heme aquí, lo más lejos que he estado de él.

—A veces la vida nos da lecciones muy fuertes para afrontar otras que lo son aún más. Si tienes ésa cicatriz, entonces deberías prepararte.

Taehyung quedó callado, en realidad lo peor para él fue quedar en la cárcel por un delito que no se arrepiente de haber hecho. En su mente, los mejores años de su vida fueron aquellos en los que encontró a T/n. Había un lema y es que si no es para ti, se irá. ¿Pero y si eso que se fue vuelve a ti? TaeHyung quería encontrar la respuesta de ello y no se cansará hasta obtenerla.