Shawn
Desde que esto empezó he estado esperando la situación adecuada para hablarle al padre de Eva sobre lo que está pasando entre ella y yo, hoy después de que el sábado ella aceptara, estoy pensando cómo hacerlo. Hace mucho no sentía nervios, para ser sincero son pocas las situaciones que provocan que éstos se instalen en mí, pero creo firmemente que los nervios son indicadores de que algo te importa, y Eva me importa.
Eva. El solo pronunciar su nombre con la voz en mi mente, esa voz que todos tenemos, hace que quiera salir a buscarla. Así que ésto es realmente como se siente el amor, no aquello que… El sonido de dos toques en la puerta de mi oficina hace que lleve mi atención hacia ella.
―Adelante.―hablo a quien quiera que se encuentre detrás de la puerta, aunque me doy una idea. Lo he estado esperando. Se abre y aparece el padre de Eva.
―¿Me necesitas?―pregunta cerrando la puerta detrás de él y avanzando hacia mi escritorio. Comienzo a sentir una leve cantidad de sudor en las palmas de mis manos, ¿en serio Mendes? Controla a tu adolescente anterior.
―Si, por favor toma asiento Will.―No exageraba con Eva sobre la confianza, sus padres fueron amables conmigo desde el principio, jamás escuché un cuestionamiento de su parte sobre mi edad y la experiencia que podría tener cuando llegué aquí. Y Will, ahora sentado frente a mí, me había pedido que lo llamara de esa manera, es un buen hombre.
―Hay algo de lo que necesitamos hablar…―comienzo a decir, buscando las palabras.―Más bien, yo comienzo a hablar y tú me escuchas.―Digo con la intención de hacer más ligero el ambiente, pero por la mirada que me dirige William sé que mis palabras han tenido el efecto contrario. No está preocupado, pero si serio.
―¿Algo anda mal en el hospital?―dice recargándose sobre la silla frente a mí.
―No, no. Nada de eso, afortunadamente.
―Bien, ¿entonces en qué puedo ayudarte?―Mierda Shawn, habla de una vez.
―Es, es respecto a Eva…―digo por fin. Su entrecejo se frunce y se inclina hacia delante. Mierda, me va a matar. Qué demonios, ¿acabo de pensar eso? ¿Quién soy ahora mismo?
―Eso si me sorprende. Jamás un maestro de ella se había acercado para hablarme de ella, ¿qué sucede Shawn?―se recarga de nuevo sobre la silla y tira de su bata hacia abajo para acomodarla y yo trago saliva.
―En realidad no quiero hablar del aspecto académico.―Está confundido, baja su menton y entrecierra los ojos. Es mejor que hable ahora.―Verás, ella y yo estamos saliendo.―suelto de golpe.
―¿Saliendo?―su ceño vuelve a fruncirse.―¿Qué tipo de saliendo doctor Mendes?―Mierda. Doctor Mendes. Mierda. Mierda elevado a la décima potencia.
Tengo la sensación de que apenas y pronuncié aquellas palabras William comenzó a odiarme. Y la verdad no lo culpo, si trato de ponerme en su posición e imaginarme que: tengo una hija y alguien, 1)mayor que ella, 2)maestro suyo viene y 3)me dice que están “saliendo” no correría a abrazarlo. Es su princesa, eso lo entiendo. Entonces me apresuro a corregir mis palabras y decirle lo que a mi me gustaría escuchar en su lugar. Lo que supongo que a todo padre le gustaría escuchar.
―Sólo saliendo no, William. En una relación. Y me gustaría dejar en claro que es un tema muy serio para mí, no pretendo jugar.―¿Jugar Mendes? Ni siquiera en tu primer día como residente te pusiste así. Escoge bien tus palabras, estás cavando tu propia tumba.
―¿Y por que Eva no me ha mencionado nada sobre esto?―pregunta. No está enojado, sino asimilando todo. Es un hombre cabal y sé que está tratando de llevarlo de la mejor manera, lo cual agradezco.
―Aún no quería hacerlo. Y… acordamos que yo sería quien hablaría primero contigo.
―Bien.―es todo lo que responde antes de hacer una pausa.―Estás consciente de que eres su primer novio, ¿verdad? ―me dice. No lo estaba. Mis ojos se abren y se da cuenta de que no lo sabía.―No lo sabías, ¿están seguros de que se conocen lo suficiente para estar en una relación?―Ajá, buena jugada.
