Capítulo 8

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El regalo de Damien

Lily vio como su salón de clases se llenaba con sus estudiantes de séptimo año. Sus ojos verdes se posaron en Harry por un momento antes de dirigirse a Ron y Hermione que estaban sentados a ambos lados de su hijo. Sintió que su corazón se aceleraba al ver una extraña sonrisa revolotear en la cara de Harry antes de que la ocultara de nuevo. Parecía que Ron había comentado algo que a Harry le parecía muy divertido. Habían pasado dos semanas, desde la muerte de Bella y Harry estaba empezando a mostrar signos de recuperación. Por supuesto, Lily sabía que Harry estaba lejos de curarse en ese incidente en particular, pero al menos estaba sonriendo y hablando con sus amigos nuevamente.

Lily se había esforzado mucho para que Harry hablara de Bella. Ella sabía que él necesitaba hablar sobre sus sentimientos con respecto a su muerte, pero Harry no había sucumbido a sus intentos. A regañadientes, ella se había rendido, pero le había hecho a Damien prometer que él intentaría que Harry se abriera. Qué tan bien iba ese intento, ella no lo sabía. Tenía más fe en el hecho de que Damien podría lograr que Harry se abriera mejor que ella y James.

Cuando Lily se movió para pararse frente a su clase, no pudo evitar notar cuán cansado se veía Harry. Ella lo había notado antes, pero lo había atribuido a lo que él había pasado, lidiando con la depresión por la muerte de Bella. Ahora que ella lo miró bien, se dio cuenta de lo pálido que estaba. Sus vívidos ojos verdes parecían carecer de su brillo habitual. Ella decidió retenerlo al final de la clase y asegurarse de que estaba bien.

Repasó la conferencia, notando la falta de atención que Harry estaba prestando. Parecía estar luchando para mantener los ojos abiertos. Lily sabía que a Harry le gustaban las clases de pociones. Él era extremadamente talentoso cuando se trataba de preparar pociones y siempre parecía disfrutar de su clase. Hoy, sin embargo, no le prestaba la menor atención. No estaba aburrido, Lily podía decir eso. Solo se veía completamente fatigado.

Repasó la lista de pociones que iban a estudiar en las próximas semanas. Ella notó a Ron sentado derecho en su silla, su atención indivisa estaba centrada en ella mientras ella repasaba las pociones comunes utilizadas en la Curación. Lily sabía que Ron quería ser un sanador. Molly le había dicho eso de pasada.

—Se usan muchas pociones, pero solo repasaremos las que se usan con más frecuencia. Las pociones de uso diario en la mayoría de los pacientes son las más conocidas, como la poción sin sueño, la poción para reponer los músculos y muchos tipos diferentes de pociones para aliviar el dolor. Vamos a ver este en particular— Lily se movió para pararse detrás de su escritorio.

Repasó la conferencia, lanzando pequeñas miradas casuales a Harry. Ella sabía que Harry disfrutaba de las pociones; era muy talentoso en la elaboración de pociones y desde que comenzó a asistir a su clase, se dedicó a prestarle atención, por lo que era extraño que Harry no pareciera tan interesado en la conferencia. En una inspección más cercana, parecía como si estuviera teniendo problemas para mantener los ojos abiertos.

Ron, por otro lado, nunca se había visto tan absorto en una conferencia. Sus ojos nunca dejaron a Lily y estaba anotando las notas con un entusiasmo entusiasta.

—Hay muchas pociones potentes y notorias utilizadas en la curación. Las pociones, como la poción Hatalum, la poción Sedare y la poción Comae, se utilizan para curar, pero solo en casos extremos e inusuales. Estas pociones solo se usan con moderación y solo en pequeñas dosis evitará otras complicaciones desafortunadas. Las cubriremos brevemente a su debido tiempo, pero es suficiente por hoy—

Lily vio como la clase empacaba y se preparaba para irse. Ella llamó a Harry justo cuando él se levantó de su asiento.

—¿Algún plan para esta noche?— preguntó tan casualmente como pudo.

A Part Of Me (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora