Nueva familia

3 semanas después

3 semanas habían pasado desde la conversación que tuvieron después del malentendido con Laxus.

Le contaron a Happy que eran pareja, el cual se quedó en shock durante el resto del día, preocupando a Natsu.

Ahora, la pareja de fuego y hielo se encontraba en su casa, la cual ya habían terminado mucho tiempo antes.

Estaban tumbados en la cama matrimonial que habían comprado únicamente para su casa.

El pelirosa se levantó de la cómoda posición en la que estaba para ir al baño a devolver lo que había comido ese día. No era la primera vez, ya llevaba dos días que no podía mantener en su estómago lo que comía, siempre echándolo fuera pasado un rato. Esto preocupaba a Gray, que no podía hacer nada por él, solo estár apoyándolo cada vez que volvía con el rostro pálido y los ojos llorosos por el esfuerzo que hacía al vomitar.

(...)

Otros dos días pasaron, y ahora se encontraban caminando por el bosque, en un intento de que el aire consiguiera calmar las nauseas del menor.

Caminaron hasta que se encontraron con alguien que no pensaban ver.

--Nii-san --dijo sorprendido el menor al ver a su hermano parado delante de ellos.

--Hola Natsu ¿cómo llevas el poder de E.N.D? --preguntó curioso.

--La verdad... aún no he intentado utilizarlo, nos hemos centrado más en poder mantener el peso de las alas que en el poder de demonio --contó con una sonrisa nerviosa.

No habló más cuando una arcada le invadió y se fue al arbusto más cercano.

Zeref contempló como se iba y escuchaba el sonido del vómito, para luego mirar con ira al mago de hielo, volviendo sus ojos rojos.

--No tomaste precaución ¿verdad? --acusó, acercándose amenazante.

--¿Lo de la nota? Pues... no --respondió nervioso, dando un paso atrás por precaución.

--Idiota ¿sabes lo que eso significa? --casi le gritó terminando de acercarse, quedando a dos pasos de distancia.

--¿No? --titubeó al dar su respuesta, viendo la mirada del pelinegro, que te deparaba una muerte segura.

--Significa que ahora está embarazado, idiota --siseo para que el pelirosa que estaba devolviendo lo comido no se enterara.

--¿Emba-razado? --preguntó entrecortado sin entender.

--Algunos demonios tienen la capacidad de tener hijos, dando igual si son hombres o mujeres, y Natsu es uno de esos casos, por eso dejé la nota, pero como cabrón necesitado la ignoraste --habló con ira.

Gray no podía creer lo que le estaba diciendo. Natsu ¿embarazado? Parecía de locos, aunque sí era verdad que era raro el comportamiento del dragón de fuego. Vomitando sin razón aparente, queriendo comer cosas extrañas, protegiendo inconscientemente su estómago. Algo en su cabeza hizo "click", era verdad, el pelirosa estaba embarazado, iba a tener un hijo o una hija con el amor de su vida, la felicidad no le cabía en el cuerpo, pero luego recordó en la situación en la que se encontraba, volviendo a centrarse en el mago oscuro que prácticamente quería despedazarlo como a un muñeco.

--Lo siento, ya estoy mejor ¿qué me he perdido? --interrogó al ver a su hermano y pareja en esa situación.

--Gray te lo explicará todo, me tengo que ir, ya nos veremos, Natsu --se despidió y desapareció en un agujero negro.

Natsu miró extrañado al otro dragón, ya que parecía haber entrado en sus pensamientos y no querer salir.

--Gray ¿nos vamos a casa? --habló con un ligero temblor por si el azabache se enfadaba.