SORDA

67. Peleas. 1/3

• Es hermoso!.- me llega esa notificación y levanto la mirada de mi libro obligatorio para literatura, porque yo si tengo clases...no se cómo habrán hecho estos colombianos tramposos para saltearse la escuela; y veo a Morena con Amancay y Dorian.

— Mi enano Dorian? Claro que es hermoso, miren esos ojos y ese pelo de helecho...- digo levantándome de mi silla, yendo hacia la cama donde están todos.

Bajan la tablet y me sonríen.— Hola.- dice Dorian quien ya aprendió un par de señas, es un autodidacta y muy interesado en muchas cosas.

Enarqué una ceja.— Qué hacen? Quién es hermoso?.-

— Mmmm... papá de joven?.- consulta Amancay y niego decidida.

Morena bufa y aclara con pena.• Tu ex novio...- me muestran la tablet y ahí estaba una de las pocas publicaciones que él había hecho de cuando salíamos. Habíamos acordado que no íbamos a hacer eso por nuestras posiciones en el club, pero quería mínimamente una foto, por lo que salimos sonriendo uno al lado del otro. Ese día, habíamos salido a pasear con Lalo a tomar un helado y me había manchado la nariz con helado de chocolate.

Lázaro sacó esa foto y Lucas la cortó para poder publicarla. Tenía mis piernas sobre las suyas por lo que sólo se ve nuestros torsos en la publicación. Claramente también subió una con los tres, sería muy sospechoso, en especial para la metida de Gema. Pero ese recuerdo hizo que me duela el pecho por dos razones, lo que le siguió a esa foto, fue un beso... y segundo... me di cuenta de que en lo ultimo de nuestra relación, ya no había esa felicidad infinita que sentía, esas ganas de estar con él, todo se había vuelto tan... monótono.

Suspiré— Si... es hermoso.-

• Perdón Nara... no queríamos...-

Me encogí de hombros.— Las cosas pasan enanos... y si, sigue igual de lindo que en esa foto.- abrazándome a mi misma.

• Pero...- me volteo y veo a Dante atrás mío.— yo soy más hermoso...- seña ese narciso.

Es verdad, no lo niego, es igual a mi tía Laura, por suerte, aunque tiene esas facciones duras igualitas a las de mi tío. Bastian, en cambio, es más parecido a su padre. Pobre rolo, aunque lo único que heredó de su mamá, fueron esos ojos parecidos a la malaquita, ese verde extraño, aún así muy lindo.

—~ DI QUE SOY HERMOSO!.- samarreandome por los hombros, sacándome de mis pensamientos.

— Ay, bruto!.-

— Bruto no! Her- mo-so!.- bufé y me lo saqué de encima.

***

• No es justo que se vayan los grandes y los chicos no...- se queja Morena.

• Ninguna hija mía saldrá de juerga aquí en Buenos Aires! He dicho!.- ese, claramente fue el General Isaza.

• Dictador!.-

• Revoltosa!.-

• Opresor!.-

• Reaccionaria!.-

• Conservador!.-

• Malcriada!.-

— Ey!.- levanto mi mirada y veo a mamá reclamando lo mismo que yo.— yo también soy malcriada.-

• Anciano!.- responde y cuando la veo, su cara de victoria iluminaba la sala.

• Qué?!.- vuelvo a levantar la mirada y papá estaba ahí.

— Óigame irrespetuosa, su padre es mayor que yo por días! Y si a ese rolo le dicen viejo, me lo dicen a mi por asociación, y me niego! Así que retire lo dicho... si aquí hay alguna anciana, esa es su tía Emiliana.-