❝Cuídalo Bien❞. [2Jae]

capítulo 24.

Im Jaebum caminaba de un lado a otro con preocupación. Lo último que supo de si querido novio, fue que estaría bien, y también un grito por parte de él que decía algo como que lo odiaba por esos momentos. ¿Por qué lo odiaba? No era su culpa no saber que era fértil. Quiso entrar con él, mas estaba seguro de desmayarse al inicio de la cesaría.

Ahora estaba arrepentido, quizá desmayado tendría la posibilidad de dormir y despertar hasta que todo hubiera terminado. Porque en esos momentos se moría de ganas de saber por qué dejó de oír los gritos de Youngjae en un momento a otro.

—¡Jaebum! —escuchó de una voz conocida. Sabía que Bambam no podría faltar en un momento así.

Sin preocuparse mucho, soló logró formular una pregunta:

—¿Y tu novio?

—Fue por un café, es lo de menos —lo tomó por los hombros—. ¿Cómo está Youngjae?

—¡No lo sé! —sus nervios volvieron— L-llevan como una hora ahí dentro y..., ¡estoy frustrado! ¿Y si le pasó algo malo? ¿Y si el bebé está mal? ¿Y si...?

Recibió una cachetada. De cierta manera, fue lo que necesitaba.

—Tranquilo, Jaebum hyung —fue  la primera vez que lo oyó decirle así—. Jae estará bien, el doctor se los dijo, ¿no? Iba saludable todo.

Jaebum suspiró.

—Sí, todo bien.

—Genial.

Yugyeom llegó un par de minutos después, con dos vasos con café y uno de chocolate caliente que, adivinó Bambam, era para él. Parecía estar tranquilo con todo ese asunto, claro, pensó Jaebum, como él no estaba siendo padre. ¿Y si Yugyeom era fértil? No se imaginaba verlo con una pansa grande y Bambam haciéndolo de "novio protector".

—¿Y cómo está Youngjae hyung?

—No sabe...

—¿Familiares de Choi Youngjae? —las palabras de Jaebum quedaron al aire y en cambio de oyeron las de una enfermera.

Los tres corrieron hacia ésta.

—¡Somos nosotros! —exclamaron a la vez, mas en cambio continuó Jaebum—: ¿Está todo bien?

Solo se sintió aliviado cuando ella sonrió.

—Por supuesto. Hubo unos problemas pequeños porque la anestesia no le hacía efecto, y no podíamos darle más. Pero él fue muy fuerte para su primera vez.

—¿Podemos verlo? —preguntó Bambam.

Ella se llevó un dedo a los labios.

—Ahora continúa recuperando sus fuerzas, pero pueden ver a los bebés. Uh... solo una persona, claro.

Jaebum asintió. Bien, él iría a conocerlos y... «¿acaso dijo "los"?» Yugyeom fue el primero en reaccionar.

—¡Son dos! —girtó— ¿Cuántos hijos produces, Jaebum hyung?

—Y-yo... —estaba atónito—. Quiero verlos.

—Venga conmigo, por favor.

Jaebum, con los nervios a flor de piel, apretando sus puños y sudando. Si había dicho "los bebés", quiere decir que son niños, ¿no? ¡Entonces él habría ganado! Su emoción subió más.

Cuando se pararon detrás del cristal, había dos camillas pequeñas. Una de ellas se resaltaba la cobija rosa y, en la otra, azul. Ambas tenían la etiqueta "Im Jaebum, Choi Youngjae".