Eso no me va a detener, William. Deberías conocerme.
―No sabía ese detalle. Y te doy la razón si crees que aún hay muchas cosas que debemos saber uno del otro, pero te aseguro que estoy dispuesto a pasar toda una vida conociendo a Eva. No quiero sonar intenso, ni mucho menos William, pero quiero que sepas que soy serio.―Al parecer lo que he dicho ha sido bueno y no tuve más que decir la verdad. Creo divisar una sonrisa en sus ojos y para mí es suficiente.
―Me parece importante que lo menciones, porque no estoy dispuesto a permitir que Eva sea el pasatiempo de alguien.―dice con firmeza.―Eva merece ser respetada, Shawn.
―Y yo estoy dispuesto a hacerlo, a nada menos.―respondo con la misma firmeza que él habló.―Se lo dije a ella y hoy te lo digo a ti, le daría mi vida.
―¿Es necesario que mencione el “si le haces daño yo me encargo de ti”?―dice más tranquilo, arquea una ceja y eso hace que me libere un poco de la tensión acumulada. Recuerdo las palabras de Eva, su padre las ha pronunciado y esbozo una sonrisa, o al menos eso creo.
―No le haría daño a la mujer de mi vida.―eso no lo he pensado antes de decirlo. Es una confesión, para él y para mí.
―Bien, aún así debes recordarlo. Eva y su madre son lo más valioso que tengo, recuérdalo Shawn.―advierte.
―Lo haré. Entonces… tenemos tu apoyo, ¿no? ―pregunto elevando la mano derecha y haciendo un ademán.
―Lo tienen. ―dice levantándose y yo hago lo mismo.
―Gracias, William.
―Puedes seguir llamándome Will, Shawn. No me hagas reconsiderar quitarte ese privilegio.―me extiende su mano y yo la estrecho sin dudarlo. ―Ahora veo el porqué de tu cambio de ánimo. ―agrega.
―¿Cambio de ánimo?
―Recientemente te había notado más relajado, no menos demandante, pero si ¿feliz? ―Feliz William, dilo sin una gota de duda. Tu hija me hace feliz.
―Feliz. Como no tienes una idea.―sentencio. Eva me tiene descubriendo una diferente faceta de mí. El amargado e insensible Mendes sintiendo todo tipo de sensaciones y emociones que antes había declarado para cualquiera menos para él.
―Eva es increíble, y tú eres un buen muchacho Shawn. No tengo duda de que les ira muy bien.―dice acomodando su bata de nuevo.― Ahora, tengo pacientes que ver, que tengas buen lunes.
―Adelante, y gracias.―asiente, camina hacia la puerta y abandona la oficina.
Una vez que William se ha ido, vuelvo a tomar asiento en la silla detrás de mi escritorio. Aquello ha ido bien, mi vida puede ir bien. Con Eva a mi lado no necesito nada más.
“Tu papá acaba de salir de mi oficina. Se lo he dicho. Todo está bien” le escribo un mensaje a Eva y se lo envio, espero su respuesta.
“Bien, aún tengo que hablar yo con él.❤”
Tengo que concentrarme de nuevo en mis asuntos, así que tomo los papeles sobre mi escritorio para seguir preparando mi exposición para el congreso que cada vez está más cerca. Es muy importante, para mi y para el hospital. Tiene que ir de la mejor manera posible. También tengo que revisar los exámenes que he aplicado hoy por la mañana, ya me divertiré un poco con las respuestas que me encuentro siempre que lo hago.
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Bueeeno, ya llegó el viernes y trajo consigo esta actualización👀
Es la primera vez que podemos leer desde la perspectiva de Shawnie❤ Habrá más, aún quedan muchas cosas por saber de él, pongan atención a todas las palabras🙊💙
Ahora, les tengo una pregunta y es sobreeee... El “contenido para adultos” xD
¿Les gustaría leerlo en esta historia o nqv? La verdad es que ya escribí sobre eso jeje
Los amooo💙
P.d: Voten y comenten❤
P.d: Gracias por leer✨
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Hospital [Shawn Mendes]
Fanfiction«Serás un gran médico» le decía toda persona que conocía a Eva Harvey. El tercer año en la carrera de medicina estaba frente a ella, aún tenía muchísimo que aprender. «No estoy aquí para ser amable y mucho menos su amigo» había advertido el Dr. Men...