SORDA

32. Ofrenda de paz.

— Cómo?.- con la cara bien seria.

— Mhmm... como me escuchas.-

— O sea que sí salían y te dejó?.-

— Por qué no podría ser yo la que lo deje? Podría ser malo en la cama.- pico su paciencia y lo veo ponerse pálido.

Al reírme, se dio cuenta de que era mentira.

— No es gracioso.-

— La virginidad es un invento machista para mantener a la mujer sin relaciones hasta que la iglesia lo avale, para después caer en la monogamia y mantenerse con un sólo hombre.-

— Sabes que yo no pienso así.-

— Pero si cuidas la virginidad como si fuese algo sagrado, cuando seguro andabas exhibiendo la tuya desesperadamente para que te la quiten.-

— Corrección, cuido TU virginidad, en realidad cuido TU corazón.- picándome con el dedo índice.

— Crees que nadie se puede enamorar de mí y que sólo me usarían?.-

Negó.

— Creo que podes enamorar a cualquiera con esos ojos y una simple sonrisa.- poniendo su dedo en mi nariz.— pero los chicos somos unos idiotas, por querer impresionarte o por simple orgullo, no nos mostramos tal cual somos.-

— Wow, esas son palabras importantes.- le digo divertida.

— Qué pasó entonces con el perfecto de "Lucas"?.-

Y mi humor cambió.

— Al menos fingí empatía por mí, saca esa sonrisa... el día del bautismo, todo fue muy bien en el día, sin darnos cuenta, él me tenía de la mano y hablamos, pasamos una linda tarde... pero para cuando me dejó en casa, suspiró y dijo que "todo esto se le estaba yendo de las manos." Y era como si se lamentara... habiendo dicho eso, decidí que no nos íbamos a ver más, al menos por ahora. Me sentí mal? Si. Me lastimó lo que dijo y cómo lo dijo? Si. Pero yo sabía donde me estaba metiendo y lo dejé, me seguí juntando con él, hace un mes que nos hablamos sin parar... no debería de dolerme tanto, pero tienen razón todos. Es mayor y por el momento yo ni se si voy a terminar el secundario. Ni hablemos de mis ganas de ser Biotecnologa o Médica analista.-

Levanta su ceja y me mira con esos ojos brillantes.

— No es sorpresa Leo, siempre quise ser médica, pero no siempre me llevo con las personas, menos ahora que no puedo escuchar sus síntomas.-

— No te desvíes... entonces vos lo terminaste?.-

— No se termina si ni siquiera se empezó.-

— O sea que ni siquiera te besó?.- negué simple, como si fuese obvia la respuesta.

— En la mejilla cuenta? Porque si es así vos y yo ya estaríamos casados.- haciendo que ría.

— Qué tipo cobarde.-

— No te entiendo a veces.-

— Al menos se dió cuenta antes de hacerte mal o hagas algo de lo que te arrepientas.-

— Voy a tener sexo con las personas que me inspiren confianza, Leo.-

— Personas?!.- abriendo sus ojos de par en par.

— Decime que tu novia es la única con la que estuviste en toda tu vida.-

— Entonces ni te besó... eso me alivia un poco.- volviendo a la conversación.