Al bajar del tren y dar el primer paso en Kentara, sentí por un instante casi como si la tormenta hubiese terminado, luego una voz interna me recordó que esto apenas comenzaba, sin embargo en unos minutos más, estaría en casa viendo a mis hijos y custodiado por un enorme escuadrón de agentes Aquilia, que según mis órdenes, deberían permanecer ahí hasta que la crisis fuera resuelta.
-Ya estamos cerca, señor Ebenezer.-me dijo Regial.
La estación de trenes de Kentara me dio una calida bienvenida. Estar ahí parado tan cerca de casa, me devolvió un poco de seguridad, así que emprendimos rápidamente el camino de regreso.
-¿Cuál es el plan ahora que llegamos a la ciudad?¿Qué pasó con Edmund Nealer?-preguntó Goleon en tono inocente al momento de subirnos al taxi. Si hubiera anticipado mi llegada, probablemente uno de mis autos privados estaría recogiéndonos, sin embargo no hubo tiempo para protocolos.
-Limítate a hacer lo que se te indica y no hagas preguntas, Goleon.-lo reprendió Regial. Yo no hubiera tenido problema alguno en responder al joven, pero no quise disminuir la autoridad que ejercía Regial sobre sus agentes, así que únicamente dirigí una sonrisa empática a Goleon.
El conocido y familiar camino a la residencia Ebenezer me acogía conforme avanzábamos y recorríamos las calles que nos conducirían a mi hogar. Me anunciaban la seguridad que sentiría al estar cerca de Eli y Niccolo.
Cuando cruzábamos por el gigantesco puente de Kentara, Regial comentó –Esto es extraño.-¿Qué cosa?-pregunté al agente.
-Allá, a lo lejos. Veo dos nubes de humo negro.-Regial, que iba sentado en el asiento del copiloto, miraba a la distancia desde la ventana del taxi. Observé en la misma dirección que él, y vi a lo que se refería, dos grandes columnas de humo negro se alzaban desde dos distintos puntos de la ciudad.
-Es verdad, es bastante…peculiar, el hecho de que dos lugares se incendien el mismo día ¿no lo creen?-dijo Goleon curioso.
-Supongo que lo es.-dije sin darle mucha importancia y dando por concluido el tema.
Tras cruzar el puente y dar un par de vueltas, llegamos al número 221 de la calle Banker, sin embargo lo que vi a continuación me pareció exagerado. Decenas de automóviles negros como en el que habían llegado a la estación los agente que me acompañaron a Triev hacía unos días, se encontraban rodeando mi residencia. Las gigantescas letras “E” de los portones eran incluso tapadas por algunos autos aún más grandes. Había agentes Aquilia por todas partes, en las banquetas mirando peligrosamente a todo el que se acercada, en los jardines, y todos con sus distintivas “alas” rojas.
-Hmm.. caballeros, me parece que tendré que tomar una ruta alterna. Por esta calle dudo que logremos pasar.-dijo preocupado el taxista.
-Está bien, es aquí a dónde vamos. Gracias por traernos.-respondí mientras pagaba la cuota. El hombre me volteó a ver sorprendido; no se había dado cuenta a quien estaba transportando en primera instancia. Después se giró a observar detenidamente a los agentes que me acompañaban y haciendo énfasis en sus “alas”, los identificó.
-Hasta luego.-concluí mientras bajábamos del vehículo.
Apenas pusimos un pie en el piso, un grupo de agentes con cara de pocos amigos que se encontraba cerca del portón principal, se aproximó a mí y a los agentes que me acompañaban. Por un segundo, y a juzgar por su imponente caminar, supuse que me habrían confundido con algún civil, pero en cuanto estuvieron lo suficientemente cerca para reconocerme, su caminar se relajó un poco.
-Gobernador Ebenezer, qué sorpresa el verlo por aquí. Supusimos que algo había ocurrido. Recibimos una llamada de emergencia desde su residencia por parte de su mayordomo, el señor Dante Heger. Nos informó que era imperativo que el mayor número de agentes se presentara para resguardar la propiedad hace dos días. Sin embargo la cantidad de agentes a disminuido desde entonces.
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Erebo
FantasyA mediados de la revolución industrial de Zefest, Un lugar gobernado por una oligarquía elitista. Un mercado entero se ha construido alrededor de un artefacto capaz de albergar los talentos, experiencias, y recuerdos de las personas. Estos artefacto...